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viernes, 5 de julio de 2024

ACTUAR SATÁNICO EN TEMPLOS MEJICANOS

Noticias tomadas de distintas fuentes.

1.º PRESBÍTERO EN SALTILLO USA “MUÑECO MALDITO” EN SERVICIOS NOVUSORDITAS (Y EL OBISPÓN MINIMIZA LAS CRÍTICAS COMO “EXAGERACIONES”). 
    

El presbítero mejicano Victor Hugo Hernández Rea, párroco de San Antonio de Padua en la calle El Vergel de la colonia Gustavo Espinoza Mireles de Saltillo (Coahuila), quería hacer que la eucaristía fuera más interesante, por lo que compró una marioneta en la plataforma Mercado Libre, la llevó a la eucaristía y la llamó su “monaguillo”. Usó el títere como un ventrílocuo para aterrorizar a la congregación.
    
El presbítero, de 49 años e “instalado” el 6 de Enero de 2009, afirmó a los padres de familia presentes que no sabía que el títere, al que llamó “Jerry”, tenía antecedentes demoníacos. Es una réplica de Willie Puppet, un títere “poseído” del episodio “The Dummy” (El maniquí) de la serie estadounidense de la década de 1960 “La dimensión desconocida”, donde el ventrílocuo Jerry Etherson (interpretado por Cliff Robertson) desarrolla una paranoia por su muñeco Willie, y luego descubre que este lo controlaba a él. El episodio, que fue el número 33 de la 3.ª temporada, “abrió la escuela” para el subgénero de los “muñecos malditos” en cine y televisión.
    
Después de que el escándalo se difundiera en las redes sociales, el presbítero se disculpó y afirmó que no había sabido el origen y el significado de su “monaguillo”, y que solo había usado la marioneta en dos ocasiones, durante el novenario en honor a San Antonio de Padua, con el propósito de ilustrar historias del Evangelio.
    
El obispón Hilario González García, ordinario de la Diócesis de Saltillo, si bien tildó de “exageradas” las reacciones ante el uso de la marioneta por Hernández Rea, señaló que la Iglesia tiene sus propios métodos para predicar su doctrina, y aseguró a los medios locales que el presbítero ya no usaría el títere durante las eucaristías, por ir contra las normas.
   
  
2.º «POR MANDATO DE “LA SANTA MUERTE”», SUJETO VANDALIZA IGLESIA EN CULIACÁN.
    

Un sujeto irrumpió el pasado 1 de Mayo en la iglesia Espíritu Santo en la calle Rafael Buelna y Xicoténcatl en la colonia Las Quintas de Culiacán (Sinaloa), causando varios destrozos y aterrorizando a los concurrentes a una eucaristía y bautismo.
    
El sujeto decía actuar «por mandato de “La Santa Muerte”», y empezó a atacar a los presentes con un objeto metálico. Presuntamente, el hombre había sido visto la noche anterior realizando rituales con veladoras y espejos fuera de su casa en una calle privada, antes de volcar su furia contra las imágenes del templo. Pocos minutos después, los feligreses llamaron a la policía municipal, que se hizo presente mucho después que el atacante y sus cómplices (cuatro en total) huyeran del sitio, y simplemente recabó algunos datos y se marchó (a diferencia de cuando arrestaron con despliegue de la Secretaría de Defensa y la Marina al heredero del clan Salgueiro del Cártel de Sinaloa Brian Salgueiro Zepeda alias ‘El 90’ y dos escoltas nada más dirigirse a ese templo dos años antes).
    
   
La iglesia del Espíritu Santo y Santuario del Inmaculado Corazón de María, una de las más visitadas de la ciudad, fue construida por el sacerdote Gabriel Refugio Fonseca Gutiérrez TOSF († 1979), más conocido como “Padre Cuco”, cuyo apodo pasó a la iglesia. Además de tener la típica mesa novusordita, tiene tras la sede un mosaico del presbítero exjesuita esloveno Marko Iván Rupnik Kaučič, actualmente acusado de abuso sexual y de conciencia y bajo investigación en el Vaticano (pero que aún goza de fama con Francisco Bergoglio, cuyo protector es). Con todo y estar en zona céntrica, en sus inmediaciones se han presentado casos de hurto y robo a mano armada, situación que denuncian los feligreses.
    
El estado de Sinaloa, que de por sí es el epicentro del culto a Jesús Malverde († 1909), un criminal considerado “el santo de los narcos” y cuya imagen toma prestada del famoso actor y cantante Pedro Infante († 1957), ha visto en los últimos años crecer el culto a la “Santa Muerte”, una derivación sincrética de la deidad maya-azteca de la muerte. Para muestra, de camino a la presa Sanalona (que surte de agua a la ciudad de Culiacán), hay ocho altares dedicados a esta figura que incluso la jerarquía conciliar rechaza, no solo por su carácter idólatra y supersticioso, sino porque se vincula al mundo criminal.

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