Casi un mes después de atentar “matrimonio civil” con Jennifer Barrie, una mujer varias décadas menor que él, el obispón retirado Howard James Hubbard, ordinario que fue de la diócesis de Albany (Nueva York), murió la tarde de ayer sábado 19 de Agosto de 2023 después de haber sido hospitalizado en el Centro Médico de Albany por un derrame cerebral dos días antes.
Howard James Hubbard nació en Troy (estado de Nueva York) el 31 de Octubre de 1938, hijo de Howard James Hubbard Sr. y Elizabeth D. Burke. Tras estudiar en el Seminario San José en Yonkers y en la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma, fue ordenado sacerdote el 18 de Noviembre de 1963 en la iglesia de San Ignacio en Campo Marzio por el arzobispo titular de Laodicea y rector del Pontificio Colegio Norteamericano Martin John O’Connor, y nombrado por Montini el 2 de Febrero, fue “instalado” obispón diocesano de Albany el 27 de Marzo de 1977 por el cardenal Terence Cooke, arzobispo de Nueva York, con solo 37 años de edad. Su gobierno fue de los más anticatólicos que hubo en los Estados Unidos, por su persecución contra la ortodoxia y ortopraxis católica que pudiese quedar en su diócesis, promover el ecumenismo y cerrar 33 parroquias.
Hubbard, quien se definía como “cura de calle” y “radical” [= bergogliano], había sido acusado de tener relaciones sexuales con hombres y mujeres, y de haber abusado de diez menores, cargos que él negó vehementemente, aunque sí admitió haber encubierto varios casos cuando era ordinario de Albany (no solo abuso sexual: también encubrió casos de mala conducta como malos manejos financieros y alcoholismo clerical). Una investigación canónica ordenada por el Vaticano en 2021 bajo el motu próprio “Vos estis lux mundi” y llevada a cabo por el arzobispado de Nueva York fue suspendida poco después de comenzar, pero conllevó a que él solicitase una licencia ministerial en la diócesis de Albany. Por tal razón, Hubbard había pedido en Noviembre de 2022 la laicización, petición que le fue denegada en Marzo de 2023.
A pesar que nunca mostró señal alguna de arrepentimiento, Hubbard recibió en el hospital los “últimos ritos” Novus Ordo, lo cual muestra su invalidez y cuán poco respeto les tienen los mismos conciliares. Él fue sacerdote válido, lo que hace que sus pecados sean más graves y su condenación eterna sea peor.
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