El patriarca caldeo Luis Rafael I Sako inspeccionó el pasado 6 de Febrero en Ur de Caldea (cerca de Nasiriya, Iraq) una iglesia que pretende ser un “centro abierto” para cristianos y musulmanes.
El edificio, llamado “Abrahán el Grande” (en árabe إِبرَاهِيْم الْجَلِيل/Ibrahim el-Jalil) erigido a su costa por el arquitecto Eduardo Fatuji Pedro Katelma (أدورد فتوحي بطرس قطلما) con una forma piramidal reminiscente al cercano Zigurat de Ur como parte de un complejo más grande en un predio de 10.000 m² que incluye además el Centro “Francisco I” para el Diálogo Interreligioso, estaba para ser inaugurado el pasado 6 de Marzo conmemorando el aniversario del viaje de Bergoglio a Iraq, pero se pospuso para después de Pascua «porque se espera que asistan a la ceremonia el primer ministro [Mohammed Shia al-Sudani] y otras personalidades musulmanas, y preferimos postergarla para después del Ramadán, el mes de ayuno y oración islámico», dijo Sako.
Sako fantasea con que esta nueva iglesia sea un importante destino de peregrinación «como la Iglesia del Bautismo en el río Jordán o la Casa de la Familia Abrahámica en los Emiratos Árabes Unidos». En realidad, la Casa de la Familia Abrahámica no despertó ningún interés más allá de algún evento para ciertos sectores (el último, el pasado 18 de Febrero, fue la presentación de un curso sobre el Documento de Abu Dabi para los delegados de las Conferencias Episcopales que trabajan en el ámbito del diálogo ecuménico e interreligioso).
De vivir en nuestros días, el Patriarca San Abrahán no aceptaría el diálogo interreligioso más de lo que aceptó la idolatría que dejó atrás al abandonar su natal Ur siguiendo la revelación de Yahveh.
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