Hay muchos movimientos (o carismas, como los llaman sus miembros) para escoger dentro la Iglesia del Vaticano II, cual si de un buffet se tratase: por nombrar algunos, Focolares, Legión de María, Acción Católica (sí, todavía existe), Opus Dei (y su derivado Hakuna), Schönstatt, Comunidad San Egidio, Talleres de Oración y Vida, Encuentro Matrimonial, Emaús, Camino Neocatecumenal, Cursillos de Cristiandad (y su derivado Jornadas de Vida Cristiana), Renovación Carismática, Heraldos del Evangelio-Caballeros de la Virgen, Comunidades de Radio María, etc. Cada día, aparecen más de estos movimientos, con sus particularidades o sin una identidad definida. Ahora bien, de algún tiempo para acá ha estado expandiéndose uno que podemos reconocerlo a simple vista, bien por llevar visible al cuello la Medalla Milagrosa, o por sus camisetas estampadas en eventos públicos. También lo son por su propaganda de la Consagración a la Santísima Virgen según el método de San Luis María de Montfort, sus retiros espirituales, su saludo-grito de guerra «¿Quién como Dios? ¡Nadie como Dios! / ¿Y después de Dios? ¡Nadie como la Virgen María!», y el activismo en plaza pública y redes sociales. Nos referimos, pues, a Lazos de Amor Mariano (en adelante LAM o Lazos Marianos).
Un resumen de su historia. Lazos de Amor Mariano fue fundado en la ciudad colombiana de Medellín el 16 de Junio de 1999 por José Rodrigo Jaramillo Fernández. Él cuenta que tuvo una “experiencia de conversión” en 1984, luego de haber sido secuestrado en la puerta de su casa por guerrilleros del Ejército de Liberación Nacional (ELN) el 30 de Noviembre de ese año. Liberado pocas horas después de una visión que tuvo mientras meditaba un Ave María (otra versión del relato cuenta que estaba meditando el Rosario) y la cual describió como “Océano de Misericordia”, empezó a realizar labor de predicación y asistencia social a habitantes de calle, dirigía cenáculos en las casas rezando el Santo Rosario y leyendo trechos del libro “A los sacerdotes, hijos predilectos de la Santísima Virgen” del sacerdote-presbítero Stefano Gobbi, y formó parte de un grupo de oración. Es así que un día miércoles 14 de Julio de 1999, un miembro de ese grupo de oración le dice que dé unas pláticas a un grupo de jóvenes que dudaban de la Virginidad Perpetua de María, la figura
del Papa y críticas generales sobre la Iglesia Católica, por causa de parientes protestantes que tenían. Jaramillo Fernández les propuso reunirse todos los viernes en la parroquia del Verbo Divino para acompañarlos en su formación y crecimiento espiritual, comenzando el viernes 16 de Julio, naciendo así LAM. A corte 2018, contaba con más de 15.000 misioneros que hacen presencia en varias ciudades y municipios de Colombia (organizadas en provincias), y una Provincia internacional (conformada por Aruba, Bolivia, Chile, Ecuador, Perú, Chile, Méjico, Guatemala, Venezuela, Estados Unidos, Panamá, Brasil, Uruguay, España, Nueva Zelanda y Argentina –en este último, el arzobispado de Paraná les permitió realizar labores el 6 de Julio del 2021–), y es reconocida como una Asociación privada de fieles por la Archidiócesis de Medellín bajo el decreto arzobispal 127/G/14
del 7 de Abril del 2014.
La pertenencia en LAM consta de varias etapas, como son:
- Retiro de conversión: Es un retiro de cuatro días, que comienza el jueves por la tarde y termina el domingo ídem. A partir de allí, se extienden las invitaciones para iniciar el proceso de consagración, que dura nueve meses.
- Tres meses después de iniciado el proceso de consagración, se permite iniciar la Lectio a quienes desean pertenecer activamente a la comunidad (en términos del LAM, ser misioneros comprometidos), que dura seis meses. En Lectio, el tema de formación es la Biblia, y el consejo directivo local evalúa el desempeño de los aspirantes. Cabe anotar que por lo general, muchos hacen este proceso después de la consagración.
- Culminada la Lectio, se inicia el proceso de la Escuela San Lorenzo (que desde 2017 se distingue con la camiseta marrón), donde se explican las generalidades del movimiento y tras seis meses de formación se aprueba a los misioneros del movimiento, a quienes se les da la carta de bienvenida y deben escoger en qué misión quieren servir (en términos generales, cuentan con 20 misiones, pero en cada localidad puede variar).
- Escogida la misión, comienzan las Escuelas de María, que es, si se permite el símil, “la universidad del LAM”: Cada “semestre” (que en realidad dura dos años) se aborda un tema específico, que llaman “Escuela”: En el primer “semestre” están las escuelas de Apologética, Catequesis de retiros, Sagradas Escrituras, y Moral Fundamental. Es en el segundo “semestre-bienio” que se empieza a ver Mariología y otros temas más específicos.
Mencionamos las camisetas: Para las Escuelas de San Lorenzo, desde 2017 se usan las camisetas cafés, y los misioneros (miembros) de LAM hay tres tipos de camisetas: celeste (misionero participante), azul (misionero comprometido) y rojo (misionero
consagrado). Los niños (sí, los matrimonios LAM hacen ingresar a sus hijos -y por lo general tienen muchos- allí) reciben dos camisetas: una blanca desde que nacen hasta los cinco años, cuando usan la camiseta amarilla.
Aunque LAM se presenta como un movimiento que tiene entre sus objetivos la defensa de la fe católica (recordemos que, según ellos, el movimiento nació en una reunión para responder dudas que venían de un conjunto protestante, que Antioquia es uno de los departamentos más conservadores y católicos de Colombia –para muestra, en la consulta interpartidista de 2018, el movimiento apoyó al exprocurador Alejandro Ordóñez Maldonado; y el misionero Oscar Mauricio Giraldo Hernández logró una curul en el Senado colombiano en 2022 con el Partido Conservador–; y que entre sus objetivos para combatir está el movimiento New Age), la realidad es que es todo menos ortodoxo, porque su apologética es más del Novus Ordo que de la Iglesia Católica, y siguen el Vaticano II (cuya divergencia frente a la doctrina anterior a él es de conocimiento público). En sus reuniones y “cenáculos” se reza el Rosario siguiendo el modelo wojtyliano con sus “Misterios Luminosos”, se lee el Evangelio según el leccionario del Novus Ordo, rezan y promueven la “Coronilla de la Divina Misericordia” de Faustina/Elena Kowalska Babel, se identifican con el Movimiento Carismático, y el libro “A los sacerdotes, hijos predilectos de la Santísima Virgen” de Gobbi es un material de referencia (recordemos que Jaramillo empezó a hacer “cenáculos” antes de fundar el LAM).
Los miembros de LAM son particularmente reacios frente al personal externo, como
quiera que si no viene a adherirse a ellos, lo asumen como un espía (de
ahí que el investigador científico difícilmente pueda establecer
comunicación con ellos). Y en redes sociales, sus publicaciones son por
lo general replicar la información institucional (retiros, consagraciones, fechas de eventos significativos) e imágenes producidas por la organización, sin más interacción comunicacional que comentar lo que
sienten, cómo los interpela esa publicación en su relación espiritual, pero sin reflexionar ni emitir criterio sobre el contenido en sí. Dicho de otra manera, los LAM en su comunicación ad intra exaltan la experiencia por sobre la fe intelectual (la fe como asentimiento de la razón ilustrada por la Revelación), contrariando no solo la constitución Dei Fílius del Concilio Vaticano de 1870 y a la encíclica Ætérni Patris de León XIII, sino incluso a la encíclica Fides et Rátio de aquel Juan Pablo II Wojtyła que ellos tanto admiran y cuya “Nueva Evangelización” representan. Con los particulares, la comunicación es o en plaza pública o en publicaciones de terceras personas; y orientada a ganar prosélitos, o
enfrentarse con quienes no comulgan con su visión. Nadie se salva, aun si son católicos pero que expresan desacuerdo con determinadas situaciones o conductas dentro de la Iglesia, a quienes les escriben cosas como: «Espero contactarme con tu párroco y te voy a seguir, para que no te admitan en ninguna parroquia», lo que lleva a preguntar si son un movimiento eclesial o la
versión religiosa de la Stasi o de los cederistas cubanos, como en el siguiente ejemplo:
Un comentario de un miembro de LAM en Facebook (Contexto: el autor de la publicación que originó el comentario subió una crítica al Movimiento Carismático).
Es hora pues del punto psicológico: Prima fácie, basta con oírlos hablar de «Papito Dios» o «Mamita María» para darse cuenta que hay que habérselas con personas que posiblemente tienen carencias de afecto de sus padres o tuvieron conflictos emocionales (aparte de la evidente cursilería que representa usar semejantes expresiones, impropias de un apostolado de militancia como se presentan). Pero esto es apenas algo superficial, porque al abordar sus retiros de conversión, se mezclan puestas en escena que apelan al sentimentalismo con elementos traumáticos que en personas susceptibles propiciarán cuando menos gaslighting (literalmente “luz de gas”, una forma de manipulación en la cual a la persona se le hace creer que está padeciendo problemas que en realidad no tiene o se busca destruir su percepción de la realidad), para no hablar de las presuntas “oraciones de liberación” que hacen, en todo semejantes al movimiento carismático.
Alguno objetará diciendo que estamos condenando los retiros en general.
Nada más lejos de la realidad, porque seguimos a Pío XI, que en su encíclica Mens Nostra
recomendaba su práctica. El problema está cuando los retiros, lejos de
propender por una sana espiritualidad, ofrecen charlas sentimentalistas y
celebraciones litúrgicas en que las rúbricas más básicas son “mandadas a paseo”, aunados a un proceso de lavado de cerebro típico de las sectas: actividades extenuantes con pocas horas de sueño, alimentación baja, dinámicas de choque, aislamiento del exterior, pérdida de la noción del tiempo, creación de sentimientos de culpa, miedo impotencia y dependencia emocional.
Por otra parte a los miembros, so color de la “santificación personal”, se les exige llevar en una planilla mensual un control constante de sus actividades, semejante al “plan de vida” que siguen en el Opus Dei [Un caso de actualidad: a fines de 2022, por mandato archidiocesano fue intervenida una comunidad estilo conventual en la ciudad colombiana de Barranquilla, que había sido establecida pocos años atrás por LAM. Uno de los miembros de la comisión relató bajo anonimato que por entrevista que hizo a las mujeres miembros de esa comunidad (jornada comenzando a las 2 de la madrugada, cuatro horas de clases sin un plan programado, disparidades en la hora de refacción con alimentación de baja calidad nutricional, oraciones siguiendo literatura propia en vez de las oraciones aprobadas oficialmente) llegó a la conclusión que sus prácticas eran de estilo sectario. El resultado: fue suspendida la comunidad].
No vamos a entrar en temas de clase social o regionalismos, pero (por lo menos en su natal Colombia), los directivos y principales exponentes de LAM son paisas (habitantes de Antioquia y el Eje cafetero –Caldas, Quindío y Risaralda–), particularmente de Medellín y sus alrededores, y los retiros de LAM son generalmente para personas acomodadas o de clase media alta: por ejemplo, una plaza (cupo) en el retiro de conversión está costando alrededor de 50 dólares (quizá parezca poco, pero allá es aproximadamente un cuarto del salario mínimo mensual) cuando es en una casa de retiros propia de ellos (en caso contrario, los costos se elevan, llegando hasta 300 dólares). Eso, las colectas en sus reuniones y eventos, y lo que obtienen por las ventas de literatura, imaginería y demás parafernalia, les hace allegar importantes sumas de dinero, que (no nos digamos mentiras) les ha conseguido en varias diócesis un trato preferencial y de favor, provocando rivalidades con otros movimientos eclesiales del Vaticano II (en Cartagena de Indias, por ejemplo, era un secreto a voces que durante varios años hubo rivalidad entre LAM y la Renovación Carismática por la organización de los eventos archidiocesanos).
Finalizando (aun con algunos elementos que faltaron por analizar, debido a que la información existente es fragmentaria), LAM, es al igual que Cursillos, Emaús o el Camino Neocatecumenal, un movimiento que NO ES CATÓLICO. Inclusive, un movimiento que, si no es una secta como tal, se le aproxima. La Sana Doctrina nunca necesitó engañar a nadie ni apoyarse en manipulación psicológica para ganar adeptos o responder a las inquietudes y ataques de sus detractores.
REFERENCIAS CONSULTADAS:
- ARISTIZÁBAL D., Ángela J.: Artículo de investigación para maestría: Motivaciones para el inicio y la permanencia en un proceso de conversión en Lazos de Amor Mariano. El caso de El Santuario (Antioquia). Universidad de Antioquia, Facultad de Ciencias Sociales y Humanas-Departamento de Antropología. Medellín, 2018 (disponible en línea: https://bibliotecadigital.udea.edu.co/bitstream/10495/10024/1/AristizabalAngela_2018_MotivacionesInicioPermanencia.pdf - Consultado: 20 de Diciembre de 2022).
- CHUMANÍA L., Elías S.: Disertación para maestría: Construcción del sentido de vida por los valores de creación, vivenciales y de actitud en los participantes del grupo Lazos de Amor Mariano (LAM). Estudio realizado desde la logoterapia con los participantes del grupo “Lazos de amor mariano” en el año 2020-2021. Universidad Católica del Ecuador, Facultad de Psicología-Psicología clínica. Quito, 2021 (disponible en línea: http://repositorio.puce.edu.ec/bitstream/handle/22000/19805/Trabajo%20de%20Titulaci%C3%B3n%20Elias%20Chuman%C3%ADa.pdf - Consultado: 8 de Enero de 2023).
- OLIVERA R., Javier, SE: Entrada de blog Una semana con “Lazos de Amor Mariano”. Que no te la cuenten, 11 de Octubre de 2022 (disponible en línea: https://www.infocatolica.com/blog/notelacuenten.php/2210111219-una-semana-con-lazos-de-amor).
- ORTEGÓN M., Alexánder: Tesis de maestría: La pedagogía en “Lazos de Amor Mariano”, ¿Una sinfonía inconclusa? Un estudio etnográfico a la comunidad LAM de La Dorada, Caldas. Universidad Católica de Manizales, Facultad de Educación. Manizales, 2019 (disponible en línea: https://repositorio.ucm.edu.co/handle/10839/2649 - Consultado: 4 de Enero de 2023).
- TRUJILLO G., Esteban: Artículo de investigación: Las expresiones de las mediaciones de “Lazos de Amor Mariano”, “New Ways Ministry” y “Caminos de Esperanza” en espacios sociales en red. Universidad Católica de Pereira, Facultad de Ciencias Humanas, Sociales y de la Educación-Comunicación Social-Periodismo. Pereira, 2015 (disponible en línea: https://repositorio.ucp.edu.co/bitstream/10785/3253/1/DDMCSP22.pdf - Consultado: 4 de Enero de 2023).
- URREGO R., John E.: Articulo de investigacion: Estilo de vida carismático en el catolicismo: Proximidades sociológicas a las creencias y prácticas de la Renovación Carismática Católica, en Revista “Cuestiones teológicas”, vol. 46 no. 106 (Jul-Dic 2019), ISSN 0120-131X. Universidad Pontificia Bolivariana, Escuela de Teología, Filosofía y Humanidades. Bogotá, 2019. (disponible en línea: http://www.scielo.org.co/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0120-131X2019000200379 - Consultado: 10 de Enero de 2023).
No estoy de acuerdo con el artículo. No pertenezco a Lazos de Amor Mariano pero no creo que la intención del grupo sea económico porque las conversiones que yo he visto sin duda alguna tienen únicamente el Sello de Nuestro Señor.
ResponderEliminarCreo que si bien es posible que sean engañados por el Novus Ordo aún conservan costumbres muy católicas cómo la defensa de las familias numerosas y el rezo del Santo Rosario.
Espero se pueda enmendar los desaciertos del artículo
El Señor Dios los guarde y lo llene de Su Gracia y de Su Bendición
apqv
La experiencia muestra que conversiones basadas en sentimentalismo generalmente sucumben ante persecuciones. Y en cuanto al tema económico, ¿acaso van a ser tan obvios para decir sin más: «Vamos a hacer dinero con la devoción a la Virgen»? No, porque después la gente no cae en su secta.
EliminarPor otra parte, ellos no conservan el Santo Rosario, porque en vez de rezarlo como la Santísima Virgen María lo enseñó a Santo Domingo de Guzmán, lo rezan al modo wojtyliano (con los mal llamados “Misterios luminosos”, que la Virgen NO REVELÓ, ni Le pasaron por el pensamiento –y dicho sea de paso, Wojtyła en su carta “Rosárium Vírginis Maríæ”, solo los propuso, sin imponerlos como muchos novusorditas creen–). Aparte, ellos rezan y propagan la falsa devoción de la “Divina Misericordia” de Faustina, con que los conciliares han suplantado el Santo Rosario.
Finalmente, no es un desacierto el artículo, porque es verdad cuanto se expone allí. “Lazos de Amor Mariano” es tan secta como lo son los Neocatecumenales, el Opus o el Carismaticismo del que derivan.
De las sectas camuflajeadas en devoción, líbranos, Señor.
Mi esposa pertenece al movimiento, hemos tenido muchos inconvenientes porque se evidencia claramente un adoctrinamiento que en ocasiones es complejo de sobrellevar y que afecta directamente la dinámica familiar.
ResponderEliminarPero también se evidencia en el artículo una exageración basada en algunas falasias, que dejan muy mal parado al movimiento y desconocen cosas positivas que tiene el mismo.
Juancho, en el hecho mismo que observes esos inconvenientes que dices y cómo han adoctrinado a tu esposa, debería hacerte reflexionar seriamente sobre la idoneidad del movimiento, aunque no estés de acuerdo con los planteamientos del artículo (que dicho sea de paso, hubo que investigar mucho y arduamente para poder prepararlo, porque no hay casi información en internet que no sea echándole flores al LAM). Y quizá parezca exageración alguna cosa, pero no se relataría si no fuera verdad que pasó.
EliminarComo en todo, hay cosas que pueden ser negativas. Incluso las actitudes de algunos misioneros pueden no ser las esperadas. Pero aun así Dios puede actuar allí.
ResponderEliminarYo fui en octubre a causa de una adicción, de la que no fui liberado. Pero hubo gente que sí tuvo al menos manifestaciones de espíritus que tenían dentro y no lo sabían. Recuerdo que aquella primera vez, durante la bendición de María Auxiliadora, se manifestó un espíritu en un chico. Eso fue algo que no me esperaba. Y no todos escucharon eso. Pregunté a varios y unos sí lo escucharon (describiendolo como el sonido de un caballo, tal como yo lo escuché) y otros no lo escucharon (incluido el chico que estaba al lado mío).
(Continúo en el otro comentario...)
(...Continuación del primer comentario)
ResponderEliminarFui a un segundo retiro el fin de semana pasado (11 de junio de 2023), y esta vez hasta recibí un abrazo directamente de Jesús.
En la primera noche, la directora nos dijo que cerráramos los ojos porque Jesús iba a darnos un abrazo. (Los misioneros nos abrazaban en nombre de Jesús). Yo sentí el deseo de entregarle mi vicio a Jesús cuando me abrazara el misionero. Pero como yo escuché que de repente algunas personas comenzaron a llorar con fuerza cuando las abrazaron (incluyendo al chico que estaba delante de mí, que después supe que tenía espíritus porque le estaban haciendo brujería), eso me distrajo. Y luego de que ya me dieron el abrazo a mí, dije en mi mente: "Ay, se me olvidó entregar mi vicio a Jesús durante el abrazo".
En eso llega un segundo hombre y me abraza, y me contenté porque pude entregar mi vicio mientras el misionero me abrazaba. Pero yo noté diferencias con el primer abrazo: esta segunda persona era mucho más acuerpada (tanto que mis brazos quedaron bastante abiertos); esta persona se quedó más tiempo abrazándome; antes de dejar de abrazarme, me abrazó más fuerte todavía; y antes de irse me dio 2 palmadas en el hombro (y en ese momento yo pensé: "Será que esta persona sabe o sospecha que tengo un problema grave"?)
Yo asumí que había sido un error de algún misionero que había pasado por esa fila dando abrazos y pensando que todavía no había pasado. Jamás pensé que hubiera algo extraordinario ahí. Al día siguiente le pregunté al chico que estaba a mi lado: "¿Cuántos abrazos le dieron a usted?" Me dijo que uno solo. Entonces yo pensé: "No, entonces no fue un simple error, porque tendrían que haberle dado abrazo también a él, siendo que él estaba al lado del pasillo, y yo estaba pegado a la pared". Pregunté como a 10 personas y todas dijeron que solo recibieron un abrazo.
Le conté a la directora y se sonrió y dijo: "Fue Jesús, porque nosotros no abrazamos 2 veces". Pero aun así yo quedé con la duda. Entonces en mi mente le dije a Jesus: "Si de verdad fuiste tú, dame una señal, si tú quieres". Unos momentos después vino com fuerza a mi mente el detalle de las palmadas en mi hombro. Pregunté a los misioneros si alguno de ellos dio palmadas a alguna persona luego de haberlas abrazado. Me dijeron que no, y uno de ellos me dijo que ellos no pueden dar palmadas ni sobar a las personas: solo el abrazo y nada más. Y eso confirmó que no fue ningún misionero que me abrazó esa segunda vez.
Pero el testimonio de una chica me lo confirmó aun mas: dijo que cuando a ella le dieron el primer abrazo (que se lo dio una misionera), luego vino un hombre que la abrazó desde atrás, y ella sintió que este hombre era musculoso y muy alto. Definitivamente esa persona no podía ser un misionero porque los misioneros hombres no pueden tocar a las mujeres.
Fue un bonito detalle de parte de Jesús, el hecho de haber querido satisfacer un deseo que ni siquiera se lo había expresado a Él mismo, porque en ningún momento le pedí ni le insinué que me mandara otro misionero para entregarle mi adicción, y mucho menos le pedí que viniera Él mismo. (Tan herido estaba por sentir que Dios no escuchaba mis oraciones y solo se quedaba de brazos cruzados viendo cómo yo me hundía cada vez más).
Esto me hizo entender mejor que Dios tiene en cuenta incluso los pensamientos que ni siquiera se dirigen directamente a Él.
Y además me hizo pensar en la bondad y humildad de Jesús, pues justo el mes pasado me sentía tan herido (porque sentía que Dios no me ayudaba al menos a suavizar un poco los impulsos que siento), que en mi mente le llegué a decir que "si no fuera por el Infierno, nunca jamás quisiera a saber nada más de Ti". Deseé el suicidio como nunca lo había hecho, y deseaba gritarle a Dios que lo odiaba.
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Como dije, no todo es perfecto, pero fui testigo de que Dios allí se manifiesta. En mi primer retiro no me pasó nada, pero en el segundo vino Jesús a abrazarme para ayudar a mi corazón herido por la sensación de que Él no me escuchaba.
Diego N. Barrera, Dios actúa en donde Él quiere y cuando Él lo considere oportuno. De otra parte, hay que amar y servir a Dios por ser Dios, no por los gustos y consolaciones sensibles que se pueda recibir, pues «caminamos por fe y no por vista» (2.ª Corintios.V, 7).
EliminarY por otra parte, hay que tener cuidado porque el “Movimiento Carismático” (del cual se deriva “Lazos de Amor Mariano”) está basado en la noción errónea de que la experiencia emocional siempre acompaña el conferimiento de gracia, cuando la Doctrina Católica señala que la única indicación sensible del otorgamiento de la gracia es el mismo signo sacramental; y habitualmente no es Dios el que actúa allí en esas reuniones de tipo carismático sino el demonio (y esto por permisión divina), en castigo por rechazar los medios ordinarios de la gracia que son los siete sacramentos de la Iglesia, porque el que cree hallar algo en el carismatismo afirma que los Sacramentos no son suficiente.
Finalmente, te aconsejamos por lo que has escrito al final de tu comentario, que busques confesión con un sacerdote católico de forma inmediata, porque has desesperado de la misericordia de Dios y considerado el suicidio y la blasfemia.
Es curioso categorizar como secta, cuando dices que tienen miedo a los externos, algo que según mi lectura tu mismo padeces. ,Miedo al Novus Ordo. Y vaya dices que no es católico, entonces en mis 9 años de misionero, la salvación de varios matrimonios, jovenes y niños ha sido obra del diablo, que pesar... que tragedia. Es grave la división que crean, he asistido 9 años al grupo y visto frutos de santidad impresionantes. Un articulo lleno de ataques, como si estuviéramos sirviendo al diablo mismo, ya que no se acomodan a los gustos que ustedes como propios sectarios dicen.
ResponderEliminarVosotros los liberales/modernistas decís siempre que rechazar el “cambio” es tener miedo, mientras os presentáis como los “valientes” al asumirlo sin haber definido si quiera qué es ese cambio, por qué se necesita, cuáles serán sus resultados y cómo evaluarlos. Y a eso, la respuesta de la Iglesia Católica es la encíclica “Pascéndi Domínici gregis” de San Pío X (si no la conoces, puedes leerla aquí: https://wwwmileschristi.blogspot.com/2019/09/enciclica-pascendi-dominici-gregis.html).
EliminarNosotros no le tenemos miedo al Novus Ordo como si fuese algo desconocido; lo rechazamos con conocimiento y pruebas por ser una liturgia falsa y contraria a la Doctrina Católica, de la cual el Vaticano II se separó para unirse al mundo, cuando en realidad la amistad con el mundo es enemistad contra Dios (Santiago IV, 4).
Si hay alguien que crea división (que es la palabra que usáis siempre contra los que no están de acuerdo con vosotros), no somos nosotros. Pero aun así, es mejor que exista división por la Verdad y no la unidad en el error.
Dices: «entonces en mis 9 años de misionero, la salvación de varios matrimonios, jovenes y niños ha sido obra del diablo, que pesar... que tragedia. Es grave la división que crean, he asistido 9 años al grupo y visto frutos de santidad impresionantes». Los neocatecumenales alegan lo mismo que tú, en una misma respuesta tomada del manual de las sectas: presentar como “fruto” sobrenatural lo que bien puede ser resultado de otras circunstancias. ¿O más bien el andar presumiendo de esos “frutos” como algo distintivo no es sino fruto de la vanagloria?
Por otra parte, esto aquí no es cuestión de gustos (que es lo que siempre decís vosotros), como si ser católico fuese una moda pasajera («Las personas que sirven a Dios no deben andar con la moda. La Iglesia no tiene modas», dijo Jacinta Marto, una de los pastorcitos de Fátima). Aquí la cuestión es de fe y verdad, porque el alma está en juego y para salvarse es necesario adherir a la Fe Católica como se ha seguido desde antiguo, sin los añadidos de novedades extrañas y semtimentalismos que no aguantan presión.
Agradezco tu respuesta. Ya que mencionas que estos puntos han sido tratados y que me vanagloria al explicar cosas, propongo abordarlos sistemáticamente y dialécticamente, como nuestra bella tradición católica exige, siempre buscando esa síntesis entre caridad y verdad.
EliminarCitas 1 Cor 14, 34-35, pero recordemos también: "No apaguéis el Espíritu" (1 Tes 5, 19). A lo largo de la historia, la Iglesia ha discernido sin sofocar la acción del Espíritu. Los franciscanos, dominicos y carmelitas fueron recibidos con recelo, y sin embargo, su carisma enriqueció la Iglesia. Si LAM fomenta el Rosario y los sacramentos, ¿no merece tiempo para discernimiento antes de su juicio?
San Luis de Montfort no rechazaba el intelecto, sino el intelectualismo jansenista. En su Tratado de la Verdadera Devoción afirma que esta nos une a Cristo. Si LAM logra esto, aunque imperfectamente, ¿no refleja la voluntad del Padre?
Respecto a la Divina Misericordia, fue aprobada por Juan Pablo II, y la devoción a las Llagas tiene raíces en el siglo XIX. Como ocurrió con Lourdes y Fátima, el problema no está en la devoción en sí, sino en interpretaciones erróneas. La Iglesia, guiada por el Espíritu Santo, jamás permitiría que una devoción errada se promueva como auténtica, independientemente de quién la apruebe.
Reducir la postura de Lutero a la envidia no explica el impacto de su reforma. En 1517 escribió: "Debemos volver a los Padres de la Iglesia y despojarnos de estas novedades medievales". Este argumento se parece al de quienes hoy rechazan el Vaticano II por considerarlo innovador.
La verdadera Tradición, como enseñaba Newman, se desarrolla sin cambiar su esencia. Lo que parece moderno tiene raíces antiguas: la colegialidad episcopal en los primeros concilios, la libertad religiosa defendida por Santo Tomás, el ecumenismo promovido por los Padres Capadocios.
Cristo enseñó: "Por sus frutos los conoceréis" (Mt 7, 16). San Pablo enumera los frutos del Espíritu (Gál 5, 22), incluyendo la paz y la caridad. Los primeros frutos pueden ser inmaduros, pero no por ello un movimiento está condenado.
La devoción al Sagrado Corazón fue cuestionada en sus inicios y hoy es universal. Si LAM fomenta la Eucaristía, la confesión y una vida cristiana tradicional, ¿no es esto un signo positivo?
San Roberto Belarmino enseñó que debemos perseverar en comunión con el Papa, pues fuera de ella hay cisma (De Romano Pontifice). La confusión doctrinal en Pedro III demuestra cómo el sedevacantismo y el tradicionalismo radical conducen al caos.
Querido hermano, comparto tu celo por la ortodoxia, pero recordemos las palabras de San Agustín: "En lo esencial, unidad; en lo dudoso, libertad; en todo, caridad". La Iglesia es nuestra Madre y debemos amarla, incluso cuando no comprendamos del todo sus caminos.
Con afecto en Cristo,
Alejandro
Pecador que confía en la Misericordia Divina (1 Tim 1, 15-16)
PD: Cuando leo visiones que predicen la muerte de los movimientos modernos, recuerdo que en la primera venida de Cristo también fariseos tradicionalistas y saduceos modernistas peleaban por el poder. Jesús volvió por aquellos que no estaban en esa guerra.
Pd2: Busqué en la documentación de trabajos citados y lo que encontré no justifica una visión tan negativa.
Aquí aparte (porque el resto está luego de nuestra primera respuesta que te dirigimos), queremos detenernos en tu afirmación: «Lo que parece moderno tiene raíces antiguas: la colegialidad episcopal en los primeros concilios, la libertad religiosa defendida por Santo Tomás, el ecumenismo promovido por los Padres Capadocios».
EliminarEl ecumenismo de los Padres Capadocios (San Basilio el Grande, su hermano San Gregorio de Nisa y su amigo San Gregorio Nacianceno) hacia los semiarrianos era para reconducirlos a la Fe Católica, no para que perseveren en el error (que para eso no es la libertad de que hablan San Agustín y Santo Tomás, porque el error no tiene ni puede tener derecho alguno –y decir lo contrario es injuriar a Dios, porque es tanto como decir que Él tuviese necesidad de los impíos, diese licencia para pecar o Le fuese grato tener hijos desleales e inútiles, como está escrito en Eclesiástico XV, 12, 21-22–).
Y sobre la colegialidad, la cantidad de Sínodos más o menos legales de los primeros siglos no fue tanto un signo de la unidad del Episcopado, sino de su división en facciones locales o doctrinales, y a menudo fue la causa de la rápida propagación de la herejía en el cuerpo episcopal (ahí está el arrianismo de ejemplo si no). E incluso en el caso de los Concilios Ecuménicos auténticos, veamos al Papa San Celestino I (ya que Lumen Géntium lo cita inapropiadamente en el n. 23): este Papa envió al Concilio de Éfeso (donde numerosos sacerdotes estaban presentes con los obispos), entre sus legados, al sacerdote Felipe, con voto decisivo, quien ejerció con fuerza el poder que le fue conferido. El Papa había ordenado a sus legados no comprometer la autoridad de la Sede Apostólica interfiriendo en las discusiones como simples obispos: debían juzgar y no dejarse juzgar (el principio posteriormemte enunciado de «Prima sedes a némine judicátur nisi deprehendátur a fide dévius»). Evidentemente, el Papa, en pleno primer milenio, cree que el Concilio no tiene otra autoridad que la suya; y si se leen las actas, se ve que los Padres no pensaban diferente.
Y si se quiere ir a los Apóstoles (en cuyo caso se puede perfectamente responder que el único acto que hicieron como cuerpo colegiado fue huir cuando arrestaron a Cristo), su potestad es ad extra, en la fe y la predicación, pero el fundamento de la Iglesia lo puso Cristo en San Pedro, a quien se le dio la potestad plena de las llaves y el gobierno tanto a él como sus sucesores los Papas (del cual los Apóstoles y sus sucesores los Obispos reciben por delegación y bajo su mando –porque no es lo mismo la potestad del orden que la jurisdicción–).
En primer lugar, como misionero y testigo de la acción de Dios en la vida de los santos y en la Iglesia, debo decir que reducir la riqueza de la vida espiritual a meras estructuras organizativas o a sospechas de manipulación psicológica es ignorar la obra del Espíritu Santo, que sopla donde quiere (Jn 3:8). La historia de la Iglesia está llena de movimientos que, en su origen, fueron criticados por no ajustarse a los moldes humanos, pero que luego fructificaron en santidad. Baste recordar a San Francisco de Asís, cuyos primeros compañeros fueron tachados de "ignorantes y fanáticos", o a Santa Teresa de Jesús, cuya reforma carmelita enfrentó la persecución del santo oficio.
ResponderEliminarEl artículo acusa a LAM de ser "sentimentalista" y "poco ortodoxo", pero olvida que la verdadera devoción mariana —como la enseñó San Luis María Grignion de Montfort— es radicalmente cristocéntrica y se alimenta de una experiencia de Dios, no solo de fórmulas intelectuales. La Tradición católica no es un museo de ideas estáticas, sino un río vivo que bebe de la Revelación y se encarna en cada época. Decir que LAM "no es católico" por usar la Medalla Milagrosa o promover la Coronilla de la Divina Misericordia (aprobada por la Santa Sede y que si no le gusta por moderna no lea mucho de la visitación que 100 años antes a una monjita de la visitación prácticamente le dictaron una muy similar) es desconocer que la piedad popular ha sido siempre un semillero de conversiones, incluso para quienes no tienen acceso a tratados teológicos.
El artículo insinúa que LAM se aleja de la "Sana Doctrina" por aceptar el Concilio Vaticano II. Aquí radica un error grave: confundir Tradición con tradicionalismo. Como recordaba el cardenal Newman, la Tradición es dinámica y se desarrolla en fidelidad al depósito de la fe, mientras que el tradicionalismo es una nostalgia estéril que, paradójicamente, llevó a Lutero a romper con la Iglesia al pretender "recuperar un pasado idealizado" (Hermano ojo con esto, los que han pretendido ser los más puros han terminado en nombres como Arrio Lutero y Lucifer) La verdadera fidelidad no rechaza los concilios ecuménicos —como el Vaticano II—, sino que los integra en la continuidad del Magisterio.
Como misionero, he visto cómo comunidades como LAM —con sus limitaciones humanas— han rescatado a jóvenes de las garras del secularismo y el protestantismo. ¿Es perfecto su método? No, como tampoco lo fueron los primeros franciscanos o los discípulos de San Ignacio. Pero su celo por el Rosario, la defensa de la familia y la adoración a la Eucaristía son frutos que ningún "lavado de cerebro" puede producir. El Espíritu Santo actúa incluso en vasijas de barro (2 Cor 4:7).
Criticar los retiros de LAM por ser "emocionales" es ignorar que la fe involucra corazón y razón. Santa Teresa decía: "Todo lo que no es amor, es ruido". Claro, hay que discernir excesos (como en cualquier grupo), pero muchos santos —desde San Ignacio hasta el Padre Pío— usaron métodos intensivos para despertar almas. ¿Eran ellos "sectarios"?, averigué quien fue San Juan de Dios que lloro tres días seguidos o porque el Espíritu Santo permitia que la gente al escuchar la prédica de Monfort la gente llorara lágrimas de conversión
En lugar de descalificar, invito a una crítica constructiva: que LAM refine su formación doctrinal, evite actitudes sectarias y se abra al diálogo con la gran Tradición. Pero acusarlos de "no ser católicos" es repetir el error de los fariseos, que confundieron la ley con el espíritu que la anima. Como escribió San Juan de la Cruz: "Donde no hay amor, pon amor y sacarás amor".
Vivat Iesus, amor noster! Et María, spes nostra!
Y después de Dios?
Pdta: ojo con sus ironías que se parecen a las ironías de como iniciaron los protestantes y terminaron en que el papá era el anticristo prácticamente como hoy los sedevacantistas y su papa Pedro III
Alejandro, mucho de lo planteado en tu comentario ya había sido respondido previamente, pero estamos dispuestos a reincidir.
Eliminar«El Espíritu Santo sopla donde quiere», es verdad, pero también que «los dones proféticos están sujetos a los profetas, y Dios no es un Dios de desorden sino de paz» (cf.1.ª Cor. 14, 34-35).
Si en su momento la Iglesia vio con recelo a los franciscanos (y TAMBIÉN a los dominicos y carmelitas –estos últimos procedentes de Tierra Santa y que para esa época estaban en vías de incorporarse a la Iglesia Latina–), y posteriormente a la reforma teresiana, fue parte de la vigilancia que se requería para evitar que las comunidades religiosas fuesen tapadera de las herejías o de ambición personal, amén de cerciorarse que estas tuviesen un objeto y carisma que durase en el tiempo (a diferencia de muchas comunidades/movimientos que aparecieron del siglo XIX a esta parte, y que actualmente están para morir).
Segundo, si bien San Luis María de Montfort era contrario al intelectualismo jansenista de su tiempo, no descartó del todo el aspecto intelectual de la fe (cuya definición CATÓLICA es el asentimiento de la razón iluminada por la gracia a las verdades reveladas por Dios), y prueba de ello son las citas y referencias de autores que hace en su Tratado de la Verdadera Devoción. De otra arista, conocemos de la Corona de las Santas Llagas revelada a la visitandina Sor María Marta Chambon, que fue la fuente de la “Coronilla de la Divina Misericordia” de Faustina (de la cual se condena no tanto la devoción en sí, sino las “revelaciones” a su alrededor).
Contrario a la leyenda edulcorada y el latiguillo bergogliano del “tradicionalismo” (cuando él mismo era un teadicionalista del Vaticano II), Lutero nunca pretendió «recuperar un pasado idealizado» ni leches. Sus razones fueron más terrenales: la envidia y sentimiento que le causó el ver que él y su orden agustiniana no les fue dado predicar la indulgencia en la archidiócesis de Maguncia sino a Juan Tetzel y los dominicos. Como tampoco la pureza les interesaba a Arrio y Lucifer, sino la ambición de poder (Arrio quería el episcopado, y Lucifer –o más bien Helel, que era su nombre y significaba “Lucero”– el igualarse a Dios elevándose sobre todas las criaturas). De otra arista, a menos que uno se engañe a sí mismo con subterfugios, no se puede hallar otra cosa en el Vaticano II sino ruptura con el Magisterio anterior a él.
Hemos dicho en anterior comentario que los “frutos” sobrenaturales bien pueden ser resultado de otras circunstancias, y que el andar presumiendo de esos “frutos” como algo distintivo de los movimientos y esgrimirlos como defensa a los ataques percibidos puede ser más bien vanagloria, porque como comenta San Buenaventura el mandato de Levítico XIX, 23 (tener como inmundos los frutos de los tres primeros años), los primeros frutos son sin sazón, desabridos a Dios y dañosos a los hombres, porque se chupan la savia del espíritu y no le dejan ahondar las raíces en la humildad.
PD. No hay lugar a equiparar a los sedevacantistas con los protestantes (adjetivo que usan los modernistas como insulto cuando al mismo tiempo llaman “hermanos” a los protestantes), porque los primeros se basan en la teología dogmática y el derecho canónico, mientras que los otros en su capricho no reconocen a ningún Papa más que ellos mismos. Y si algunos sedevacantistas reconocen a Pedro III o cualquier otro pretendiente, dejan de ser sedevacantistas para ser simplemente cismáticos y aumentar la confusión presente.
(1) Respondemos algunos puntos, prescindiendo de aquellos en que hay coincidencia:
EliminarEl problema con la “Coronilla de la Divina Misericordia” de Faustina no es la devoción en sí (que se puede rezar, al imitar –o basarse, siendo indulgentes– en la citada Corona de las Santas Llagas) sino las “revelaciones”, donde hay graves errores doctrinales, una sospechosa es muy semejante a la “Obra de la Gran Misericordia” de Felicia Magdalena Kosłowska (fundadora de la secta mariavita, condenada por San Pío X como quiera que promovia un falso misticismo e injuriar a la autoridad eclesiástica que no aprobó sus “revelaciones”), además de reflejar en el cuadro de Eugenio Kazimirowski primero (para el cual el confesor de ella, Miguel Sopocko, sirvió de modelo) el nacionalismo mesiánico polaco del período de entreguerras (por algo esa devoción tuvo poca acogida y mucha sospecha en las vecinas Alemania y Lituania, que tenían una importante minoría polaca). Y su fiesta, ¿cómo podía concilarse con la Octava de Pascua, que a decir de Dom Próspero Giéranger en El Año Litúrgico, desde antiguo prohíbe cualquier otra fiesta, sea de cualquier grado que sea? Resumido: una aprobación que no se podía dar.
Lutero (y agregamos también Calvino y Enrique VIII) volvía a los Padres solo en lo que le convenía para su causa, y lo que no, lo omitía (y así hacen algunos protestantes, aunque son los menos, dada la crasa y endémica ignorancia de la Patrística o de cualquier rudimento teológico e histórico en esos gremios). De otra parte, aunque se tenga a los Padres como importantes en la doctrina, son solo fuentes auxiliares, y solo se les sigue en lo que esté conforme a las fuentes principales: la Sagrada Escritura, la Tradición Apostólica y el Magisterio (por ejemplo, San Agustín decía que los que morían antes del uso de razón sin ser bautizados padecían las mismas penas que los réprobos en el Infierno, doctrina contraria por el Papa Juan XXII y el Concilio de Florencia; sin mencionar la polémica del milenarismo patrístico). Además, si Lutero rechazaba las novedades medievales, debió tambiém rechazar el nominalismo ockhamista, origen del subjetivismo.
(2) Sobre el Sagrado Corazón de Jesús (que consideramos, después del Crucificado, la imagen verdadera de la Divina Misericordia), si bien tuvo el impulso en su propagación por las apariciones a Santa Margarita María Alacoque, no significa que haya surgido con ella: ya desde San Bernardo se hablaba de él como símbolo de la caridad y vida interior [= espiritualidad] de Jesucristo (y contemporáneo a Santa Margarita María, habían en Francia varios formularios de Misa en su honor, entre ellos uno compuesto por San Juan Eudes). De hecho, no hay documento pontificio aprobatorio que las mencione para nada en relación al Sagrado Corazón.
EliminarY en cuanto a San Roberto Belarmino, en ese mismo tratado De Románo Pontífice habla en su capítulo XXIX que se debe resistir a un Papa si este realiza un acto de agresión o emite una orden injusta o dañosa (v.g., que ordene matar a determinada persona), y en el capítulo siguiente, que si un Papa incurre en herejía, apostasía o cisma (que son delitos contra la Fe), queda por ello depuesto automáticamente de su cargo, sin necesidad de juicio alguno. Esto en base a la ley divina de que quienes se apartan de la fe dejan de ser miembros del Cuerpo místico de Cristo (la Iglesia) y por ende no pueden ser su cabeza, y a la bula “Cum ex Apostolátus offício” de Pablo IV, fuente jurídica del canon 188 § 4 del Código de Derecho Canónico de 1917, y el 194 § 1 del ídem de 1983.
Valga parafrasear a San Elías Profeta cuando se encontró con Acab: «No ha alborotado el sedevacantismo a la Iglesia; sino el Vaticano II, que ha despreciado la doctrina antigua, y seguido a los novadores y mundanos». Todo el caos que se ha armado de estos 66 años y ocho meses que van fue causado por el liberalismo y modernismo entronizados por el Concilio (al cual Suenens llamó «el 1789 de la Iglesia»), y la “línea media”, “leal oposición a Su Majestad” o “Reconocer y resistir” (a todos efectos, es igual, “DISIDENCIA CONTROLADA”) que son los neoconservadores (cuyos exponentes son Schneider, Sarah, Burke y otros, como los tradimodernistas de los ex “Ecclésia Dei” y la FSSPX) no es que ayuden mucho a poner orden, porque se contentan con condenar las consecuencias (las desviaciones doctrinales, los abusos litúrgicos, la disminución de los fieles y clérigos en cantidad como en calidad) teniendo por buena la causa (el Concilio Vaticano II, tanto el “espíritu” como su letra deliberadamente ambigua –cosa que ningún verdadero Concilio Ecuménico puede ser ni dar, al estar dirigido por Papa, asistido del Espíritu Santo para corroborar infaliblemente la Verdad–), cuando Cristo dijo: «¿Acaso se cogen uvas de los espinos, o higos de las zarzas? Así es que todo árbol bueno produce buenos frutos, y todo árbol malo da frutos malos. Un árbol bueno no puede dar frutos malos, ni un árbol malo darlos buenos. Todo árbol que no da buen fruto, será cortado y echado al fuego» (Mt. V, 16b-19).
Finalmente, como mencionas esa frase «En lo esencial, unidad; en lo dudoso, libertad; en todo, caridad», malas noticias: no es de San Agustín, sino del arzobispo apóstata de Espalato/Split (Croacia) Marco Antonio de Dóminis, que la acuñó en medio de sus ataques contra el Papado en el siglo XVII, y fue adoptada por los protestantes para aplicarla en un intento infructuoso de solucionar sus diferencias doctrinales (y para colmo, sin citar su autor, ya que también lo rechazaron). Más, la frase introduce una jerarquización indebida de las doctrinas y disciplina eclesiásticas en “primera categoría” o “segunda categoría”, convirtiéndolas en un buffet o góndola de supermercado.
El que no sabe a dónde va, cualquier bus le sirve, pero probablemente no llegue bien a su destino (si es que llega).
Querido hermano en Cristo:
EliminarHe leído con atención tu detallada respuesta. Reconozco la profundidad de tus argumentos, y, como bien señalas, ambos hemos tendido a enfocarnos en lo que consideramos más relevante. No deseo que esta conversación se convierta en una discusión interminable.
Si bien tus argumentos tienen validez, el punto central que quise señalar reside en la "falta de caridad fraterna" y en la incapacidad de reconocer la obra de Dios fuera de los moldes que consideramos "puros" o "correctos".
Cuando la crítica se convierte en la descalificación global de comunidades enteras, y cuando los "frutos visibles de conversión"" y vida sacramental (amor a Dios, Rosario, Confesión, Eucaristía) son desestimados, ¿no caemos en la actitud del fariseo que desprecia al publicano (Lc 18:9-14)? ¿No estamos ciegos a la gracia que Dios concede donde Él quiere (Jn 3:8)? Jesús fue claro: «Por sus frutos los conoceréis» (Mt 7:16).
Si una comunidad lleva almas a la oración y a los sacramentos, ¿quiénes somos nosotros para decir que esa gracia no es auténtica? La fe nos pide confiar en que Dios sigue obrando milagros. El deseo de preservar la "Tradición" es santo, pero la verdadera Tradición es un río vivo. Romper la comunión con el Sucesor de Pedro (sedevacantismo), basándose en juicios privados, es un **cisma** que contradice la unidad querida por Cristo.
La Iglesia es de Cristo, y Él prometió estar con ella. En estos tiempos difíciles, seamos humildes y caritativos.
Quiero confesarte que mi motivación inicial para intervenir fue verte tratar a un misionero de LAM que, quizás por su formación, no podía responder con la suficiente propiedad. Ahora, este debate se ha centrado en detalles técnicos y cánones. Al llegar a este punto, me pregunto si no corremos el riesgo de dejar de lado lo esencial: la "fe viva y el amor a Dios sobre todas las cosas".
Mi deseo es que reflexiones si tus críticas no pierden sentido al centrarte tanto en cánones que, a veces, parecen olvidar el primer mandamiento. A pesar de mi formación, mi experiencia con Dios en LAM me ha hecho amarlo más, y por eso amo esta comunidad. Leyéndote, he entendido los riesgos que mencionas y los tendré en cuenta, aunque, en mi experiencia, no suelen ser un problema.
Ha sido un gusto conocerte en este intercambio. Te recordaré en mis oraciones y te pido que hagas lo mismo por mí. Como misionero, estoy atento a responder cualquier duda sincera que puedas tener.
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Nota final: En este día del Sagrado Corazón de Jesús, he querido responder recordando su infinita misericordia. Él es un mismo Señor y un mismo Dios; no hay por qué despreciar a uno u otro como si fueran diferentes.
Alejandro
Pecador, misionero, y confiado en que «donde abundó el pecado, sobreabundó la gracia» (Rom 5:20)
Sabemos, estimado, que nuestro estilo de escribir es vehemente y en ocasiones, duro, producto de muchas batallas que hemos librado (y para ello debe prepararse todo quien está en un apostolado militante). Pero aun así, el fondo de nuestra respuesta es que lo que es de Dios debe proceder y tratarse como de Dios, esto es, con rectitud y orden.
EliminarDe otra parte, hoy octava del Sagrado Corazón de Jesús (si no has oído de ella antes, esta fiesta tiene octava –y con más razón en Colombia, que se ha consagrado a Él–), tomamos tu proposición de concluir este intercambio antes que acabe en una guerra de desgaste. Y como es mandato, la caridad guardar y nuestra reciprocidad de oración.
PD. «De hecho, a veces se dice que el arroyo es más claro cerca del manantial. Cualquiera que sea el uso justo que se haga de esta imagen, no se aplica a la historia de una filosofía o creencia, que por el contrario es más uniforme, más pura y más fuerte cuando su lecho se ha vuelto profundo, más ancho y lleno» (JOHN HENRY NEWMAN, Ensayo sobre el desarrollo de la doctrina cristiana, 6.ª.edición, 1878, pág. 40).
Impresionante como esta persona puede dedicar un blog entero para acusar a un movimiento que ha generado tantas conversiones y ha vuelto la mirada hacia Dios en muchas personas. Por lo que leí veo que lo escribe una persona que ni si quiera es católica (pues ataca al Novus Ordo como si fuera algo externo, ya que declara ser una liturgia falsa y contraria a la Doctrina Católica).
ResponderEliminar"Y seréis odiados de todos por causa de mi nombre, pero el que persevere hasta el fin, ése será salvo." Mt 10,22
A ver Daniela, nosotros SOMOS CATÓLICOS, y decimos estas cosas CON FUNDAMENTO Y PRUEBAS.
EliminarPara muestra, ya que mencionas el Novus Ordo, la evidencia y los testimonios de que el servicio Novus Ordo fue creado por protestantes y que para su elaboración se suprimió cuanto es y pudiese ser católico están a la vista del que quiera verlos (y lo hemos documentado aquí):
https://wwwmileschristi.blogspot.com/2021/09/evidencia-de-la-presencia-de.html
https://wwwmileschristi.blogspot.com/2020/03/algunas-curiosidades-sobre-el-novus-ordo.html
https://wwwmileschristi.blogspot.com/2023/05/la-extincion-de-la-misa-lo-que.html
En cambio tú, ¿qué tienes para defender el Novus Ordo (y por extensión, el Vaticano II), que no sea recurrir al argumento de autoridad o la aceptación universal (que no son sino falacias), o a una deletérea “hermenéutica de la continuidad” que cae con solo ver cualquier noticia o el servicio parroquial dominical?
Repetimos: SOMOS CATÓLICOS. Nos odian por serlo, por lo que decimos y porque lo decimos, y hasta hay quienes nos han deseado la muerte y el Infierno por ello, mostrando a las claras que no soportan la verdad (cf. Jn. VIII, 37). No nos extraña, pues estamos en el tiempo en que «los hombres no podrán sufrir la sana doctrina, sino que, teniendo una comezón extremada de oír doctrinas que lisonjeen sus pasiones, recurrirán a un montón de doctores propios para satisfacer sus desordenados deseos, y cerrarán sus oídos a la verdad, y los aplicarán a las fábulas» (2.ª Tim. IV, 3-4).
P. D. Alegar frutos (que encima se basan en sentimentalismo y no en solidez doctrinal) es respuesta típica del manual de las sectas.