Novena compuesta por un sacerdote devoto de San Andrés Avelino, e impresa por don Alejandro Valdéz en la Ciudad de México en 1832. Los Gozos, de origen valenciano, son de autor desconocido, y fueron impresos en 1771.
PRÓLOGO DEL AUTOR ORIGINAL
Bendita sea la Santisíma Trinidad, y
la purísima Virgen María nuestra Señora. Amén.
Uno de los accidentes que rinden y
descomponen a la naturaleza humana
es la apoplejía o el insulto, llámase asi por
la subitánea privación que causa de todas
las funciones animales; pues a su asalto
cae el hombre de repente, perdiendo el
sentido, movimiento y habla; en estos tiempos lo hemos visto repetido, y es misericordia de Dios que no lo lamentemos en
el mundo a cada paso, porque proviniendo de la superfluidad de humores, los vician tanto los hombres y mujeres con el
desenfreno en comer y beber, que no se
oye ni ve otra cosa que banquetes alemanes y convites franceses, donde la abundancia de marjares y multitud de licores
brindan en cada vaso un insulto, y ofrecen en cada plato la muerte. Así es, y ojalá no fuera así: de estos insultos nos podemos librar nosotros, comiendo lo que basta y no bebiendo lo que indispone; mas
de otras apoplejías, que no damos principio, y dejan al sujeto como un tronco, debemos clamar a Dios para que no nos
dén, pues pueden cogernos en pecado mortal, y dar sin remedio con nuestras almas
en los infiernos.
El glorioso padre San Andrés Avelino,
insigne profesor de los clérigos regulares,
especial abogado contra accidentes tan malignos, estando el Santo en el altar, al empezar la misa le acometió un insulto, que
privándolo de la vida temporal, le dio posesión de la eterna. Pues para que todo género de personas se encomienden de veras al santo, y lo deben hacer muy de corazón los señores capellanes de monjas y
abogados de las audiencias, cuyos oficios
ejerció, le ha dispuesto un afecto sacerdote esta novena, que comenzará el día primero de noviembre, para acabarla la víspera de la fiesta del santo, que es a diez
de dicho mes y también pueden hacerse en
cualquier tiempo del año.
El modo de practicarla será el siguiente:
confesarán, y comulgaran el primer y último día de ella, ayunando juntamente; y
los que no pudieren harán alguna otra obra
buena, como una limosna, oír misa, visitar ios altares, rezar la corona o el oficio de Nuestra Señora, según la devoción y posibilidad de cada uno, y dictamen del
confesor; encenderán una vela delante de una imagen del santo, que han de procurar
tener y no pudiendo hacerlo por la pobreza enciendan su corazón con muchos actos
de amor de Dios y de San Andrés Avelino, haciendo diligencia de imitar sus virtudes, que algunas se pondrán en las oraciones que se han de rezar cada día.
El orden que se ha de guardar en rezar
la novena, será hacer primero la señal de
la cruz, después se dirá el acto de contrición o la confesión general, y hecho esto
se rezará la oración que se pone para todos los días, y después se dirán siete Padrenuestros y siete Ave Marías, que sirvan
de estación al Saniisimo Sacramento, los que acabados, se alabará tres veces a la
Santísima Trinidad, en memoria de las tres veces, que San Andrés Avelino repitió las
palabras «Introíbo ad Altáre Dei» antes
que le acometiera el insulto, luego se rezará la oración que corresponde al día de la novena, y se terminará con
el Alabado.
NOVENA EN HONOR A SAN ANDRÉS AVELINO, ESPECIALÍSIMO ABOGADO CONTRA EL MAL DE APOPLEJÍA
Por
la señal ✠ de la santa Cruz; de nuestros ✠ enemigos líbranos, Señor ✠
Dios nuestro. En el nombre del Padre, y del Hijo ✠, y del Espíritu
Santo. Amén.
CONFESIÓN GENERAL
Yo, pecador, me confieso a Dios todopoderoso, a la bienaventurada siempre Virgen María, al bienaventurado San Miguel Arcángel, al bienaventurado San Juan Bautista, a los Santos Apóstoles Pedro y Pablo, y a todos los Santos, que pequé gravemente de pensamiento, palabra y obra; por mi culpa, por mi culpa, por mi gravísima culpa. Por eso, ruego a la bienaventurada siempre Virgen María, al bienaventurado San Miguel Arcángel, al bienaventurado San Juan Bautista, a los Santos Apóstoles Pedro y Pablo, y a todos los Santos, que roguéis por mí a Dios nuestro Señor. Amén.
ORACIÓN PARA TODOS LOS DÍAS
Omnipotente Criador y amabilísimo
Padre, Dios y Señor mío: yo miserable
pecador, postrado y sumido en el abismo
de mi vileza, inclinando las rodillas de mi
corazón con todo el acatamiento y reverencia posible, me presento ante Vos como una de las más pobres criaturas del
mundo, y te suplico por los méritos de tu
admirable siervo San Andrés Avelino, que
te apiades de esta masa de barro, que con tanta osadía se ha levantado contra Vos:
ya conozco, Señor, mi indignidad, y lo mucho que os he ofendido, derrama en mí las
corrientes de tu misericordia perdonando
mis culpas, comunícame las influencias
de tu gracia para que jamás te ofenda,
alienta mi corazón en tu servicio, ilustra mi entendimiento con tu sabiduría,
enciende mi voluntad con tu amor, fortalece mi memoria con tu presencia, llena mi alma de tus dones, y libra mi cuerpo de la enfermedad de apoplejía, para
que teniendo siempre expeditos los movimientos, y libre el uso de los sentidos,
llore mis excesos, y te busque hasta expirar en tu gloria. Amén.
Después de rezar siete Padrenuestros y Ave Marías, se alabará a la
Santísima Trinidad en esta forma: Bendita, alabada y glorificada sea la
Santísima Trinidad, Dios Padre, Hijo, y Espíritu Santo. Amén.
DÍA PRIMERO - 1 DE NOVIEMBRE
TEMOR DE DIOS QUE TUVO SAN ANDRÉS AVELINO
ORACIÓN PARA ESTE DÍA
¡Oh Majestuoso Señor Dios y Padre mío, ante cuya Soberanía todas las criaturas son como si no fueran, y de cuya
majestad tiemblan las potestades
angélicas!, humildemente te ruego por aquel grande temor vuestro con que San Andiés Avelino, desde joven gobernó todas sus acciones, que me concedas el que yo jamás me aparte de él; atráigalo, Señor, en mi
alma, y traspasa con él mis carnes para que sirviendo de estímulo a mi corazón, me sea despertador y perpetuo memorial
en no desmandarme en cosa que
ofenda a Vuestra Majestad, que tanto
debe ser temida. Dame Señor,
por intercesión de San Andrés
Avelino, vuestro temor santo
para que a la nave de mi alma
no la trastornen los furiosos vientos del mar de este mundo: él
es peso, y es tesoro, y tesoro
y peso necesita mi alma; peso
para que camine segura, y tesoro para que rica se os presente. Viva en mí sin cesar este vuestro temor: tema porque os ofendí, y tema para no ofenderos; témate yo como a Juez, y
como a Señor, y como a Padre:
como a Juez que castigas, como a Señor que gobiernas, y como a Padre que amas; y de todas
maneras te tema en la tierra,
para que no pierda el alabarte
en la gloria. Amén.
GOZOS EN HONOR A SAN ANDRÉS AVELINO
Pues con propicio destino
Al mundo Dios os ha dado:
En vida y muerte, abogado
Sednos, ¡oh grande Avelino!
En vuestro feliz oriente,
Los presentes admiraron
Que vuestras manos formaron
Que vuestras manos formaron
La Cruz, con que reverente,
Al nacer fuisteis soldado
Del Lábaro peregrino:
Del Lábaro peregrino:
En vida y muerte, abogado
Sednos, ¡oh grande Avelino!
Con tus manos prodigiosas,
Hércules sagrado fuiste
En la cuna, pues venciste
A dos sierpes venenosas;
Ya contra el dragón osado,
Patrón el Cielo os previno:
En vida y muerte, abogado
Sednos, ¡oh grande Avelino!
Tres fieras sierpes humanas
Envenenar con torpeza
Quisieron vuestra pureza,
Con arte y fuerza tiranas,
Mas siempre fue coronado
Vuestro candor puro y fino:
En vida y muerte, abogado
Sednos, ¡oh grande Avelino!
Abogando con ardor,
Una mentira muy leve
Os hizo dejar, en breve,
Leyes del mundo traidor;
A los hombres negado,
Siempre amásteis lo divino:
En vida y muerte, abogado
Sednos, ¡oh grande Avelino!
Porque el casto honor de Esposas
De Cristo, fiel defendisteis,
En el rostro recibisteis
Tres heridas peligrosas;
Así el cruel asesino
Os hizo Mártir sagrado:
En vida y muerte, abogado
Sednos, ¡oh grande Avelino!
Siempre en virtud mejorar,
Y vencer vuestras pasiones,
Son por voto obligaciones
Que os hicieron singular:
Por no pisado camino
A lo sumo habéis llegado:
En vida y muerte, abogado
Sednos, ¡oh grande Avelino!
De Jesús y de María,
Y de Santos visitado
Fuisteis, pero cortejado
Fuisteis, pero cortejado
De Ángeles con alegría:
Del moribundo sois fino
Dulce patrón invocado:
En vida y muerte, abogado
Sednos, ¡oh grande Avelino!
Dando principio a la Misa,
Al eterno Altar llamado
Fuisteis, donde coronado,
Estar el Cielo os avisa;
El Sacerdote divino
Vuestra oblación ha aceptado:
En vida y muerte, abogado
Sednos, ¡oh grande Avelino!
Terrible lucha infernal
Aquel dragón os presenta,
Pero vuestra fe le ahuyenta,
Y gozáis triunfo inmortal;
Este luciente camino
Siga el que se halla tentado:
En vida y muerte, abogado
Sednos, ¡oh grande Avelino!
Prevenís con Sacramentos
Al enfermo que en vos fía,
Y contra la apoplejía
Obráis sin fin los portentos;
Del ocaso repentino
Libráis al atribulado:
En vida y muerte, abogado
Sednos, ¡oh grande Avelino!
Pues por tu amor peregrino
De Jesús sois gran privado:
En vida y muerte, abogado
Sednos, ¡oh grande Avelino!
ALABADO DE SAN ANDRÉS AVELINO
Se dirán tres Padrenuestros y
tres Avemarías con Gloria Patri, finalizando de esta forma:
Cristo ✠ vence, Cristo ✠ reina,
Cristo ✠ impera. Por intercesión de
la bienaventurada Virgen María y de
San Andrés Avelino confesor, Cristo ✠ nos defienda de mala
muerte.
Antífona: Enmendemos en obras buenas todo
lo que ignorantemente pecamos, no sea
que repentinamente nos coja el día de la
muerte, y buscando espacio de penitencia no lo podamos hallar.
℣. Por intercesión de San Andrés Avelino, arrebatado por la enfermedad apopléjica,
℣. Por intercesión de San Andrés Avelino, arrebatado por la enfermedad apopléjica,
℟. De la repentina y no pensada muerte, líbranos Señor.
ORACIÓN
Oh Dios, que por el accidente apoplético recibiste piadosamente al bienaventurado San Andrés Avelino del ministerio
del altar en el santuario de tu gloria sempiterna: concédenos que siendo libres por
sus méritos e intercesión, del peligro de
repentina muerte, y fortalecidos con los
santos Sacramentos, merezcamos ser recibidos en los eternos tabernáculos de tus
santos. Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.
En el nombre del Padre, y del Hijo ✠, y del Espíritu
Santo. Amén.
DÍA SEGUNDO - 2 DE NOVIEMBRE
CASTIDAD DE SAN ANDRÉS AVELINO
Por la señal...
Confesión general y Oración para todos los días.
ORACIÓN PARA ESTE DÍA
Poderosísimo Dios nuestro y
Señor mío Jesucristo, espejo sin
mancha de la suprema Majestad, y purísimo Esposo de las almas, Tú
que adornaste la del bienaventurado San Andrés Avelino con el
precioso don de la castidad, para
que huyendo los engaños lascivos
la conservase limpia hasta la muerte: concédenos por su intercesión
que se apague en nuestros cuerpos el fuego de la lujuria, y
que sepamos resistir las tentaciones de la carne; y puesto
que en el Santísimo Sacramento sois vino que engendra vírgenes, y pan que alegra los escogidos, haced que caiga en nosotros
el rocío de la pureza y la lluvia de
la castidad, para que sofocado el
peligroso ardor, recibamos la Eucaristía con limpieza de ánimo y
puridad de cuerpo, por cuyo refrigerio esperamos queden nuestros corazones más frescos que
las flores cuando madrugan a beber
el rocío de la mañana; pues deseamos conservarnos inmaculados en
esta vida, para tener la dicha
de seguiros con vestiduras blancas en la gloria. Amén.
Los Gozos y el Alabado se rezarán todos los días.
DÍA TERCERO - 3 DE NOVIEMBRE
CONTRICIÓN DE SAN ANDRÉS AVELINO
Por la señal...
Confesión general y Oración para todos los días.
ORACIÓN PARA ESTE DÍA
Oh Benignisimo Dios, cuya
naturaleza es bondad y cuya
voluntad poder, a quien ofende
la culpa y aplaca la penitencia;
con toda confusión me avergüenzo de considerar el grande dolor
que vuestro fiel siervo San Andrés
Avelino tuvo de haberse deslizado
en una mentira leve, y del ninguno que yo he tenido en haber
cometido tantas culpas graves: ya
llegó el tiempo de que yo llegue
a Vos como oveja descarriada y
perdida; concédeme por intercesión de tan singular Santo, que
continuamente llore mis pecados,
y me enmiende de todo delito.
Conozco que sois Padre de
misericordias, y que aunque yo
he dejado de ser vuestro hijo,
Vos no habéis dejado de ser mi Padre: bien sé que yo he hecho
por donde me podías condenar,
mas Vos no habéis perdido por
donde me podáis salvar; ¿pues qué otra cosa puedo hacer sino echarme a vuestros pies y pediros misericordia? Vos sois mi Dios, mi Creador y mi Redentor, ¿quién me amparará si Vos me desamparáis? Alumbra, Señor, a este ciego, cura a este llagado, resucita a este
muerto. Rocíame con el hisopo
de tu gracia, y quedaré limpio,
lávame y seré más blanco que
la nieve: mayor es vuestra misericordia que mis culpas, y más
podéis Vos perdonar que yo pecar, pues a Vos acudo, a Vos clamo, y de Vos espero que ms habéis de recibir en los brazos de
vuestra amistad concediéndome
el perdón y la enmienda, para
que de aquí adelante de tal manera os agrade y sirva, que nunca
jamás me aparte de Vos. Amén.
Los Gozos y el Alabado se rezarán todos los días.
DÍA CUARTO - 4 DE NOVIEMBRE
PACIENCIA DE SAN ANDRÉS AVELINO EN LOS TRABAJOS
Por la señal...
Confesión general y Oración para todos los días.
ORACIÓN PARA ESTE DÍA
Señor mío Jesucristo, dechado
de paciencia y corona de trabajos, que fortaleciste el nobilísimo
corazón del ilustre padre San Andrés Avelino con una maravillosa
tolerancia para que a imitación tuya, no temiese los combates del
odio con que los hombres le perseguían, y sufriste con ánimo invencible aquellas tres heridas que
recibió en su rostro de mano de un
malhechor traicionero: yo te ruego, mediante su patrocinio, me
concedas el que siguiendo tus
pasos, y aprovechándome del
ejemplo del Santo, tolere las adversidades, sufra las contradicciones y, sin desplegar los labios a
la queja, lleve con buena voluntad cuantas injurias y baldones
me ocasionare el mundo. Dame
unas entrañas piadosas, una paz
santa, un ánimo sereno y un corazón manso, para que moderando
la cruelísima pasión de la ira,
retorne bienes por males y logre
el fruto de la paciencia, que teniendo operación perfecta pone
el alma en posesión de vuestra
gracia. Amén.
Los Gozos y el Alabado se rezarán todos los días.
DÍA QUINTO - 5 DE NOVIEMBRE
DESPRECIO DEL MUNDO DE SAN ANDRÉS AVELINO
Por la señal...
Confesión general y Oración para todos los días.
ORACIÓN PARA ESTE DÍA
Oh buen Dios mío, Santo de
los Santos, Rey de Reyes y
Señor de los Señores, de cuya
vida dimana la de todos los vivientes, y cuya suprema mano mantiene la máquina del mundo:
rendidamente te ruego que, pues
le concediste a San Andrés Avelino
que abandonando sus pompas y
huyendo sus peligros os sacrificase la libertad en la sacratísima religión de los clérigos regulares; también a mi, por sus méritos me concedas que levantando
los ojos de la consideración, no
me deslumbre el resplandor de la tierra con sus relámpagos; aparta
de mi sus hermosuras, quita el
gusto de sus ofertas, desprénde
me de sus lazos, para que menospreciando los colores postizos de sus sombras y el dorado
cieno de su soberbia Babilonia, solo a Vos os siga, a Vos ame, con Vos respire, en Vos descance y
por Vos me sacrifique, pues sólo Vos sois la bondad sin pero, la
luz sin engaño y la belleza sin
mancha que erernamente dura, y de cuya apetecida gloria confío que me has de hacer particionero por los siglos de los siglos.
Amén.
Los Gozos y el Alabado se rezarán todos los días.
DÍA SEXTO - 6 DE NOVIEMBRE
AMOR A LA CRUZ DE SAN ANDRÉS AVELINO
Por la señal...
Confesión general y Oración para todos los días.
ORACIÓN PARA ESTE DÍA
Eterno bienhechor de las almas, Señor mío Jesucristo, que
para redimirlas de la culpa
bajaste del cielo a la tierra, y
sin perdonar tu inocentísimo cuerpo de la crueldad con que
la castigamos los hombres, quisiste que para alivio nuestro
fuese clavado en el sacro madero de la Cruz, de cuyo
amor adolecía tanto San Andrés, solo porque había sido
singular venerador de la Santa
Cruz; con el mayor esfuerzo de
mi corazón te suplico que mediante el patrocinio de Santo
tan farvoroso, abras los ojos de
mi alma para que sepa yo mirar
en la Santa Cruz. Séame ese sagrado árbol, Señor, piedra imán
que me atraiga, cadena que me
prenda y lecho que me reciba;
concédeme que puesto con la
reverencia debida al pie de ese
fructuoso leño, no solo contemple los crueles dolores que en
él por mí padeciste; sino que
imite las maravillosas virtudes
que en él ejercitaste. Tu Cruz
amo, tu Cruz quiero, tu Cruz
siga, por tu Cruz ande, con tu Cruz viva y en tu Cruz muera,
porque tu Cruz es el estandarte de mi remedio y la esperanza de mi victoria. Amén.
Los Gozos y el Alabado se rezarán todos los días.
DÍA SÉPTIMO - 7 DE NOVIEMBRE
CONSIDERACIÓN: AMOR AL PRÓJIMO DE SAN ANDRÉS AVELINO
Por la señal...
Confesión general y Oración para todos los días.
ORACIÓN PARA ESTE DÍA
Oh Supremo hacedor de todas las cosas, Dios y Señor
mío, que esencialmente eres todo amor, amor infinito, increado y sin medida; de quien proceden los amores de los serafines todos, y de todas las criaturas, con
las veras de mi corazón te suplico por aquel grande amor
con que San Andrés Avelino, sín
reparar en peligros propios solicitaba el bien de las almas, que
me adornes del precioso traje
de la perfecta caridad, para que
sin temor a los riesgos, mire a
mis prójimos en Ti solo, y solo
por Ti; dame compasión de sus males, alegría de sus bienes, resignación en sus molestias, afabilidad en su trato, reverencia a sus personas, concordia con cualquiera, y preparación a padecer por todos. Cumpla yo, Señor, vuestro santo mandamiento,
y ame sin intereses de carne y
sangre, como nos amó Jesucristo,
vuestro Hijo soberano y Redentor nuestro. Amén.
Los Gozos y el Alabado se rezarán todos los días.
DÍA OCTAVO - 8 DE NOVIEMBRE
HUMILDAD Y ODIO DE SÍ MISMO DE SAN ANDRÉS AVELINO
Por la señal...
Confesión general y Oración para todos los días.
ORACIÓN PARA ESTE DÍA
Dulcisimo reparador del género humano, Señor mío Jesucristo, que siendo una misma
cosa con el Eterno Padre descendiste de su divino seno a
vestirte de la carne de nuestro cieno, y para darnos ejemplo de humildad naciste con
tal desamparo en el mundo, que
la bajeza de un pesebre sirvió
de cuna a tu soberania: suplícote con todo rendimiento, Rey
de gloria, que asi como le concediste a vuestro seguidor San
Andrés Avelino, el que teniéndose por una de las más viles
criaturas se aborreciese tanto,
que se llegó a extenuar con asperezas y ayunos, así también
me concedas el que conociendo que soy un vaso de corrupción, me recline en el establo del
abatimiento de mí mismo, y considerando que soy el más escandaloso pecador de los vivientes,
mortifique la rebelde pasión de
mi soberbia, y con un odio santo
castigue continuamente mi carne y dome sin cesar mi cuerpo, para
que sujeto al espíritu, no se desmande en cosa que desagrade a
vuestra divina Majestad. Amén.
Los Gozos y el Alabado se rezarán todos los días.
DÍA NOVENO - 9 DE NOVIEMBRE
VOTOS FERVOROSOS DE SAN ANDRÉS AVELINO
Por la señal...
Confesión general y Oración para todos los días.
ORACIÓN PARA ESTE DÍA
Clementísimo y soberano Criador del cielo y de la tierra, Padre de misericordias, Dios
de todo consuelo y fortaleza de los flacos, que confirmaste con espíritu generoso el corazón del valeroso padre San
Andrés Avelino, para que anhelando vuestro amor se obligase con voto a resistir a su propia
voluntad, y adelantarse cada día
en el camino de la cristiana
perfección, cuya observancia cumplió exactísimamente, y en el
ejercicio de empresa tan ardua
dispusiste que le hallase el accidente de apoplejía que le quitó la vida del cuerpo, para
que por los grados de sus heroicas virtudes subiese su
alma a Vos, para gozar la eterna en
el altar de la gloria: pídote,
posirado ante tu paternal clemencia, por su intercesión que enfervorices mi mente, para que
haciendo guerra a los apetitos
de mi propia voluntad, solo tu
amor busque, tu amor quiera,
con tu amor me rija, y en tu
amor me abrase. Dame, Señor,
que camine a Vos y a Vos aspire, para esto os suplico que
creéis en mí un corazón nuevo,
que ninguna hora tenga por suya que no la emplee en vuestro Amor: ponle freno a mi lengua,
guarda a mis ojos, mortificación a mi carne y pureza en mi pecho. Sean las virtudes todas el
escudo de mi defensa; ármame
con un amor sumo, con una
reverencia grande, con una prontitud de obediencia y con un
celo constantísimo; crezca en mí
siempre el hacimiento de gracias a tus beneficios, la voz
de alabanza a tu grandeza y
el gusto de tu divina suavidad,
para que así dispuesto, y con un eficacísimo dolor de mis culpas
me halle prevenido la muerte,
que no será repentina, aunque
lo ocasione la apoplejía violenta, si por los ruegos de San
Andres Avelino me concedes el que expire en tu gracia.
Encomiéndoos, Padre piadoso y misericordiosísimo, a mis
padres, hermanos, parientes, bienhechores, amigos, familiares, y a todos aquellos por quienes
debo rogarte: haz que todos
los fieles te conozcan, amen
y bendigan; vuelve a los errados a tu verderero camino, apaga las herejías, convierte a la
fe a los que aún no tienen conocimiento de tu santo Nombre,
consuela a los que viven en tristezas, tentaciones y angustias:
redime a los cautivos, sana a los
enfermos, da puerto a los navegantes, desata las prisiones a los
reos, y abre las cárceles a los pobres; debajo de tu fiel amparo
encomiéndoos, por último, todas las criaturas, suplicándote que a los vivos dés tu gracia, y eterno
descanso a los muertos. Yo te
ofrezco los ejercicios diarios de
toda esta novena, unidos con
la preciosísima Pasión y Sangre
de nuestro Señor Jesucristo, con
los méritos de su purísima Madre María Santísima, Señora nuestra, de San Andrés Avelino en
honra de quien la he hecho,
y de todos los santos y santas, para que por estos merecimientos perdones mis pecados,
purifiques mi alma, y me asistas ahora y en el ultimo instante de mi vida, para que te vaya a gozar en compañía de todos tus escogidos. Amén.
Los Gozos y el Alabado se rezarán todos los días.
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