Traducción de la noticia publicada en GLORIA NEWS.
La libertad religiosa está siendo minada en Nigeria, el país más poblado de África, escribió Monseñor Obiora Francis Ike en su sitio web ObioraIke.com.
Desde 2010, han sido asesinadas más de 100.000 personas en Nigeria por motivos religiosos, más que cualquier otro país del mundo.
De los 210 millones de nigerianos, 80 millones son musulmanes (la mayor población musulmana en África), y 80 millones son cristianos (en su mayoría católicos). El resto son animistas.
El problema está en el norte de Nigeria, con los terroristas de Boko Haram, los pastores fulani y los fanáticos musulmanes. Doce de los 36 estados nigerianos adoptaron la ley Sharia en 1999, contraria a la Constitución federal [promulgada el 29 de Mayo, tras el fin de la Junta Militar establecida en 1993, N. del T.].
Desde 1999, en los estados nigerianos de Zamfara, Bauchi, Borno, Gombe, Jigawa, Kaduna, Kano, Katsina, Kebbi, Niger, Sokoto y Yobe se aplica la ley Sharia (aunque en Borno, Gombe y Yobe aún no se implementa en el ámbito penal). En los estados del sur, se sigue la ley seglar (Fuente del mapa: Wikipedia).
El presidente Mohammed Buhari, un musulmán radical, usa su poder para imponer una ideología musulmana a través de nombramientos políticos. Él condona a los pastores fulani, que portan armas de largo calibre y maquinarias mientras se desplazan con su ganado y expulsan de sus casas a los indígenas cristianos.
Ike habla de una rápida “talibanización” e islamización de Nigeria. Él observa que Occidente y su diplomacia son espectadores lejanos y observan sin comprometerse.
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