«Todo aquel que no persevera en la doctrina de Cristo, sino que se aparta de ella, no tiene a Dios, el que persevera en ella, ése tiene o posee dentro de sí al Padre y al Hijo. Si viene alguno a vosotros, y no trae esta doctrina, no le recibais en casa, ni le saludeis, es un falso apóstol: tratadle como a un excomulgado. Porque quien le saluda, comunica en cierto modo con sus acciones perversas, pues da a entender que tiene poco horror a sus desórdenes, y que le apadrina». (Segunda epístola de San Juan, 9-11, versión de Mons. Félix Torres Amat).
Ahora tratan bien los de Vaticano II a los herejes y cismaticos orientales .
ResponderEliminarNi la bendición de boca de un hereje;po porq excomulgado
ResponderEliminar