Traducción del Comentario de los Padres de TRADITIO.
Se ha ganado la ira de los obispones locales mientras continúa nombrando a pedófilos como obispones argentinos.
Tres obispones han abdicado y Bergoglio se ha convertido en un escándalo nacional.
La reputación de Bergoglio en Argentina está arruinada: él es una Persóna Non Grata allí por el resto de su pseudopapado.
Parece que Francisco Bergoglio ha hecho tal lío en la Iglesia Conciliar de su Argentina natal que cancelará sus planes de viajar de regreso este año por primera vez. Su nombramiento de obispones diocesanos allí ha sido tan abominable que desde 2018 no ha puesto un pie en Sudamérica. Ese año visitó Chile, cuyos obispones estallaron en ira contra él porque había nombrado a dos obispones pedófilos. Fue una gran vergüenza para Bergoglio y la Iglesia Conciliar.
El último escándalo bergogliano involucra al arzobispón Gabriel Antonio Mestre Gasparoli, quien renunció a La Plata, después de haber sido nombrado por Bergoglio apenas nueve meses antes. Su sustituto en su ex Diócesis de Mar del Plata, José María Baliña Cullen, abdicó apenas tres semanas después de que Bergoglio lo nombrara. El siguiente sustituto, Gustavo Manuel Larrazábal CFM, abdicó cuatro semanas después de que Bergoglio lo nombrara porque fue acusado de delitos sexuales. Desde hace casi cinco meses el Obispado permanece con sede vacante. El 27 de Mayo de 2024, Bergoglio despidió a Mestre de La Plata por “cargos graves” no especificados [réctius, desafiar la autoridad de Bergoglio al pretender designar él mismo su sucesor en Mar del Plata] después de apenas un año.
En 2013, Bergoglio había nombrado a su íntimo, Gustavo Óscar Zanchetta, como obispón de San Ramón de la Nueva Orán (Argentina). Después de ser acusado en 2017 de delitos sexuales y malversación de fondos, fue relevado de su cargo y trasladado al seno de Bergoglio, quien le creó un nuevo puesto en el Vaticano, en el que Zanchetta, que no podía dirigir ni siquiera una pequeña diócesis, administraría todos los bienes de la Sede Profana, y vivió en la Casa Santa Marta al lado de la de Bergoglio [Parte de la información para este Comentario proviene de “National Catholic Register”].
Católicos tradicionales, los obispones argentinos todavía están furiosos contra Bergoglio por nombrar, en contra de su consejo, al conocido encubridor pedófilo como obispón de Orán. Eso, más el caso Grassi, y ahora el caso Mestre, han dañado tanto la credibilidad de Francisco Bergoglio en Argentina que es poco probable que vuelva a ver a Argentina. Se ha convertido en un escándalo nacional. Ahora la reputación de Bergoglio en Argentina está arruinada. Él es persona non grata allí por el resto de su pseudopapado.
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