Páginas

sábado, 25 de noviembre de 2023

LOS MASONES SE ALEGRARON POR EL ECUMENISMO Y LA REVOLUCIÓN CONCILIAR

Traducción del artículo publicado en RADIO SPADA.
  

[…] Los católicos han visto […] una rendición total e incondicional de su Jerarquía después de casi tres siglos de luchas valerosas, de condenas y de sagradas excomuniones, lanzadas precisamente contra los fautores de aquel liberalismo, de aquel ecumenismo y de aquella idea distorsionada de democracia de la cual siempre fue hecha portaestandarte la Masonería internacional, que ella ahora ha aceptado traidoramente en el último Concilio: contra, esto es, los fautores de la pax œcuménica, la paz mundial del Anticristo, que no sirve si no para relativizar la Iglesia, y después al mismo Cristo, en la amalgama del Nuevo Orden Mundial próximo venidero. Objetivo que viene manifestado siempre más abiertamente por los vértices ocultos que controlan pueblos y naciones.
   
Una cesión, también, que es más que suficiente para explicar por qué el Gran Maestro del Gran Oriente Masónico de Italia había podido escribir en alabanza del difunto Papa Pablo VI: «Para nosotros es la muerte de quien ha hecho caer la condena (de la Masonería, N. de R.) de Clemente XII y de sus sucesores. O sea, es la primera vez, en la historia de la Masonería moderna, que muere el Jefe de la más grande religión occidental no en estado de hostilidad con los masones. Y por primera vez en la historia, los masones pueden rendir homenaje a la tumba de un Papa, sin ambigüedad ni contradicciones» [1].
    
Una cesión que explica también por qué el mismo Gran Oriente ut supra había querido entregar el premio masónico nacional Galileo Galilei a Juan Pablo II (que obviamente lo rechazo: pero eso no le quita el valor significativo del hecho), afirmando que los ideales promovidos por aquel Papa son los mismos de la Masonería [2].
    
Una cesión que explica con elocuencia por qué la Gran Logia Masónica de Francia en 1986 había aclamado entusiastamente al mismo Juan Pablo II por el inaudito «encuentro de oración de Asís» con la siguiente declaración textual: «Los masones de la Gran Logia Nacional Francesa desean asociarse de todo corazón a la oración ecuménica que el 27 de octubre acogerá en Asís a todos los responsables de todas las religiones a favor de la paz en el mundo» [3].
    
Una cesión total, como se colige finalmente de las siguentes consideraciones de otro Gran Maestro del mismo Gran Oriente [italiano], Armando Corona: «La sabiduría masónica ha establecido que nadie puede ser iniciado si no cree en el G.A.D.U. (Gran Arquitecto del Universo, N. de R.), pero que ninguno puede ser excluido por nuestra Famiglia a causa del Dios en el cual cree y del modo en que Lo honra. A este nuestro interconfesionalismo se debe la excomunión sufrida por nosotros en 1738 por obra de Clemente XII. Pero la iglesia estaba ciertamente en error, si es verdad que el 27 de octubre del 1986 el actual Pontífice reunió en Asís a hombres de todas las confesiones religiosas para orar juntos por la paz. Y ¿que otra cosa buscaban nuestros Hermanos si no el amor entre los hombres, la tolerancia, la solidaridad, la defensa de la dignidad de la persona humana cuando se reunían en los Templos, considerándose iguales, por encima de las fés políticas, de las fés religiosas y del vario color de la piel?»[4].
    
[…]
   
ANDREA MANCINELLA (Ermitaño de Albano), Golpe nella Chiesa. Documenti e cronache sulla sovversione: dalle prime macchinazioni al Papato di transizione, dal Gruppo del Reno fino al presente/Golpe en la Iglesia. Documentos y crónicas sobre la subversióm: desde las primeras maquinaciones al Papado de transición, del Grupo del Rin hasta el presente (Prólogo del padre Curzio Nittoglia, epílogo de Aldo María Valli), Edizioni Radio Spada.
  
NOTAS
[1] Giordano Gamberini, editorial de La Rivista Massonica, año 1978, n. 5, pág. 290.
[2] Il Giornale, 22 de diciembre de 1996, pág. 10, y O Estado de S. Paulo, 23 de diciembre de 1996. Cfr. también: “Galileo Galilei” massimo premio massonico (che Papa Wojtila rifiutò) « Loggia Giordano BrunoGiovanni Paolo II premiato dalla massoneria.
[3] La Civiltà Cattolica, 6 de diciembre de 1986, pág. 495.
[4] Hiram, revista del Gran Oriente de Italia, abril de 1987, págs. 104-105.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Preferiblemente, los comentarios (y sus respuestas) deben guardar relación al contenido del artículo. De otro modo, su publicación dependerá de la pertinencia del contenido. La blasfemia está estrictamente prohibida. La administración del blog se reserva el derecho de publicación (sin que necesariamente signifique adhesión a su contenido), y renuncia expresa e irrevocablemente a TODA responsabilidad (civil, penal, administrativa, canónica, etc.) por comentarios que no sean de su autoría.