Noticias tomadas de GLORIA NEWS, ampliadas en algunos lugares.
A principios de Julio se produjo un incidente con la policía en una parroquia de Baden-Württemberg (Alemania).
Dos policías aparecieron en medio de una eucaristía en la iglesia de San Ulrico en Bisingen-Thanheim (archidiócesis de Friburgo de Brisgovia) el 7 de Julio y la interrumpieron.
La razón del sacrilegio: según una vecina molesta que necesitaba salir a toda prisa al trabajo, el presbítero indio Cheriyan Menacherry CMI, de 74 años, había estacionado su coche en el lugar equivocado.
Para resolver rápidamente el asunto y continuar la celebración de la fiesta patronal, un visitante presente ayudó y condujo rápidamente el coche del presbítero hasta otro aparcamiento. Por su parte, Menacherry (instalado en 1981, y que se encontraba como colaborador en Bisingen) no se quedó con la espinita en los avisos finales:
«Aunque en el contrato de alquiler se estipula que en realidad tiene derecho a una plaza de aparcamiento propia, otros ya hacen tiempo que hacen mal uso de la plaza de aparcamiento del sacerdote»
aludiendo precisamente a la quejica.
Este ataque policial fue incluso demasiado para la anti-católica Diócesis de Rotemburgo-Stuttgart, que lo llamó una violación del Artículo 4 de la Grundgesetz (Ley Fundamental) alemana, que protege la práctica tranquila de la religión.
Representantes de la parroquia, la policía y la diócesis se han reunido para discutir el asunto.
El jefe de la comisaría de Hechingen expresó su pesar. Lutz Jaksche, portavoz de la policía de Reutlingen, dijo que no tenían la intención de interrumpir el servicio.
Sin embargo, la fiscalía de Hechingen, con la que la policía de Reutlingen, negó que el sacrilegio (que en el artículo 176 del código penal alemán es sancionado con tres años de prisión o una multa) fuera ilegal.
El presbítero Herbert Gugler celebró un “servicio de bicicleta” en la iglesia de la Asunción en Aichach (Diócesis de Augsburgo, Alemania), el sábado 13 de Julio. Las fotos fueron compartidas en las redes sociales de la parroquia.
En su homilía, Gugler comparó los aceites litúrgicos con el aceite de la cadena de una bicicleta.
Después de la eucaristía, que tuvo como lema “Va como un reloj” (Es läuft wie geschmiert) y donde un ciclista hizo rodar su vehículo hacia el presbiterio y de regreso, alrededor de 200 bicicletas fueron bendecidas fuera de la iglesia, recibiendo placas de San Cristóbal y una bebida en la plaza Danhauser.
Gugler, de 53 años, es conocido por sus intentos de hacer más atractivo el Novus Ordo, que él encuentra aparentemente vacío y aburrido.
Ya celebró un servicio de bicicleta similar en Junio de 2023; y en 2014, un “servicio de teléfonos móviles”.
El 14 de Julio de 2024, celebró la eucaristía en la carpa de un festival público al que asistieron 1000 personas.
El 29 de Junio, celebró un “servicio de fútbol” en el que los niños del coro patearon una pelota de fútbol en un mini arco durante la eucaristía. El público vino a la iglesia con camisetas de fútbol.
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