Como si no fuera suficiente con clérigos ladrones, los laicos conciliares también tienen parte en el Gran Holocausto Sexual y Malversación Conciliar, alentados por la impunidad con que actúa Francisco Bergoglio al engañar a los donantes con el Óbolo de San Pedro, que lejos de ser destinado para los pobres, lo emplea para comprar bienes raíces (y luego convertirlos en ruidosos procesos judiciales), apuntalar un Vaticano ad portas de la bancarrota y pagar abogados en procesos por abuso sexual.
La Oficina del Fiscal Federal para el Distrito Norte de Alabama anunció el martes 23 de Julio de 2024 que Kristen Marie Battocletti (foto), de 35 años de edad, fue acusada y se declaró culpable de fraude y malversación de fondos de la parroquia de la Universidad San Francisco de Asís en Tuscaloosa (diócesis de Birmingham en Alabama), informaron medios locales.
De acuerdo al fiscal Prim F. Escalona y el agente especial encargado del FBI Carlton L. Peeples, Batticletti había robado usando una tarjeta MasterCard que vinculó a sus cuentas de Apple Pay y CashApp en su teléfono más de 300.000 dólares de la parroquia donde se desempeñaba como asistente administrativa, destinando 220.000 dólares para monedas de TikTok que enviaba a creadores de contenido en dicha red social, y el resto para gastos personales como los pagos de su seguro de vehículo.
Según el acuerdo de culpabilidad, Batticletti había reconocido ante la diócesis de Birmingham el 4 de Octubre de 2023 que había transferido 70.000 dólares en Junio de 2023, 105.000 dólares en Julio de 2023 y $75.000 en Agosto de 2023; y posteriormente a ella, fue despedida. Se comprometió a devolver al menos 299.000 dólares a la parroquia.
El juez Lawrence Scott Coogler fijó una fianza de 5.000 dólares, y la sentencia se conocerá el 26 de Noviembre. Batticletti se enfrentará a una pena de hasta 20 años de prisión, tres años de libertad vigilada y una multa de 250.000 dólares.
A comienzos de mes, el presbítero Ignazio Medina Cruz, que fue condenado canónicamente por solicitación, se declaró se declaró culpable de robarse 300.000 dólares de la parroquia de San Estanislao en Wardsville (Misuri). Y en Abril, el presbítero Lawrence Kozak de la archidiócesis de Filadelfia fue arrestado por robarse 41.000 dólares de fondos parroquiales de la iglesia de Santo Tomás Moro en Pottstown (Pensilvania) para juegos en línea.
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