Desde FORUM VIDA
El poder político necesita imponer la religión del anticristo.
Habrá distintas reuniones de líderes mundiales de sectores empresariales y políticos, así como del sector religioso, tanto de las cinco religiones mundiales como de varias religiones más pequeñas.
En el centro de toda esta actividad hay un movimiento relativamente nuevo y todavía poco conocido que se llama United Religions Initiative o URI (Iniciativa para las Religiones Unidas). Según el periodista Lee Penn, la URI está activa actualmente en 58 países en todos los continentes y en 33 estados de Estados Unidos. Esta organización fue fundada en 1995 por William E. Swing, obispo de la iglesia episcopal (los anglicanos estadounidenses). Los documentos de la URI la llaman una "comunidad global dedicada a la promoción de una cooperación continua y diaria entre las distintas religiones, para poner fin a la violencia religiosa y para crear culturas de paz, de justicia y de curación de la Tierra y de todos los seres vivientes".
Los líderes de la URI tienen la intención de crear "una asamblea permanente de la estatura y la visibilidad de las Naciones Unidas, donde las religiones del mundo y las comunidades espirituales se reúnan diariamente". El Presidente de la URI, el Reverendo Charles Gibbs describe a esta organización como una entidad "inclusiva y descentralizada, un socio espiritual de las Naciones Unidas".
Las posturas de la URI van más allá de lo religioso y se pronuncian sobre los temas políticos más controversiales de hoy, incluyendo el apoyo al control demográfico y al ambientalismo extremista. La URI también sostiene una postura libertina con respecto a la sexualidad. El presidente y el vice-presidente de la URI han firmado un nuevo documento titulado "Religious Declaration in Sexual Morality, Justice and Healing" ("Declaración Religiosa sobre Moral Sexual, Justicia y Curación"). El documento fue redactado por la organización proaborto llamada Sexual Information and Education Council of the United States o SEICUS (Consejo de Información y Educación Sexual de Estados Unidos). La Declaración se opone al "crecimiento demográfico insostenible", y apoya el "matrimonio" entre homosexuales, la anticoncepción y el aborto.
Lee Penn, que ha reportado sobre el desarrollo de la URI desde sus comienzos, cree que esta organización constituye un esfuerzo en pro de la creación de una nueva religión mundial. Penn informa que en 1995 los líderes de la URI dijeron que el mundo avanzaba hacia la "unidad en términos de una economía global, unos medios de comunicación social globales y un sistema ecológico global", y que lo que faltaba era "un alma global". Lo que más preocupa a los que sostienen una fe ortodoxa es el fuerte énfasis y la representación de la ideología de la "Nueva Era" en la URI. Muchos de los proponentes más fuertes de la URI se conocen por ser escritores e ideólogos de la "Nueva Era", como Robert Muller, funcionario de la ONU, y el escritor popular Neal Donald Walsh.
La URI y los que la apoyan creen que uno de las piedras de tropiezo de sus actividades es la presencia de los "fundamentalistas". Swing condena los conceptos tradicionales de la evangelización cristiana y sugiere que "el proselitismo, la condenación, el asesinato o el dominio no van a ser tolerados en la zona de las Religiones Unidas". Por su parte, Muller dice que la ONU debería dirigir "acciones vigorosas" contra el "fundamentalismo religioso".
El Vaticano promueve el ecumenismo religioso, pero condena (sic) a la URI. "El sincretismo religioso es un error teológico. Es por ello que el Pontificio Consejo para el Diálogo Interreligioso no aprueba la Iniciativa para las Religiones Unidas ni colabora con ella".
También hay activistas provida que están pidiéndoles a todos que visiten el sitio electrónico de la URI www.united-religions.org/newsite/index.htm y averigüen si en su iglesia, sinagoga o grupo religioso hay gente involucrada en la URI y en caso de que así sea, que expresen sus quejas a sus líderes religiosos.
Ver blog "in-exspectatione/diez preguntas al cardenal"
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