El desautorizado cardenal vicario de Roma, Ángelo de Donatis Fattizzo (izquierda) de 70 años, sustituirá después de Pascua al cardenal Mauro Piacenza, de 79, en la insignificante “Penitenciaría Apostólica”, escribe Marco Tosatti el 9 de Febrero.
El hijo de Giovanni De Donatis y Giuseppina Fattizzo cayó en desgracia hace tiempo con el dictador, que ha convertido la diócesis romana en un patio de recreo para sus caprichos. Está claro que el objetivo de este nombramiento es deshacerse de De Donatis.
Piacenza fue una de las primeras víctimas de Francisco Bergoglio que le apartó de la Congregación para el Clero en Septiembre de 2013 (donde estuvo por seis años), remplazándolo con Beniamino Stella Pederiva.
Según Tosatti, De Donatis será sustituido por Augusto Paolo Lojudice, actual arzobispón de Siena, un rumor que circula desde Junio de 2022. Lojudice había sido entre 2015 y 2019 obispón titular de Alba Marítima (actual Belgrado en el Mar, Croacia) y auxiliar de Roma Sur (y vicario general de la sede suburbicaria de Ostia).
Sin embargo, «dada la volubilidad psicológica del protagonista, los giros y cambios son siempre posibles», advierte Tosatti.
Adicionalmente, señala que Pietro Parolin Miotti sería el candidato con mayores probabilidades de éxito en el próximo cónclave, teniendo el apoyo no solo de los cardenales progresistas y de los carreristas diplomáticos, sino también el de los conservadores que no quieren al mini-Bergoglio de Matteo María Zuppi Fumagalli, exponente de la ecumenista Comunidad de San Egidio.
Caricatura tomada de GLORIA CARTOON
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