martes, 31 de julio de 2018

DEL CARDENAL RENUNCIADO THEODORE McCARRICK

1º REVOLUCIÓN GRÁFICA DE LA SEMANA: THEODORE McCARRICK CAYÓ DE SU “ESTADO DE GRACIA” (TRADITION IN ACTION)
 
   
El Card. Theodore McCarrick disfrutó del “estado de gracia” de los Papas Conciliares durante toda su carrera. Obispo Auxiliar de Nueva York por Pablo VI (1977), pasó a ser Obispo de Metuchen, Nueva Jersey (1981-1986) bajo Juan Pablo II, quien lo elevó primero a Arzobispo de Newark (1986-2000) y luego lo promovió al prestigioso puesto de Arzobispo de Washington (2000-2006). El Papa Wojtyla también le dio la birreta cardenalicia en 2001. Benedicto XVI lo mantuvo en su puesto hasta que McCarrick cumplió los 75 años de edad, cuando se retiró rodeado de honores y prestigio.
 
Durante todo este tiempo, McCarrick había sido un depredador homosexual que se aprovechaba de sus seminaristas y sacerdotes, siendo imposible suponer que los Papas no hubieran sido informados de ello.
  
El Papa Francisco era un buen amigo del Card. McCarrick también, ver debajo en la primera fila en fotos en las que se muestra una fuerte afinidad entre los dos eclesiásticos. No obstante, ayer, 28 de julio de 2018, Francisco aceptó la renuncia de McCarrick en el Colegio de Cardenales y le impuso una vida de “oración y penitencia”. Este tipo de “castigo” está reservado a los homosexuales de entre el episcopado y clero que han llegado a ser públicamente conocidos como culpables de pederastia.
  
La razón del “castigo” no se debe a que estas personas infringieran la moral en niveles importantes para la Iglesia Conciliar, lo que exigiría su retiro de la esfera pública. En realidad es el castigo de los “medios” contra esos individuos y la asociación de su impunidad con las autoridades religiosas gobernantes. En otras palabras, para estas autoridades, “solo es malo si te atrapan”.
   
Por lo tanto, lo que está causando que esas personas sean “castigadas” es sólo el ruido mediático contra la falta de castigo, cosa que proyecta una malísima imagen de las autoridades religiosas entre el público.
  
¿No es una ironía que el estímulo moralizador de la Iglesia Conciliar provenga de la indignación de los “medios” inmorales?
  
 
 
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2º EL CARDENAL PRO-HOMOSEXUAL KEVIN FARREL VIVÍA EN EL MISMO DEPARTAMENTO DE McCARRICK, Y LO HOMENAJEÓ EN SUS ARMAS CARDENALICIAS (GLORIA.TV)
  
  
El cardenal Theodore McCarrick, de 87 años, quien está acusado de haber toqueteado a seminaristas y a algunos menores, fue el gran mentor del cardenal Kevin Farrell, de 70 años, el jefe del Dicasterio para los Laicos, la Familia [¡sic!] y la Vida.
 
En el 2001 McCarrick hizo a Farrell obispo auxiliar de Washington.
  
Los dos prelados liberales incluso compartieron un departamento, junto con dos secretarios sacerdotes, según publicó el Washingtonian.com en octubre de 2004.
 
[Como arzobispo de Newark (1986-2000) McCarrick contrató al padre Kenneth Martin, un abusador homosexual, como su secretario personal].
  
En el 2007 Farrell fue promovido a Dallas. Incluso pagó tributo a McCarrick en su escudo episcopal. Según la explicación de Farrell, el león en su escudo rinde honores a McCarrick y está tomado del escudo episcopal de este último.
  
Armas cardenalicias de Kevin Joseph Farrell (derecha) y de Theodore Edgar McCarrick (izquierda). Ambas armas tienen un león rampante (partido de gulés y oro sobre un montón de piedras de plata -Farrell-; de oro -McCarrick).
  
Farrell es pro-homosexual y está a cargo del Encuentro Mundial de las Familias que se celebrará en Dublín en agosto, y que contará con la presencia del papa Francisco.
  
Este encuentro propaga la ideología homosexual, da la bienvenida a parejas homosexuales y presenta como orador principal al propagandista homosexual y sacerdote jesuita James Martin.
  
Farrell es un admirador del libro “Building a Bridge” [Construyendo un puente], el cual es un texto de propaganda homosexual escrito por el padre Martin.
  
Es evidente que todos –incluyendo a Farrell– conocían el problema homosexual de McCarrick.

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