domingo, 31 de agosto de 2014

MONS. MARCEL LEFEBVRE Y EL SEDEVACANTISMO

  
Muchos círculos "tradicionalistas" cuestionan a Mons. Marcel Lefebvre el no haberse pronunciado contra los antipapas del Vaticano II, y aún afirman "Aprobó todas las reformas del conciliábulo; y hasta su muerte trató de negociar con Roma. Por tanto, el reconocía a los antipapas conciliares". Pero nada más lejos de la realidad. En 1980 las cosas no estaban tan claras como ahora, por ello no podemos juzgarlo como si viviera en nuestro tiempo. Aunque hubo indicios que él mostró, sí, y -de acuerdo al Derecho- de ellos se puede inferir la existencia de los hechos y las responsabilidades que puedan haber.
  
MARCEL LEFEBVRE ERA SEDEVACANTISTA. Él aceptaba la hipótesis de la Sede Vacante como una posible respuesta frente a las innovaciones de la iglesia deuterovaticana y sus líderes, que se apartaban del Catolicismo. Constantemente hacía la diferencia entre la "Roma eterna y Católica" y la "Roma pagana y anticristo". Y al fundar la Fraternidad San Pío X, en 1970, las cosas en la Iglesia iban mal, aunque no tanto para que él mismo aceptase entonces como conclusión la Vacancia de la Sede Apostólica por herejía de los pontífices.
   
Ya en los últimos años de su vida, sobre todo hacia 1988, cuando la Operación "Supervivencia de la Tradición" (la Consagración de los obispos), Lefebvre estuvo personalmente cercano a la conclusión teológica del Sedevacantismo. Aún, el mismo planteaba esta posibilidad en sus sermones y conferencias, dejando a cada quién tomar partido.
    
Si Mons. Lefebvre supo y denunció que las cosas andaban mal con Wojtyla, y señaló a Ratzinger como hereje pertinaz, ¿qué se dejaría a Bergoglio, si él viviera hoy?
   
Si quieres saber sobre el Sedevacantismo, sus fundamentos y consecuencias, te recomendamos leer los artículos rotulado como SEDE VACANTE en MILES CHRSITI.

¿COREA DEL NORTE ES SEDEVACANTISTA? ¡PERO SI SON COMUNISTAS ATEOS!

Traducción del Comentario de los Padres de TRADITIO
 
Piongyang disparó varios misiles cuando Bergoglio/Francisco llegó a Corea del Sur.
Piongyang se refirió a Bergoglio como el "auto-proclamado" Papa, causando la especulación sobre el Sedevacantismo entre los Norcoreanos.
Piongyang también acusó a Bergoglio de actuar no como Sr. Humilde, sino como Don Eclipse. 
Corea del Norte es comunista, por supuesto, pero a Bergoglio le gustan los marxistas, y Piongyang parece estar viendo algo que otros no ven.
   
Corea del norte disparó un lote de misiles de corto alcance mientras Bergoglio/Francisco llegaba a Corea del Sur el 14 de Agosto de 2014. Respondiendo a los cargos de que ello era a causa de la visita de DecimeJorge, Piongyang insistió que las pruebas fueron realizadas en el contexto de un aniversario más de la liberación coreana del Imperio japonés (15 de Agosto de 1945).
    
En ese punto, Piongyang se refirió a Bergoglio como el "autoproclamado" papa, llevando  a la especulación sobre la existencia del sedevacantismo en el Norte. Un oficial norcoreano inmediatamente acusó a Bergoglio de hacer una escena. "Sólo tenemos la curiosidad de por qué el papa (sic), entre todos los días de este año, escogió el de nuestro lanzamiento de misiles (planeado desde tiempo atrás) para visitar el Sur", dijo el oficial [Parte de la información de este Comentario proviene de la agencia Reuters].
  
¿Francisco Bergoglio reprobó el examen de Papa verdadero? ¿Fracasó en la prueba de aparentar humildad, y por ello pretende eclipsarlo todo? Piongyang, al menos, contestó afirmativamente estas preguntas.
   

jueves, 28 de agosto de 2014

DE LA TIARA PAPAL

La Tiara y las Llaves de San Pedro, los símbolos del Papado
   
La Tiara papal (“trirregno”), y sus tres coronas tradicionalmente representan varias cosas:
  • Los oficios y poderes sacerdotales del Papa: Enseñar, Decretar y Santificar (como Maestro, Legislador y Juez).
  • La autoridad papal sobre la Iglesa Militante, la Iglesia Purgante y la Iglesia Triunfante.
  • La autoridad del Papa como soberano: La primera corona, la primacía sobre los obispos (poder de ordenación); la segunda, su jurisdicción universal (poder espiritual); y la tercera, su derecho a gobernar el Patrimonio de San Pedro y los otros Estados de la Iglesia, y su derecho como Vicario de Cristo en relación con otros gobernantes y Estados (poder temporal).
  • La Santísima Trinidad.
  
El rito de coronación del Papa, que se lleva a cabo precisamente por la imposición de la tiara de tres coronas, dice: «Áccipe Tiáram tribus corónis ornátam, et scias te esse Patrem Príncipum et Regum, Rectórem Orbis, in terra Vicárium Salvatóris Nostri Jesu Christi, cui est honor et gloria in sǽcula sæculórum» (Recibe la tiara ornada de tres coronas, y sabe que tú eres el Padre de príncipes y reyes, el gobernante del mundo, y el Vicario en la tierra de Nuestro Salvador Jesucristo, al que se deben el honor y la gloria por los siglos de los siglos). Amen.
 
Coronación de Pío XII, el último Papa de la Iglesia Católica (12 de Marzo de 1939).
  
Al finalizar el deuterovaticano concilio, Pablo VI descendió las gradas del Trono papal en la Basílica de San Pedro y dejó la tiara sobre el altar, como «un signo de la renuncia a la gloria y el poder humano, concordante con el renovador espíritu del Vaticano II». Por ese acto, él manifestó rechazar el dogma Católico Romano sobre el Papado, como lo define el Concilio Vaticano en favor de alguna perspectiva no-católica de un “ecuménico y colegial” primus inter pares, como sucede en los cismáticos “ortodoxos”.
       
El 13 de Noviembre de 1964, Pablo VI renunció a la Tiara, dando a entender su abdicación del Papado. (El Cardenal Ottaviani, contemplando todo con dolor e impotencia).
     
La tiara papal fue donada al Santuario Nacional de la Inmaculada Concepción en Washignton D.C., el 6 de Febrero de 1968, por el Delegado Apostólico y estuvo en la exhibición papal intitulada “Tesoros vaticanos”. Ésta se encuentra en exhibición permanente en el Salón Memorial con la estola que usara Juan XXIII para inaugurar el Vaticano II.

La tiara de Pablo VI y la estola de Juan XXIII se encuentran actualmente en el Santuario Nacional de la Inmaculada Concepción en Washignton D.C.
   
Pablo VI fue el último reclamante al Papado en ser coronado (y el último antipapa en serlo, puesto que el último Papa legítimo en ser coronado fue Pío XII, desde luego). Se piensa que por rehusarse a ser coronados, los antipapas rechazan implícitamente la enseñanza dogmática tradicional sobre el Papa. Cítese, por ejemplo, que Juan Pablo II lo manifiestase fuertemente en su encíclica “Ut unum sint” de 1995; o que no realizase el Juramento de Coronación Papal.
    
Durante una visita a las Naciones Unidas en Octubre de 1965, Pablo VI le dio al Secretario General, U Thant, un budista, una cruz pectoral de diamantes y esmeraldas y un anillo episcopal de diamantes y rubíes, avaluados en 150.000 dólares de la época (1,9 millones de dólares actuales), y le pidió que los empleara para iniciar una campaña de lucha contra el hambre. Esos objetos sagrados fueron adquiridos en 1967 por el joyero Harry Levinson de Chicago en una subasta por 64.000 dólares.
     
Cruz pectoral y anillo episcopal de Pablo VI
   
Posteriormente, dichos ornamentos sagrados fueron a parar a una bailarina del programa televisivo “Late Night with Johnny Carson” y luego fueron dados en posesión al acróbata extremo Evel Knievel. Años después, una viuda de Carolina del Norte adquirió la posesión de ellos y contrató a Perry’s Emporium para venderlos. El 12 de Abril de 2011, Alan Perry anunció que serían subastados en eBay con precio base de 800.000 y 900.000 dólares. Y la joyería MS Rau Antiqueti los ofrece en subasta por 1’250.000 y 650.000 dólares.

lunes, 25 de agosto de 2014

ORACIÓN A SAN LUIS REY DE FRANCIA, POR UN "HIJO DE FRANCIA"

Los "Hijos de Francia" ("Fils de France") son los hijos legítimos del Rey y los del Delfín (Príncipe Heredero) de Francia. Uno de ellos dirigió esta oración a San Luis IX, Patrono de Francia y de la Casa de Borbón, para que le concediese sabiduría y rectitud en el gobierno:
 
San Luis, Rey de Francia
    
"Señor mi Rey San Luis, que partiste con los más valientes caballeros al frente del ejército cristiano, dígnate atender la súplica de un hijo de Francia que quisiera como tú levantarse para servir mejor al Señor mi Dios y a su Esposa, la Santa Iglesia. Dame horror hacia el pecado mortal, aún más que el que tenía Joinville, quien sin embargo fue buen cristiano; y consérvame puro como las lises de tu blasón. Tú que mantuviste siempre tu palabra, aún si la dabas ante los infieles, haz que la mentira jamás pase por mi garganta, aunque mi franqueza deba costarme la vida. Hazme incapaz de retroceder, ciérrale el puente a mis debilidades, y que marche siempre a lo más duro. ¡Oh tu, el más valeroso de los barones franceses!, inspirame el desprecio a los pensamientos de los hombres y concédeme el gusto de comprometerme y de tomar partido por el honor de Cristo. Finalmente, oh Príncipe, Príncipe de gran corazón, no permitas jamás que yo sea mediocre, mezquino o vulgar, antes bien, obtenme un corazón real y que a tu ejemplo sirva a los franceses, realmente. Así sea".
  
¡San Luis, Ruega por la Francia! (Tres veces)

NOVENA A SAN PÍO X, DEFENSOR DE LA CATOLICIDAD TRADICIONAL

En las Oraciones para cada día de la Novena se glosan los principales documentos publicados durante el glorioso Pontificado de San Pío X.
   
Los hechos milagrosos que se relatan, constan probados en el expediente de canonización y son recogidos por sus más eminentes biógrafos.
 
NOVENA A SAN PÍO X
  
  
Por la señal ✠ de la santa Cruz; de nuestros ✠ enemigos líbranos, Señor ✠ Dios nuestro. En el nombre del Padre, y del Hijo ✠, y del Espíritu Santo. Amén.
  
ACTO DE CONTRICIÓN- PARA TODOS LOS DÍAS DE LA NOVENA
Senor mio Jesucristo, Dios y hombre verdadero, Criador y Redentor mio, por ser Vos quien sois, y porque os amo sobre todas las cosas, me pesa de todo corazón de haberos ofendido: propongo firmemente de nunca más pecar, y de apartarme de todas las ocasiones de ofenderos, y de confesarme, y cumplir la penitencia que me fuere impuesta: ofrézcoos mi vida, obras y trabajos en satisfacción de todos mis pecados; y así como os lo suplico, así confio en vuestra bondad y misericordia infinita me los perdonaréis por los merecimientos de vuestra preciosísima Sangre, Pasion y Muerte, y me daréis gracia para enmendarme, y para perseverar en vuestro santo servicio hasta la muerte. Amén.
      
ORACIÓN PREPARATORIA PARA TODOS LOS DÍAS DE LA NOVENA
Eterno Dios, que por tu inagotable Providencia das a tu Iglesia en cada momento el Pastor más conveniente a sus supremos intereses, por la memoria del que fue Padre celosísimo y eficaz para la propagación de nuestra Fe y para el bien de toda la humanidad, San Pío X, te rogamos nos induzcas cada día más a tener fidelidad absoluta a las enseñanzas del Pontificado tradicional y legítimo; y, siguiendo la consigna del ilustre Santo, sea norma de nuestra vida instaurarlo todo en Cristo, para lograr así la paz del mundo y asegurar nuestra perseverancia final.
Te pedimos de un modo especial, ¡oh Dios misericordioso!, imprimas en nuestros corazones un profundo amor y devoción al Santísimo Sacramento del Altar, para que siendo fieles devotos de quien mereció ser designado como el Papa de la Eucaristía, no pase día sin que acompañemos a Jesús en la soledad de su Sagrario, para merecer recibirlo con la mayor frecuencia posible durante nuestra vida y especialmente, en la hora de nuestra muerte. Te suplicamos, además, nos alcances el favor que pedimos en esta Novena si ha de ser para tu mayor honra y gloria.
Interponemos como intercesores a nuestras súplicas, a tan Santo Pontífice, a todos nuestros Patrones y Abogados y de un modo especial, a la Virgen Santísima, cuya protección, por medio del Santo Rosario, quiso San Pío X fuera la que asegurara la salvación del mundo.
   
En honor del Santísimo Sacramento, del que tan ejemplar devoto fue San Pío X, rezaremos un Padrenuestro, Avemaría y Gloria, rogando por las necesidades de la Iglesia, con el propósito de ganar las indulgencias concedidas.
      
DÍA PRIMERO - 25 DE AGOSTO
Glorioso San Pío X, que pusiste un empeño especial en mantener la fuerza de nuestra fe y la disciplina eclesiástica, condenando las innovaciones peligrosas en tu admirable encíclica “Pascéndi”, ruega a Dios para que nunca se perturbe ni altere la pureza de la fe y cada día seamos todos más sinceramente adictos y fieles a los principios inmutables de nuestra Religión. Haz, con tu intercesión, que nuestros sacerdotes sean para todos ejemplos vivientes por sus virtudes, su fidelidad a la Santa Iglesia y su encendida caridad, a fin de que siendo cada día más Santos, merezcan por su perfección santificarnos a todos y llevarnos al cumplimiento de todos nuestros deberes individuales y sociales, como prenda de nuestra perseverancia final. Amén.
   
EJEMPLO: San Pío X predice la curación de una niña
En Venecia, junto a la Iglesia de Santa María de los Milagros, el Siervo de Dios se encontró con una pobre mujer que llevaba en brazos a una niña moribunda.
«Eminencia, bendiga a esta niña que muere», suplicó la desventurada madre.
El Patriarca bendijo a la niña, y dirigiéndose a la pobre mujer la animó diciéndole: «Estáte tranquila, porque tu niña no muere».
Los hechos confirmaron estas palabras del Santo Patriarca de los venecianos.
        
Antífona: En la recepción de la Sagrada Comunión halló siempre el combustible que mantuvo ígneo el fuego de la caridad en su corazón, haciendo se despojara de todo, para entregarse a sus prójimos en una suprema superación de humildad y renunciamiento.
   
℣. Ruega por nosotros, San Pío X.
℟. Para que seamos dignos de alcanzar las promesas de Nuestro Señor Jesucristo.
  
ORACIÓN
Oh Dios, que para defender la fe católica y restaurar todas las cosas en Cristo has llenado al Sumo Pontífice San Pío X de celeste sabiduría y apostólica fortaleza; concede propicio que, siguiendo sus enseñanzas y ejemplos, consigamos los premios eternos. Por el mismo Jesucristo Nuestro Señor, que contigo vive y reina en unidad del Espíritu Santo por los siglos de los siglos. Amén.
   
En el nombre del Padre, y del Hijo ✠, y del Espíritu Santo. Amén.
    
DÍA SEGUNDO - 26 DE AGOSTO
Por la señal...
Acto de Contrición y Oración inicial...
     
Glorioso San Pío X, que como dice uno de tus biógrafos, «fue como una necesidad para tu corazón hablar de María, predicar sobre María, promover en todos el amor y la devoción a María», ruega a Dios nos infunda la confianza en tan eficaz mediadora, para que en todas nuestras necesidades, en nuestros pesares, en nuestros dolores, alcemos los ojos hacia su inagotable bondad, para encontrar el remedio necesario o la resignación imprescindible. Haz, por tu intercesión, que siempre vayamos a Dios por el amor a su Inmaculada Madre, para que siguiendo tu ejemplar e ilimitada confianza en su poderosa intercesión, merezcamos gozar de su constante protección en esta vida y su definitiva ayuda en la hora de nuestro tránsito. Amén.
    
EJEMPLO: San Pío X cura una paralítica
En 1913, una pobre madre suplicaba a Pío X curase a una hija suya, paralítica desde hacía muchos años.
– «No puedo –respondió el Pontífice–, solamente el Señor puede hacer milagros.
La mujer no se convenció y con acento de mayor fe replicó: «Sí. Vos podéis. Basta que queráis hacerlo».
– «No puedo… solamente el Señor puede hacer milagros», insistió el Papa.
– «Padre Santo, Vos representáis a Jesucristo en la tierra. Vos podéis hacer el milagro» –insistió la madre.
– «Tened confianza –dijo entonces el Papa–. El Señor sanará a vuestra hija».
En el mismo momento la hija sintió un estremecimiento, se irguió, y con gran admiración de los presentes, echó a andar.
      
La antífona y la oración se rezarán todos los días
   
DÍA TERCERO - 27 DE AGOSTO 
Por la señal...
Acto de Contrición y Oración inicial...
         
Glorioso San Pío X, que supiste mantener durante tu ilustre Pontificado las prerrogativas de la Iglesia en sus relaciones con el Estado, protestando de manera eficaz contra las persecuciones de que fueron objeto las corporaciones religiosas por parte de los poderes laicos, manifestando cuánto apenaban tu corazón de Padre las vejaciones de que fueron objeto, intercede para que Dios conceda a todos los religiosos que cada día perseveren más en el espíritu de su orden, y cumplan la altísima misión que sus fundadores se impusieron. Haz, por tu intercesión, que todos los estados católicos mantengan relaciones de cordial colaboración, y los que no lo son de respetuosa tolerancia, con nuestra Santa Iglesia, y que cada día ésta aumente su influencia en la Sociedad, para llevar a mayor número de hombres al camino de la verdadera felicidad y la eterna salvación. Amén.
 
EJEMPLO: San Pío X cura a un ciego de nacimiento
Un señor alemán, ya de edad madura, ciego de nacimiento, asistía a una audiencia del Papa. Cuando éste se le acercó y se enteró de su desgracia, le recomendó tuviera confianza en Dios, y le puso las manos sobre los ojos.
Al contacto de las manos prodigiosas del Papa, el ciego recobró instantáneamente la vista.
      
La antífona y la oración se rezarán todos los días
   
DÍA CUARTO - 28 DE AGOSTO
Por la señal...
Acto de Contrición y Oración inicial...
           
Glorioso San Pío X, que en tus constantes desvelos por la organización y eficacia de la acción social católica, cuidaste de dar a esta obra toda la importancia que merece, fijando normas concretas y eficaces para que nunca perdiera su primitivo espíritu, asegura con tu intercesión la continuidad de su actuación y la fidelidad inmutable a los principios que motivaron su creación, apartándola de cualquier desviación y evitando pueda mover a ninguno de sus actuantes el menor interés material, y sí sólo los supremos que inspiraron su fundación. Ruega para que toda la actuación de las organizaciones de Acción Católica sea eficaz por la pureza de intención de sus militantes y por su inhibición de toda finalidad que no sea el bien de los humildes y la santificación del mundo. Amén.
    
EJEMPLO: San Pío X cura a una enferma de lepra
En el año 1914, un obispo del Brasil tenía a su madre enferma de lepra, y habiendo oído hablar de la fama de santidad de Pío X, se trasladó a Roma, para implorar del Siervo de Dios la curación de su madre.
Presentándose al Santo Pontífice, le rogó le alcanzase la gracia de su curación. El Papa le exhortó a encomendarse a la Virgen Santísima y a otros Santos.
El Obispo insistió y le dijo: «Por lo menos, Beatísimo Padre, dígnese repetir las palabras de Cristo: “Volo, mundáre” (Quiero; sé limpio)».
El Papa repitió: «Volo, mundáre». Cuando el Obispo regresó a su patria encontró a su madre completamente curada de la lepra.
      
La antífona y la oración se rezarán todos los días
   
DÍA QUINTO - 29 DE AGOSTO
Por la señal...
Acto de Contrición y Oración inicial...
       
Glorioso San Pío X, que manteniendo las genuinas tradiciones de la Iglesia, supiste modernizar en cuanto era preciso su consuetudinario derecho, infunde por tu intercesión a todos un profundo respeto y sumisión a todas sus disposiciones e intercede, para que en todo momento, la interpretación de sus preceptos sea la más conveniente a los intereses de la Cristiandad, a la pureza de costumbres y a la perseverancia de todos los fieles. Alcanza del Todopoderoso que los inmejorables principios del derecho canónico influyan en las legislaciones de todos los Estados, para que en todos ellos rijan las normas de estricta justicia y caridad que inspiraron siempre sus instituciones y que establecieron en el mundo el respeto que merece el hombre por ser hecho a imagen y semejanza de Dios, y a la Iglesia como supremo representante de Dios en la tierra y garante del orden moral. Amén.
   
EJEMPLO: San Pío X cura a una religiosa, enferma desde hacía quince años
La superiora de un colegio de la India inglesa, padecía una grave enfermedad de estómago, para cuya curación habían fracasado todos los remedios. Las niñas, el día de su Primera Comunión, en enero de 1914, se dirigieron al Santo Padre pidiendo la curación de su amada religiosa.
La enferma iba empeorando por falta de nutrición. Cayó pronto en un estado de postración tan extrema, que en la noche del 7 de febrero siguiente, ante el temor de que muriese, le fue administrada la Extremaunción.
Al día siguiente llegaba para las Hermanas de Belgaum el siguiente telegrama:
«Roma 7 de febrero de 1914. – Padre Santo concede con gusto bendición Apostólica solicitada – Cardenal Merry de Val».
Le mostraron el telegrama a la enferma. En aquel momento estaba sola. Las hermanas se hallaban en el refectorio. Lo leyó y llena de fe intentó levantarse; se vistió y se sentó en una silla.
Cuando las hermanas la vieron levantada no querían creer lo que veían sus ojos. Les dijo que quería comer y quedaron asombradas. Unas querían que comiese, otras se oponían diciendo que era mejor esperar unos días. La enferma cortó toda vacilación. Quería comer enseguida. Entre las dudas de unas y la fe de otras comió sopa, pan y carne. Desde aquel día volvió a ocupar su lugar en el refectorio. Llena de vigor y de vida, volvió a su trabajo.
      
La antífona y la oración se rezarán todos los días
   
DÍA SEXTO - 30 DE AGOSTO
Por la señal...
Acto de Contrición y Oración inicial...
         
Glorioso San Pío X, que hiciste norma de tu Pontificado “INSTAURÁRE ÓMNIA IN CHRISTO” restaurarlo todo en Cristo, intercede para que siguiendo tus enseñanzas y ejemplos, adaptemos nuestra vida a la estricta observancia de los Mandamientos, para que siendo fieles devotos de la Iglesia, seamos dignos de llamarnos hijos de Dios. Te rogamos de un modo especial, logres que Dios imprima en nuestros corazones todo el ardor de caridad que abrasaba el tuyo, para que por los frutos de esta excelsa virtud, seamos humildes en nuestras relaciones con los pobres, justos con los que de nosotros dependen, respetuosos con nuestros superiores e imitadores en toda nuestra vida pecadora de las excelsas virtudes en que brilló la tuya. Amén.
   
EJEMPLO: San Pío X profetiza
La visión profética que tuvo de todos los acontecimientos, le hacía exclamar frecuentemente: «Veo una gran guerra. Las cosas van mal», repetía con insistencia al Cardenal Secretario de Estado, que se maravillaba de la seguridad con que hablaba el Pontífice y creía se refería a la guerra de los Balcanes–. «No hablo de esta guerra –decía el Padre Santo en 1914, cuando la expedición italiana a Libia–. Todo esto es nada comparado con la gran guerra que vendrá».
Y si el Cardenal le observaba que no se vislumbraba guerra alguna, el Santo viejecito replicaba: «Eminencia, no pasaremos de 1914».
      
La antífona y la oración se rezarán todos los días
   
DÍA SÉPTIMO - 31 DE AGOSTO
Por la señal...
Acto de Contrición y Oración inicial...
        
Glorioso San Pío X, que para dar fuerza a nuestra naturaleza, nos invitaste con reiterada insistencia a recibir la Sagrada Comunión, impulsando a todos los cristianos a frecuentar lo más posible ese Sacramento de Amor, ruega por nosotros para que siguiendo tu voluntad inspirada por Dios, nos acerquemos asiduamente al Santo Sacrificio de la Misa y saquemos del celestial banquete todas las fuerzas necesarias para mantenernos fieles a las promesas del bautismo. Haz que Dios nos perdone cualquier negligencia o falta de devoción que hayamos tenido en nuestras Comuniones, y que cada día nos acerquemos con mejor preparación, mayor fuerza de alma y más encendido amor a recibir a Cristo en la Eucaristía. Amén.
  
EJEMPLO: San Pío X cura a un niño gravemente enfermo
A un niño de seis años, de la familia Conradi, a consecuencia de una caída se le había destrozado un riñón y lacerado la vejiga. El caso era desesperado y los médicos le concedían pocas horas de vida.
Se pidió al Padre Santo una bendición especial para aquella familia. El Santo Padre escuchó el relato y al terminar dijo: «Pobre madre: sí, les envío una bendición particular».
Al oír la noticia la madre, con toda su fe exclamó: «Pío X ha enviado su bendición; mi Jorge curará».
Y así fue; la vejiga, contra todos los diagnósticos de los médicos, se cicatrizó y el riñón destrozado volvió a su estado normal sin necesidad de intervención quirúrgica.
      
La antífona y la oración se rezarán todos los días
   
DÍA OCTAVO - 1 DE SEPTIEMBRE
Por la señal...
Acto de Contrición y Oración inicial...
          
Glorioso San Pío X, que con tu inagotable celo por el culto externo que debemos a Dios, dictaste normas acertadísimas para que en todo momento tenga nuestra liturgia la solemnidad y dignidad debidas y sean nuestros templos modelos de sobriedad y pureza artística, haz que Dios conceda a nuestra Iglesia, el sentido artístico más depurado para el acertado cumplimiento de aquellas normas y concede un verdadero espíritu artístico a todas las manifestaciones religiosas, para que mueva nuestras almas a la meditación y a la piedad. Ruega para que nuestras multitudes aprecien el valor inestimable de la oración y que la severidad de los cantos religiosos armonice en todo momento con la profundidad de todos nuestros ritos y con la solemnidad de nuestras ceremonias religiosas. Amén.
    
EJEMPLO: San Pío X cura el brazo a un impedido
A las audiencias públicas que celebraba el Padre Santo, acudían toda clase de personas, entre éstas algunos enfermos, confiando en lograr su curación por la intercesión del Pontífice. En una de aquellas audiencias, pasó Pío X junto a un infeliz que tenía un brazo inerte, quien mostrándoselo y en todo apremiante de súplica, le dijo: «Padre Santo, cúrame para que pueda ganar el sustento para los míos».
– «Sigue tu camino… y ten fe en el Señor», le dijo el Pontífice.
Y tocándole el brazo repitió: «Ten fe, el Señor te curará».
En el mismo instante, el brazo inerte recobró su fuerza y sus movimientos. Profundamente emocionado el hombre gritó: «¡Padre Santo! ¡Padre Santo!».
El Papa se detuvo y poniendo sus dedos sobre los labios le impuso silencio.
      
La antífona y la oración se rezarán todos los días
   
DÍA NOVENO - 2 DE SEPTIEMBRE
Por la señal...
Acto de Contrición y Oración inicial...
         
Glorioso San Pío X, que en tu admirable Encíclica “E Suprémi Apostolátus”, afirmaste que la paz que todos los hombres dicen desear, únicamente puede lograrse con una absoluta sumisión del hombre a Dios, ruégale que infunda en los corazones de todos, y muy especialmente a los conductores de las naciones, un profundo respeto a las enseñanzas del Evangelio y sincero reconocimiento de la autoridad de la Iglesia, para que, bajo el manto protector de Cristo Nuestro Señor y de su Santísima Madre, todos se reconozcan vasallos de Dios. Haz por tu poderosa intercesión que el mundo recobre la paz, que las naciones apacigüen sus odios, que las razas se sientan igualadas ante Dios y que, como bendición del Cielo, seamos librados del terrible azote de una guerra que sería el fin de la civilización cristiana y posiblemente del mundo. Amén.
    
EJEMPLO: San Pío X prevé los estragos de la guerra
En 1912 se propuso al Santo Padre la compra, por un Instituto religioso, de una gran propiedad situada en Gradisca, donde existían espléndidos edificios.
– «No es posible –contestó el Padre Santo–, porque todos aquellos edificios serán destruidos».
Años después, en la guerra europea, todos aquellos edificios se convirtieron en un montón de ruinas.
      
La antífona y la oración se rezarán todos los días

SAN LUIS, REY DE FRANCIA

"Dad al César lo que es del César, y a Dios lo que es de Dios". (San Mateo, 22, 21).
   
San Luis Rey de Francia
   
San Luis, rey de Francia, fue dotado de todas las cualidades que hacen a los reyes grandes y a los santos ilustres. Nacido para gobernar a los hombres, fue un héroe en la paz y en la guerra. En toda su vida, según testimonio de su confesor, no cometió ni un solo pecado mortal. De ordinario llevaba un cilicio, y cuando se lo sacaba, daba cuarenta escudos de limosna. El viernes de cada semana ayunaba, se disciplinaba con cadenillas de hierro y servía a los pobres con sus propias manos. Dos veces salió de su reino a fin de conquistar Tierra Santa, y en esas expediciones mostró tanta piedad como coraje. Murió en 1270, en África, a la edad de 55 años.
   
MEDITACIÓN SOBRE SAN LUIS, EL REY CRISTIANÍSIMO
   
I. San Luis fue verdaderamente rey, pues supo mandar a sus pasiones, sujetar su cuerpo a la razón, y su razón a Dios. Ayunar, llevar cilicio, vivir en medio de la corte una vida tan santa como la de un cenobita, ¿no es acaso ser dueño de sí mismo? Mira a este santo, mira si lo imitas, si tus pasiones están tan sometidas como las de él a la razón. "¿Qué hay más real que un alma sometida a Dios y dueña de su cuerpo?" (San León).
  
II. San Luis fue el padre de su pueblo. A todo el mundo amaba, hasta a sus enemigos; no podía tolerar a los detractores; él mismo juzgaba en los procesos de los pobres, nada tomaba más a pecho que el trabajar en la salvación de sus súbditos. Agradece a Dios, si te ha dado superiores semejantes a este santo rey. Si tú mismo eres superior, acuérdate que debes ser el padre de tus inferiores. ¿Cómo ejerces la caridad con tu prójimo?
   
III. Es preciso ser servidor de Dios para ser buen rey. La piedad de San Luis, la honra que tributaba a las santas reliquias, el celo que lo inflamaba por la conversión de los bárbaros, la generosidad cristiana y heroica que puso de manifiesto combatiendo contra los enemigos de Jesucristo, muestran que olvidaba su título de rey para no acordarse sino del de servidor de Dios. Príncipes de la tierra, si no servís a Dios, ¿qué provecho obtendréis en la otra vida de haber aquí empuñado el cetro? La muerte os arrebatará todas vuestras dignidades: la sola gloria que sobrevive a la tumba es la de haber servido bien al Señor. "Servir a Dios es reinar".

La piedad. Orad por los jefes de estado.

ORACIÓN
    
Oh Dios, que hicisteis pasar al rey San Luis de un reino temporal a la gloria del reino eterno, haced, os lo suplicamos, que, por sus méritos y su intercesión, participemos un día con él de la gloría del Rey de reyes, vuestro Hijo Jesucristo, que vive y reina con Vos en unidad con el Espíritu Santo, por todos los siglos de los siglos. Amén.

NI TODO LUJO ES COSTOSO, NI TODA FRUGALIDAD ES BARATA (EL ALTO COSTO DE LA "HUMILDAD BERGOGLIANA")

Por Marco Tossatti para LA STAMPA
  
PAPA, METROS CUADRADOS Y DEMAGOGIA

Seamos realistas: si hay un rey, la corte no puede ser suprimida. Incluso si es un rey como el Papa Francisco, que dice que no quiere ningún signo de realeza. Aún así, existe la corte (¡y qué corte!), incluso si evitamos dar nombres, al menos en esta ocasión. Porque queremos hablar de demagogia y metros cuadrados.

Cuando se hablaba sobre el cardenal Bertone y sus 700 metros cuadrados (un espacio que sigue negando), se señaló que el Papa vivía en dos habitaciones en la Casa Santa Marta, y lo mismo, más o menos, se aplica al presente Secretario de Estado, Parolin. 
 
No queremos defender el cardenal Bertone que sabe muy bien defenderse solo, pero quiero decir algo acerca de la comparación con el Papa. Es cierto que el Papa Bergoglio ocupa dos habitaciones y las instalaciones; pero en realidad todo el piso en el que reside en Santa Marta está reservado para él y para las personas que cuidan de él. En el refectorio de Santa Marta el espacio reservado para la mesa papal está rodeada por una barrera de mesas (un lugar muy deseado por muchos que tratan de estar cerca su mesa), lo que es un pequeño comedor privado. Además, como capilla propia, el Papa tiene una iglesia entera, la de Santa Marta. En pocas palabras, no vemos mucha diferencia entre esta situación y la de los apartamentos pontificios, donde el Papa tenía su propio dormitorio, un pequeño comedor, una capilla y un estudio. Cuando el Papa Francisco recibe a los visitantes en sus habitaciones privadas, o en otra habitación de la residencia. En resumen, tiene toda la casa a su disposición.
 
Es más, cuando el trabajo esté terminado en el antiguo apartamento de Bertone, el nuevo secretario de Estado se moverá en el apartamento del Palacio Apostólico, que es muy grande. Era el apartamento pontificio hasta el principio del siglo pasado, por lo que desde luego no es de dos habitaciones y una cocina… 
 
Sin embargo, también se puede decir que la mayoría de los cardenales ocupan (pro tempore, no es transferible a familiares o sobrinos) apartamentos normales, en el edificio del Santo Oficio o en la plaza de la Ciudad Leonina (histórico ensanche de la ciudad de Roma, donde se encuentra el Vaticano), o en medio de Rusticucci, o en la misma Ciudad del Vaticano. Sin embargo, si Bertone se vio obligado a buscar otro lugar para vivir, hay una razón específica para ello. El cardenal Agostino Casaroli tuvo un muy bonito ático construido sobre el Palazzina dell’Arciprete [Bloque de apartamentos del Arcipreste] con su uso como refugio para los ex secretarios de Estado en mente. Sin embargo, el cardenal Giovanni Battista Re se hizo cargo cuando todavía era el Prefecto de la Congregación de los Obispos, y él todavía está allí.
 
Otro gran apartamento histórico, es el asignado al Presidente de la Comisión de Cardenales en la Ciudad del Vaticano (cardenal Giuseppe Bertello). Es un apartamento histórico que fue la residencia del presidente laico en tiempos de Pío XII, el marqués Sacchetti. También el cardenal venezolano Rosalio Castillo (fallecido en 2007) vivió allí; quien fue llamado por sus enemigos (que no eran pocos en el Vaticano) Cardenal Settebagni (Sietebaños) a causa de la amplitud del apartamento.

En el mismo edificio se encuentra el apartamento de la Secretaría de la Ciudad del Vaticano, y sigue estando inexplicablemente cerrado (desde hace un par de años) y todavía está en manos del actual nuncio en Estados Unidos, Carlo María Viganò.

El Prefecto de Propaganda Fide, “el Papa Rojo” (como también se le conoce), disfruta de una concesión extraordinaria, un chalet en la Gianicolo [colina Janículo]. Sin embargo, también algunos cardenales retirados o que trabajan se benefician de apartamentos de tamaño kilométrico. Ellos son los que tienen la suerte de ser invitados en la “vieja” ala del palacio de San Calixto, al lado de Santa Maria in Trastevere. El ala nueva, construida en los años 20 y 30 tiene habitaciones grandes, incluso si están mal dispuestas. El viejo edificio empero dispone de apartamentos principescos, ya que fueron pensados en los siglos pasados. No importa, como un viejo zorro curial observó una vez –todas son cosas que nadie se llevará con ellos. Entran y se van, y serán destinados a otro peregrino…-

domingo, 24 de agosto de 2014

SAN PÍO X CONTRA LA COMUNIÓN EN LA MANO

San Pío X, vencedor de la insidia modernista
   
Cierto día, los modernistas pidieron al Papa San Pío X para que permitiera recibir de pie la Sagrada Comunión, aduciendo el hecho de que “los israelitas comieron de pie el cordero pascual”.

San Pío X respondió tajantemente: “El Cordero Pascual era tipo (figura) de la Eucaristía. Pues bien, los símbolos y promesas se reciben de pie, PERO LA REALIDAD SE RECIBE DE RODILLAS y con amor”.

viernes, 22 de agosto de 2014

CARTA APOSTÓLICA "Sacro Vergente Anno", CONSAGRANDO RUSIA AL INMACULADO CORAZÓN DE MARÍA

"El Santo Padre me consagrará Rusia, que se convertirá y será concedido al mundo un tiempo de paz". (Nuestra Señora de Fátima)

Pío XII, obedeciendo el llamado que Nuestra Señora hiciera en Fátima, consagró Rusia al Inmaculado Corazón de María; y aunque, 62 años después, Rusia aún no se ha convertido a la Fe Católica (lo cual sucederá en la Parusía), ha pasado de una dictadura del comunismo ateo a ser una nación defensora de la Cristiandad; o dicho de otra forma, Rusia fue convertida a la paz.
  
SACRO VERGENTE ANNO
    
Carta Apostólica a los pueblos de Rusia: su consagración al Corazón Inmaculado de María
   
Pío XII
   
Venerables Hermanos: Salud y bendición apostólica
  
1. Súplicas de realizar la consagración de Rusia al Corazón Inmaculado de María.
   
Cuando el Año Santo iba felizmente a terminar, después que por designios divinos, Nos fue dado el definir solemnemente el dogma de la Asunción en alma y cuerpo al Cielo de la gran Madre de Dios la Virgen María, fueron muchísimos los que, desde todas las partes del mundo Nos manifestaron su vivísima alegría; entre éstos no faltaron quienes al dirigirnos cartas de agradecimiento, suplicaran insistentemente que, en las tribulaciones del momento presente, consagráramos todo el pueblo de Rusia al Corazón Inmaculado de la misma Virgen María.
    
2. Agrado del Papa por ello y su benevolencia al pueblo ruso.
    
Tal súplica Nos fue sumamente grata, ya que si bien Nuestro afecto paternal abraza a todos los pueblos, se dirige en modo particular a los que, no obstante estar separados de esta Sede Apostólica en gran parte por vicisitudes históricas, conservan todavía el nombre cristiano, y se encuentran en condiciones tales que no sólo es dificilísimo el escuchar Nuestra voz y conocer las enseñanzas de la doctrina católica, sino que son inducidos con engañosas y perniciosas artes a rechazar hasta la fe y el nombre mismo de Dios.
   
Apenas fuimos elevados al Pontificado Supremo, Nuestro pensamiento voló hacia vosotros, que formáis un inmenso pueblo, insigne en la historia por sus gloriosas empresas, su amor patrio, su laboriosidad y sobriedad, su piedad, para con Dios y con la Virgen María.
     
3. Plegarias del Papa por Rusia.
     
No hemos cesado jamás de elevar Nuestras súplicas a Dios para que os asista siempre con su luz y con su ayuda divina y os conceda a todos poder alcanzar, junto con una justa prosperidad material, aquella libertad mediante la cual cada uno de vosotros pueda defender la propia dignidad humana, conocer las enseñanzas de la verdadera religión y dar a Dios el debido culto, no sólo en lo íntimo de la propia conciencia, sino incluso abiertamente, en las actividades de la vida pública y privada.
       
4. Benevolencia de los Predecesores.
   
Por lo demás, bien sabéis que Nuestros Predecesores, cada vez que les fue posible, no tuvieron más empeño que manifestaros su benevolencia y daros su ayuda. Sabéis que los Apóstoles de los eslavos occidentales, los santos Cirilo y Metodio, que junto con la religión cristiana llevaron a los antepasados de aquellos incluso la civilización, se dirigieron a esta ciudad para que la obra de su apostolado fuese avalada por la autoridad de los Romanos Pontífices. Y mientras ellos entran en Roma, Nuestro Predecesor Adriano II, de feliz memoria, sale a su encuentro tributándoles grandes honores, acompañado del clero y del pueblo[1]; y después de aprobada y alabada su labor, no sólo los eleva al Episcopado, sino que él mismo quiere consagrarlos Obispos con la solemne majestad de los ritos sagrados.
   
5. En el siglo X.
     
Por lo que toca a vuestros antepasados, los Romanos Pontífices buscaron, cada vez que las circunstancias lo permitieron, el modo de trabar y consolidar con ellos lazos de amistad. Así en el año 977 Nuestro Predecesor Benedicto VII, de feliz memoria, mandó sus legados al príncipe Jarpolk, hermano del célebre Wladimiro y Nuestros Predecesores Juan XV en el año 991 y Silvestre II en el 999 enviaron legaciones al mismo gran príncipe Wladimiro, bajo cuyos auspicios resplandecieron por vez primera entre vuestra gente el nombre y civilización cristiana; a lo que el mismo Wladimiro correspondió cortésmente mandando a su vez legados a dichos Romanos Pontífices. Es digno de notar que en el tiempo en que este príncipe llevó sus pueblos a la Religión de Jesucristo, la cristiandad oriental y occidental estaban unidas bajo la autoridad del Romano Pontífice, como Jefe supremo de toda la Iglesia.
   
6. En el siglo XI.
    
Más aún, no muchos años después, es decir en 1075, vuestro príncipe Isjaslav mandó al Sumo Pontífice Gregorio VII su propio hijo Jaropolk; y éste Predecesor Nuestro de inmortal memoria, escribió así a dicho príncipe y a su augusta consorte: Mientras, vuestro hijo visitaba los sagrados sepulcros de los Apóstoles, vino a vernos, y dado que quería obtener aquel reino de Nuestra mano como un don de San Pedro, habiendo hecho profesión de fidelidad a San Pedro, príncipe de los Apóstoles, lo pidió con devotas súplicas asegurando sin duda alguna que su petición sería ratificada y confirmada por vos en el caso que hubiera obtenido el favor y la protección de la autoridad apostólica. Como estos deseos y estas peticiones parecían legítimas, tanto por vuestro consentimiento como por la devoción del solicitante, Nos las hemos acogido finalmente, y le hemos entregado de parte de San Pedro el gobierno de vuestro reino, con esta intención y este vehemente deseo, que el bienaventurado Pedro, con su intercesión ante Dios guarde a vos, a vuestro reino y a todas vuestras cosas, y haga que poseáis dicho reino con toda paz e incluso con honor y gloria hasta el fin de vuestra vida[2].
   
7. En los siglos posteriores.
    
Del mismo modo se ha de notar y tener muy en cuenta que Isidoro, Metropolita de Kiev, en el Concilio Ecuménico de Florencia, firmó el decreto que sancionaba solemnemente la unión de la Iglesia Oriental y Occidental bajo la autoridad del Romano Pontífice; y esto valió para toda su Provincia Eclesiástica, es decir para el entero reino de Rusia; sanción de unidad a la que él, por su parte permaneció fiel hasta el fin de sus días.
   
Pero si entretanto y en lo sucesivo, por motivo de un conjunto de circunstancias adversas, se hicieron más difíciles las comunicaciones de una y otra parte, y por consiguiente más dificultosa también la unión de los espíritus —aunque hasta el 1448 no haya ningún documento público que declare a vuestra Iglesia como separada de la Sede Apostólica— ; sin embargo en líneas generales esto no se ha de atribuir al pueblo eslavo, ni ciertamente a Nuestros Predecesores, los cuales siempre trataron con paternal afecto a esos pueblos y, cuando les fue posible, se preocuparon de protegerlos y ayudarlos a toda costa.
        
8. La ayuda material en nuestros tiempos.
         
Dejando a un lado no pocos otros documentos históricos en los que aparece la benevolencia de Nuestros Predecesores hacia vuestra nación, no podemos menos de aludir brevemente a lo que hicieron los Sumos Pontífices Benedicto XV y Pío XI, cuando, después del conflicto europeo, ingentes multitudes de hombres, mujeres, inocentes niños y niñas, especialmente en las regiones meridionales de vuestra patria, se vieron azotados por una terrible carestía y sumidos en tremenda miseria. Ellos en efecto, movidos por afecto paterno hacia vuestros compatriotas, enviaron a esas poblaciones víveres, vestidos y gran cantidad de dinero recogido entre los católicos, para ir en ayuda de todos aquellos hambrientos e infelices y poder aliviar de algún modo sus calamidades.
       
9. Ayuda espiritual.
    
Pero Nuestros Predecesores, según sus posibilidades, no sólo remediaron las necesidades materiales, sino también las espirituales; en efecto, no contentándose con elevar oraciones al Padre de las misericordias y fuente de todo consuelo[3] por vuestra situación religiosa, tan agitada y perturbada, ya que los enemigos de Dios pretenden arrancar de las almas la fe y la noción misma de la Divinidad, quisieron además que se hiciesen oraciones públicas. Y así el Sumo Pontífice Pío XI, en el año 1930, mandó que en el día de san José Patrón de la Iglesia Universal fuesen elevadas a Dios oraciones públicas en la Basílica Vaticana por las desgraciadas condiciones de la Religión en Rusia[4] y él mismo quiso estar presente, rodeado por una numerosísima y piadosa multitud de pueblo. Además, en la solemne Alocución Consistorial exhortó a todos con estas palabras: Es necesario rogar a Cristo Redentor del género humano, para que se restituya la paz y la libertad de profesar la fe a los infelices hijos de Rusia: y queremos que por esta intención, es decir por Rusia, se recen las oraciones que Nuestro Predecesor León XIII, de feliz memoria, impuso a los sacerdotes para recitarlas con pueblo después de la Santa Misa: los obispos y el clero secular y regular pongan gran cuidado en inculcar esto a los fieles, o a los que asistan a la Misa y no dejen de recordárselo frecuentemente.[5]
      
10. La acción de Pío XII.
        
Nos de buen grado confirmamos y renovamos esta exhortación y esta orden, desde el momento que la situación religiosa actual entre vosotros no ha mejorado ciertamente, y porque Nos sentimos animados del mismo vivísimo afecto y de los mismos cuidados hacia esas gentes.
    
Cuando estalló el último tremendo y largo conflicto hicimos todo lo que estaba en Nuestras manos, con la palabra, con exhortaciones, con obras para que las discordias fuesen compuestas con una equitativa y justa paz, y para que todos los pueblos, sin diferencia de estirpes, se unieran amigable y fraternalmente, y colaborasen juntos por alcanzar una mayor prosperidad. Jamás, incluso en aquel tiempo, salió de Nuestra boca una palabra que pudiera parecer injusta o dura para ninguno de los beligerantes. Hemos reprobado ciertamente, como se debía hacer, cualquier injusticia o cualquier violación del derecho; pero esto lo hicimos de manera que evitásemos con toda diligencia cuanto podía convertirse, aunque injustamente, en motivo de aflicciones mayores para los pueblos oprimidos. Y cuando desde alguna parte se presionaba para que Nos de algún modo, o de palabra o por escrito, aprobásemos la guerra emprendida contra Rusia en el año 1941, jamás consentimos hacerlo, como claramente dijimos el 25 de febrero de 1946, en el discurso pronunciado delante del Sacro y de todas las misiones diplon acreditadas ante la Santa Sede.[6]
       
11. Respeto del Papa por todas las naciones
        
Cuando se trata de defender causa de la Religión, de la verdad, de la justicia y de la civilización cristiana, no podemos callar ciertamente; sin embargo Nuestros pensamientos y Nuestras intenciones están siempre dirigidos a este fin, a saber, que no con la violencia de las armas, sino con la majestad del derecho se gobierne a todos los pueblos, y que cada uno de ellos, poseyendo la libertad civil y religiosa dentro de los límites de la propia Patria, sea conducido hacia la concordia, la paz y la vida de trabajo, de la que cada uno de los ciudadanos pueda obtener cuando le es necesario para alimentación, la habitación, el sustentamiento y gobierno de la propia familia. Nuestras palabras y nuestras exhortaciones se refirieron y se refieren a todas las naciones, y por consiguiente también a vosotros, que siempre habéis estado presentes en Nuestro corazón y cuyas necesidades y calamidades deseamos aliviar según permitan Nuestras fuerzas.
    
12. Amor universal del Papa, pese a los ataques.
       
Los que no aman la mentira sino la verdad saben que durante todo el curso del reciente conflicto Nos hemos demostrado imparciales con todos los beligerantes, y de ello frecuentemente hemos dado pruebas con las palabras y con las obras, y hemos abarcado en Nuestra ferventísima caridad a todas las Naciones, aun a aquellas cuyos gobernantes se profesan enemigos de esta Sede Apostólica, y a aquellas también en las que los enemigos de Dios, combaten fieramente todo lo que tiene algo de cristiano y de divino, y buscan el borrarlo de las almas de los ciudadanos. En efecto, por mandato de Jesucristo, que encomendó la entera grey del pueblo cristiano a San Pedro, Príncipe de los Apóstoles[7], del cual somos indignos Sucesores, Nos amamos con intenso amor a todos los pueblos y deseamos buscar la prosperidad terrena y la salud eterna de cada uno. Todos, por lo tanto, bien estén en guerra con las armas, o en desacuerdo por graves disensiones, son considerados por Nos como hijos iguales queridísimos; y no deseamos otra cosa, no pedimos al Señor con la oración más que la mutua concordia, la justa y verdadera paz, y una prosperidad cada vez mayor.
      
Mas bien, si algunos, engañados por las mentiras y las calumnias, Nos profesan abierta hostilidad, Nos estamos animados hacia ellos de una mayor compasión y de un más ardiente afecto.
  
13. A pesar de las calumnias ama a los que yerran y condena el error.
     
Hemos condenado sin duda y rechazado, como exige el deber de Nuestro oficio, los errores que los partidarios del comunismo ateo enseñan y se esfuerzan en propagar con sumo daño para los ciudadanos; pero a los errantes, en vez de rechazarlos, les deseamos que vuelvan a la verdad y sean conducidos de nuevo al camino recto. Hemos puesto de manifiesto y reprobado estas mentiras, que frecuentemente se presentaban bajo falsas apariencias de verdad, precisamente porque sentimos hacia vosotros afecto de padre y buscamos vuestro bien. Nos, en efecto, tenemos la firme certeza que de estos errores no pueden sobreveniros sino grandísimos daños, porque no sólo quitan de vuestras almas la luz sobrenatural y los supremos consuelos que provienen de la piedad y del culto a Dios, sino que incluso os despojan de la dignidad humana y de la libertad debida a los ciudadanos.
    
14. El pueblo ruso conserva la fe y su amor a María.
      
Sabemos que muchos de vosotros conservan la fe cristiana en el santuario íntimo de la propia conciencia, que en ninguna forma se dejan inducir a favorecer a los enemigos de la Religión, sino que antes bien desean ardientemente profesar las enseñanzas cristianas, únicos y seguros fundamentos de la sociedad civil, no solamente en privado, sino que, si fuera posible, incluso en público, como conviene a personas libres. Y sabemos aún, con suma esperanza Nuestra y grandísimo consuelo, que amáis y honráis a la Virgen María Madre de Dios con ferventísimo afecto y que veneráis sus sagradas imágenes. Sabemos que en el Kremlin mismo se construyó un templo, hoy desgraciadamente cerrado al culto divino, dedicado a la Asunción de María Santísima a los Cielos; lo que es una prueba clarísima del amor que vuestros antepasados y vosotros tenéis a la Gran Madre de Dios.
      
15. La salvación por María.
       
Ahora bien, Nos sabemos que no puede faltar la esperanza de salvación allí donde las almas se dirigen con sincera y ferviente piedad a la Santísima Madre de Dios. De hecho, por mucho que se esfuercen los hombres, por impíos y poderosos que sean, en extirpar de los corazones de los ciudadanos la santa Religión y la virtud cristiana, por más que Satanás mismo busque el fomentar con toda clase de medios esta lucha sacrílega, según la sentencia del Apóstol de las Gentes: ...no tenemos que combatir contra la carne y la sangre, sino contra los príncipes y las potestades, contra los dominadores de este mundo tenebroso, contra los espíritus malignos...[8]; sin embargo, si María interpone su poderoso patrocinio, las puertas del infierno no podrán prevalecer[9]. Ella, en efecto, es la afabilísima y poderosísima Madre de Dios y de todos nosotros, y jamás se ha oído en el mundo que alguien haya recurrido suplicante a Ella y no haya probado su poderosísima intercesión. Continuad, por tanto, como estáis acostumbrados, a venerarla con ferviente piedad, a amarla ardientemente y a invocarla con estas palabras, que os son familiares: A tí únicamente ha sido concedido, Santísima y Purísima Madre de Dios, de ser siempre escuchada[10].
      
16. Plegaria para que se restaure en Rusia la fe y el bienestar.
     
Nos también junto con vosotros elevamos a Ella Nuestras oraciones suplicantes para que la verdad cristiana, decoro y sostén de la convivencia humana se refuerce y vigorice entre los pueblos de Rusia, y todos los engaños de los enemigos de la Religión, todos sus errores y falaces artes sean rechazados y alejados de vosotros; para que las costumbres públicas y privadas vuelvan a estar conformes con las normas evangélicas; para que especialmente aquellos que de entre vosotros se profesan católicos, aunque privados de sus Pastores, resistan con intrépida fortaleza a los asaltos de la impiedad, si es necesario, hasta llegar a morir; para que la justa libertad que conviene a la persona humana, a los ciudadanos y a los cristianos les sea restituida a todos, como a ello tienen derecho, y en primer lugar les sea devuelta la Iglesia que tiene el mandato divino de instruir a los hombres en las verdades religiosas y en la virtud; y finalmente para que la verdadera paz resplandezca vuestra queridísima Nación y en toda la humanidad y que esta paz, fundada en la justicia y alimentada por la caridad, dirija a todas las gentes a aquella prosperidad común de individuos y pueblos que proviene de la concordia de los espíritus.
     
17. Por la intercesión de María.
      
Dígnese Nuestra amorosísima Madre mirar también con ojos benignos a aquellos que organizan las formaciones de ateos militantes y dan todo género de ayuda a sus iniciativas. Quiera Ella iluminar sus mentes con la luz que viene de lo alto y dirigir con la gracia divina sus corazones hacia la salvación.
   
18. Consagración de Rusia al Corazón Inmaculado de María.
     
Nos, por tanto, para que Nuestras oraciones y las vuestras sean escuchadas más fácilmente y para daros una prueba especial de Nuestra particular benevolencia, lo mismo que hace pocos años consagramos todo el mundo al Corazón Inmaculado de la Virgen Madre de Dios, así ahora, de manera especialísima, consagramos todos los pueblos de Rusia al mismo Corazón Inmaculado, en la firme confianza de que con el poderosísimo patrocinio de la Virgen María se realizarán cuanto antes los votos que Nos, vosotros, y todos los buenos formulan por una verdadera paz, por una concordia fraternal y por la debida libertad para todos y en primer lugar para la Iglesia; de forma que, mediante la oración que Nos elevamos junto con vosotros y con todos los cristianos, el Reino salvador de Cristo, que es el Reino de verdad y de vida, Reino de santidad y de gracia, Reino de justicia, de amor y de paz[11] triunfe y se consolide establemente en todas las partes de la tierra.
   
19. Plegaria a la Virgen.
      
Con oración suplicante rogamos a la misma clementísima Madre que asista a cada uno de vosotros en las presentes calamidades y obtenga de su Divino Hijo para vuestras mentes la luz del Cielo e impetre para vuestras almas la virtud y la fortaleza, mediante las cuales, sostenidos por la gracia divina, podáis triunfar victoriosamente de la impiedad y del error.
  
Dado en Roma, junto a San Pedro, el 7 de julio de 1952, fiesta de los Santos Cirilo y Metodio, año 14 de Nuestro Pontificado. Pío XII.
   
NOTAS
  
[1] Leon XIII, Encíclica "Grande Munus", 30-9-1880, Act. Leomis XIII, vol. II, p. 129; A. S. S.13, 145
[2] Registrum Gregorii VII 1, 2 n. 74. In. Monum. German Histor. Epistol. select. II, 1, pag.
[3] Véase II Corint. 1, 3
[4] Pío XI, Alocución Consistorial "Indictam ante catholico orbi'', 30-VI-1930, en la creación y publicación de los nuevos cardenales; A. A. S. 22 (1930) 300
[5] Pío XI, Alocución Consistorial véase nota (4); A. A. S. 22 (1930) 301.
[6] Pío XII, Alocución Respuesta al Embajador de Portugal, Antonio Carneiro-Pacheco en presencia del Sacro Colegio de Cardenales; "L'élévation des pensées" 25-11-1946; A. A. S. 38 (1946).
[7] Véase San Juan 21, 15-17.
[8] Efes. 6, 12.
[9] San Mateo 16, 18.
[10] Akathistos de la fiesta de Patrocinio de la Santísima Madre de Dios, Kontakion 3, "Acatistos" es un himno mariano alfabético de gran valor poético, en la Liturgia de la Iglesia griega del día sábado antes del 5º Domingo Cuaresmal. El autor es, probablemente, el patriarca Sergio, quien lo compuso en acción de gracias por la salvación de los bárbaros Avaros (año 636)
[11] Prefacio de la fiesta de Cristo Rey

jueves, 21 de agosto de 2014

DECIMEJORGE: "ME VOY A MORIR EN 2016"

Bergoglio siente que sus pecados y apostasía le están pasando factura.
    
Regresando el antipapa Bergoglio de su viaje a Corea del Sur, dijo que su fama y la buena imagen que tiene ante el mundo "durará poco tiempo, unos dos o tres años" antes de morir y dijo que no excluye su dimisión, si no le alcanzan las fuerzas para cumplir con sus responsabilidades, según AFP. 
    
Fuentes del Vaticano confirman que el Judas argentino habló antes acerca de su propia muerte con personas de confianza, pero esta ha sido la primera vez que comparte estas ideas con la prensa.
     
El presunto Pontífice recordó además la dimisión de su predecesor en el antipapado, Ratzinger Tauber/Benedicto XVI, en 2013. La dimisión de un papa es ahora una "institución" y no una "excepción", "aunque esto no guste a algunos teólogos", dijo Francisco y recalcó que hace 60 años los obispos eméritos, es decir retirados, eran una excepción y ahora es una práctica habitual.
     
"Podéis decirme: Si un día usted no se siente capaz de tirar para adelante, ¿haría lo mismo? Sí. Rezaría y haría lo mismo. Benedicto XVI abrió una puerta, que es institucional", explicó.

miércoles, 20 de agosto de 2014

UN SOCIALISTA ANTE LA MUERTE DE SAN PÍO X

Papa San Pío X 
   
Ante la muerte del Papa San Pío X, el diario socialista francés L'Humanité publicó esta reseña:
  
“El papa ha muerto. Se debe decir que fue un gran papa. Su política fue muy sencilla; consistía en restaurar los valores de la fe con firmeza apostólica. Pudo llevar a cabo esta política con autoridad, por la sencillez de su alma y la sinceridad de sus virtudes, que son incuestionables. De cualquier modo que se lo juzgue, se debe decir que Pío X fue un gran papa”.
REFLEXIÓN DE MILES CHRISTI: El combatiente noble y leal a su causa, es respetado aún por sus enemigos. Al traidor, sus nuevos camaradas le miran con desprecio.

martes, 19 de agosto de 2014

APOCALIPSIS: ¿QUÉ ES ESE "RAPTO" O "ARREBATAMIENTO" DEL QUE LOS PROTESTANTES TANTO HABLAN? (Perspectiva histórica)

Por el Rev. Luis Santamaria del Rio para RIES (RED IBEROAMERICANA PARA EL ESTUDIO DE LAS SECTAS)
   
En algunos ambientes protestantes –sobre todo entre los born again christians o “cristianos renacidos” presentes en los Estados Unidos– hay un tema de moda que plantea una escatología peculiar. Se trata del “rapto” o “arrebatamiento” (rapture), que en resumen es lo siguiente: cuando llegue el fin de los tiempos, en un momento previo a la tribulación predicha por el Apocalipsis, los creyentes verdaderos serán arrebatados (o “raptados”) corporalmente por el Señor. Esto hay que enmarcarlo en un sistema de pensamiento llamado “dispensacionalismo premilenario”, según el cual hay un calendario muy preciso en la historia de la humanidad, aunque el reloj divino se habría parado en la época del Nuevo Testamento, y sólo volverá a ponerse en marcha cuando se inicien los últimos tiempos.
   
Esta es la esperanza de los protestantes influenciados por el evangelismo norteamericano: Ser arrebatados antes de la Tribulación apocalíptica
   
Si tenemos que buscarle un padre a esta teoría, no nos queda otro remedio que fijarnos en John Nelson Darby (1800-1882), una figura imprescindible del protestantismo fundamentalista del siglo XIX que, tras abandonar la Iglesia anglicana, se hizo miembro de los Hermanos de Plymouth y desarrolló sus ideas escatológicas más peculiares. Se habla de dispensacionalismo porque divide la historia universal en diferentes edades o “dispensaciones” según el plan salvífico de Dios. La era contemporánea es, para Darby, el momento en el que Dios separará los creyentes verdaderos de los no creyentes, como se separa el trigo y la cizaña en el tiempo de la siega, anticipando así el retorno inminente del Señor Jesús.

John Nelson Darby, fundador de la teoría del Dispensacionalismo (Rapto 1.0)
    
Darby era inglés, pero se desplazó con frecuencia para difundir sus ideas, que han influido mucho en Norteamérica, adonde acudió en siete ocasiones. También podemos encontrar estas tesis en el mundo pentecostal. Sin ir más lejos, la mayor confesión evangélica española –la Iglesia Evangélica de Filadelfia, formada por gitanos– (NOTA DEL EDITOR: Y el 99 por 100 de los evangélicos latinoamericanos), asume la teología dispensacionalista.
   
Según los grupos y los pastores que aborden el tema del rapto, se puede llegar a extremos que serían objeto de risa si no fuera porque constituyen episodios de temor apocalíptico muy poco cristiano. Un amigo me contaba recientemente algo que vivió cuando fue miembro de una comunidad evangélica pentecostal, aquí en España. Uno de sus hermanos del grupo, minusválido, después de un adoctrinamiento intensivo basado en estas enseñanzas escatológicas que incluía películas sobre el tema, regresó de la capilla al centro especializado en el que vivía, y en medio de un temporal salió a la calle en su silla de ruedas convencido de que llegaba el momento del arrebatamiento, y de que Jesús le devolvería las piernas que le faltaban. Un ejemplo de los efectos que puede tener todo esto leído en clave fanática, y que no nos queda muy lejos.
   
Como dice Damian Thompson comentando de forma muy gráfica la idea darbysta del rapto, “sigue siendo una de las imágenes apocalípticas más potentes jamás ideadas, pues de un solo golpe libra a todos los cristianos de los horrores que causa la llegada del fin, a la vez que les permite contemplar cómo los condenados perecen en el emocionante drama de la Gran Tribulación”. Esto, explica el periodista, permite mantener el fervor milenarista “a fuego lento”, sin llegar a la explosión, pero consiguiendo así mantener a las personas y a las comunidades en esa tensión de que Cristo puede llegar en el momento menos esperado. Hace poco pude leer en una explicación de la tesis dispensacionalista que en la actualidad, “el cumplimiento e intensidad de los eventos apocalípticos nos indican que el rapto de la Iglesia puede suceder en cualquier momento”.
    
En los Estados Unidos, como dije antes, esto del rapto es una materia de dominio común, algo que forma parte del imaginario colectivo como creencia difundida entre grandes sectores del evangelismo. Sin ir más lejos, recuerdo una escena de Los Simpson en la que, en un momento de catástrofe apocalíptica, los Flanders, familia vecina de los protagonistas se pone a orar, y son arrebatados hacia el cielo. Hay algunas películas y producciones audiovisuales en las que vemos desaparecer gente de forma repentina, ilustrando esta expectativa.
    
Pero lo más destacado de los últimos años en este ámbito es la serie de novelas Left behind, que también se han llevado al cine con el título Lo que quedó atrás en España, que forma una trilogía junto con Fuerzas de la tribulación y El mundo en guerra. E incluso se ha hecho un videojuego (publicitado así: “el primer juego en el que la adoración es más poderosa que las armas”). A lo largo de doce libros, Tim LaHaye y Jerry B. Jenkins plantean de forma literaria una convicción que comparten muchos evangélicos. El argumento de la primera novela sirve para hacernos una idea: en un vuelo comercial desaparecen de repente varios pasajeros, y sólo queda su ropa. Lo mismo pasa en el resto del mundo con millones de personas. Se trata del comienzo del Apocalipsis. Imaginen lo que pudo suponer esta serie literaria, y sus versiones audiovisuales, en los Estados Unidos en torno al año 2000 y, sobre todo, después del 11-S.
   
Jerry B. Jenkins y Timothy LaHaye, creadores del "Rapto 2.0"
    
El tema del rapto tiene una base escriturística que es necesario desentrañar, así que vayamos a la Biblia. En su primera Carta a los Tesalonicenses, en torno al año 50, San Pablo escribe sobre “la suerte de los difuntos” para hacer una llamada a la esperanza cristiana en la resurrección de los que mueren unidos a Cristo. Cuando llegue la Parusía, la segunda venida del Señor, al son de la trompeta resucitarán los muertos, y “después nosotros, los que aún quedemos vivos, seremos arrebatados, junto con ellos, entre nubes, y saldremos por los aires al encuentro del Señor” (1 Ts 4,17). Parece que la comunidad de Tesalónica, expectante de una inmediata vuelta de Jesús que no terminaba de llegar, se preguntaba por el destino de los creyentes fallecidos en el ínterin, además de interrogarse por la fecha de la Parusía. El mismo San Pablo, en una primera época, esperaba vivir cuando todo esto sucediera.
    
Además, los defensores del arrebatamiento emplean otra cita bíblica, y esta vez del mismo Jesús, de su “discurso escatológico” en el evangelio según San Mateo: cuando venga el Hijo del hombre “dos hombres estarán entonces trabajando en el campo; a uno se lo llevarán y dejarán al otro. Dos mujeres estarán moliendo: a una se la llevarán y dejarán a la otra” (Mt 24,40-41). En el evangelio de Marcos la referencia es menos explícita, ya que serán los ángeles los que convoquen a los elegidos de todo el mundo (cf. Mc 13,27).
     
¿Qué pensar de todo esto? ¿Tienen razón los que, basándose en la Biblia, defienden la inminencia de la venida del Señor y la realidad del arrebatamiento de los creyentes verdaderos? La respuesta podemos encontrarla en la misma Escritura. San Pablo contestaba en su escrito a las inquietudes de los cristianos de Tesalónica, que parecen ser las preocupaciones de ciertos grupos actuales. ¿Cuándo volverá Cristo? Sólo Dios lo sabe. ¿Y qué pasará con los que hayan muerto? Ellos, y los que vivan en ese momento, compartirán la victoria de Cristo resucitado sobre la muerte; no habrá ventaja de los vivos sobre los muertos.
     
En estos textos constatamos varias afirmaciones de fe fundamentales, además de las respuestas paulinas que acabamos de decir: los acontecimientos finales son de iniciativa divina, y no pueden ser adelantados o retrasados por los hombres, tal como a veces defienden algunos intérpretes errados. Se nos habla de unos hombres que son apartados del resto de la gente, tal como sucede en el Apocalipsis con la multitud incontable que ha lavado sus túnicas en la sangre del Cordero. Tal es el sentido de la consagración que tiene lugar en el bautismo, cuando el creyente es incorporado a Cristo, es ungido (en griego christos) como él, y se une a su misterio pascual, es decir, a su muerte y resurrección. Por eso la actitud del cristiano es la vigilancia. Pero no la tensión pretendida apocalíptica y fanática. Por eso San Pablo escribía también a los tesalonicenses exhortándoles a trabajar sin molestar a nadie, haciendo siempre el bien (cf. 2 Ts 3,11-13).
   
La imagen de Cristo en la Parusía como un remedo de secuestrador es ciertamente temible. Y el tono vital que contagia no es muy optimista que digamos. En este campo, del Dios revelado en Jesús no podemos aprender otra cosa que una llamada a la esperanza, no basada en cálculos temporales ni en temores paralizadores. Seremos convocados por el Señor a un juicio, y la garantía de lo que nos ha prometido y nos espera al final la tenemos en María Santísima, la Madre del Señor. Eso es lo que hemos celebrado hace unos días con el misterio de su Asunción: su existencia entera, su cuerpo y su alma participando de la gloria de Cristo.
    
Luis Santamaría del Río

En Acción Digital, 20/08/12/RIES: http://info-ries.blogspot.mx/