Arreglado por el P. Martín Blanco García OSA, y publicado en Guatemala de la Asunción por la Tipografía de Sánchez y de Guise en 1933, con licencia eclesiástica por el Canónigo Mons. José Luis Montenegro y Flores, Canciller Archidiocesano.
NUEVE MIÉRCOLES AL PADRE ETERNO
Por la señal ✠ de la Santa Cruz, de nuestros ✠ enemigos, líbranos Señor ✠ Dios nuestro. En el nombre del Padre, y del Hijo ✠, y del Espíritu Santo. Amén.
ACTO DE CONTRICIÓN
Señor mío Jesucristo, Dios y hombre verdadero, Criador y Redentor mio, por ser Vos quien sois y porque os amo sobre todas las cosas, me pesa de todo corazón de haberos ofendido: propongo firmemente de nunca más pecar, y de apartarme de todas las ocasiones de ofenderos, y de confesarme y cumplir la penitencia que me fuere impuesta: ofrézcoos mi vida, obras y trabajos en satisfacción de todos mis pecados; y así como os lo suplico, así confío en vuestra bondad y misericordia infinita me los perdonaréis, por los merecimientos de vuestra preciosísima Sangre, Pasión y Muerte, y me daréis gracia para enmendarme y para perseverar en vuestro santo servicio hasta la muerte. Amén.
ORACIÓN PARA TODOS LOS DÍAS
¡Oh Santísima Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo, que os habéis dignado crear al hombre haciéndole poco inferior a los Ángeles, para que cante vuestras alabanzas y os adore con toda el alma, con toda la mente y el corazón! Concédenos, Dios Uno y Trino, la gracia de serviros en la tierra con todas nuestras potencias y sentidos, para que os veamos cara a cara en la vida Inmortal de la Gloria. Amén.
Padre nuestro y tres Glorias.
PRIMER MIÉRCOLES
Considera alma mía, que Dios creó los Ángeles para custodia de los hombres de la tierra, y para que canten sus alabanzas en el Cielo. En reverencia de estos Espíritus puros, alaba tú la Majestad de tu Dios y Señor, diciéndole con los coros angélicos:
(Tres veces): Santo, Santo, Santo, es el Señor de los Ejércitos: llenos están los cielos y la tierra de tu gloria. Padre Nuestro, Gloria.
ORACIÓN
Padre de Bondad y Misericordia, desde el Trono de tu Majestad soberana, tiende una mirada compasiva sobre este tu siervo (o sierva) que te pide remedio en sus necesidades, consuelo en sus aflicciones y alivio en sus dificultades y trabajos. No te olvides Señor, que soy criatura tuya, hecha a imagen y semejanza, que me redimiste con la Sangre de tu Hijo Unigénito, y que me dispensaste las gracias del Espíritu Santo para bien y santificación de mi alma. Te lo pido por los méritos de Jesucristo nuestro Señor. Amén.
Se reza un Credo.
ORACIÓN A LA SANTÍSIMA VIRGEN
Virgen Inmaculada, Madre de Dios y Madre nuestra, a Vos acudo en mis penas y amarguras para que interpongáis vuestra poderosa intercesión en mi obsequio. Amén.
Se reza una Salve.
Bendito sea Dios Padre.
Bendito sea Dios Hijo.
Bendito sea Dios Espíritu Santo.
Tres personas distintas y un solo Dios verdadero.
En el nombre del Padre, y del Hijo ✠, y del Espíritu Santo. Amén.
SEGUNDO MIÉRCOLES
Por la señal…
Acto de contrición y Oración para todos los días.
Considera alma mía, que Dios creó los Arcángeles, para embajadores celestiales de sus designios. A este fin vinieron al mundo San Gabriel, San Miguel y San Rafael. En reverencia de estos espíritus puros, cumple tu la misión que Dios te ha designado en la tierra, alabándole con los coros angélicos:
Tres veces el Sanctus, Padre nuestro y Gloria. Las demás Oraciones se rezarán todos los días.
TERCER MIÉRCOLES
Por la señal…
Acto de contrición y Oración para todos los días.
Considera alma mía, que Dios creó las virtudes para esplendor de sus atributos divinos y exaltación de su grandeza infinita. En reverencia de estos espíritus puros, ilustra mi entendimiento y purifica mi corazón para cantar con los coros angélicos:
Tres veces el Sanctus, Padre nuestro y Gloria. Las demás Oraciones se rezarán todos los días.
CUARTO MIÉRCOLES
Por la señal…
Acto de contrición y Oración para todos los días.
Considera alma mía, que Dios creó las potestades para darte a conocer que toda potestad viene de Él y que no hay autoridad sin beneplácito. En reverencia de estos espíritus puros, dale gracias por tener una dependencia tan excelsa y elevada, cantando con los coros angélicos:
Tres veces el Sanctus, Padre nuestro y Gloria. Las demás Oraciones se rezarán todos los días.
QUINTO MIÉRCOLES
Por la señal…
Acto de contrición y Oración para todos los días.
Considera alma mía, que Dios creo los Principados para guiarte a tu último fin por los medios de su inescrutable providencia. En reverencia de estos espíritus puros, agradece la solicitud del Señor por tu bien y canta con los coros angélicos:
Tres veces el Sanctus, Padre nuestro y Gloria. Las demás Oraciones se rezarán todos los días.
SEXTO MIÉRCOLES
Por la señal…
Acto de contrición y Oración para todos los días.
Considera alma mía, que Dios creó las Dominaciones para manifestarte que el es el Dueño y Señor de los Cuerpos y las Almas y de todo cuanto existe. En reverencia de estos espíritus puros, ofrécele todo lo que tienes, lo que eres y lo que vales, diciéndole con los coros angélicos:
Tres veces el Sanctus, Padre nuestro y Gloria. Las demás Oraciones se rezarán todos los días.
SÉPTIMO MIÉRCOLES
Por la señal…
Acto de contrición y Oración para todos los días.
Considera alma mía, que Dios creó los Tronos, para manifestación de su grandeza y poderío. En reverencia de estos espíritus puros, acata la Majestad del Señor y ríndele homenaje por sus dones y larguezas, alabándole y diciéndole con los coros angélicos:
Tres veces el Sanctus, Padre nuestro y Gloria. Las demás Oraciones se rezarán todos los días.
OCTAVO MIÉRCOLES
Por la señal…
Acto de contrición y Oración para todos los días.
Considera alma mía, que Dios creó los Querubines para revelarte el amor sin termino y sin medida que siente por sus criaturas, especialmente por las redimidas por el Cordero Inmaculado. En reverencia de estos espíritus puros, ama a tu Creador con todo el afecto de que es capaz tu corazón, diciéndole con los coros angélicos:
Tres veces el Sanctus, Padre nuestro y Gloria. Las demás Oraciones se rezarán todos los días.
NOVENO MIÉRCOLES
Por la señal…
Acto de contrición y Oración para todos los días.
Considera alma mía, que Dios creó a los Serafines en prueba de sacrificio por tu felicidad. En reverencia de estos puros espíritus, revístete de abnegación y renuncia a todo lo que no sea amor de tu Creador, alabándole con los coros angélicos:
Tres veces el Sanctus, Padre nuestro y Gloria. Las demás Oraciones se rezarán todos los días.
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