DESESTIMAN MOCIÓN DE LOS OBISPONES CONTRA DEMANDA POR EL FRAUDE DEL “ÓBOLO DE SAN PEDRO”

Traducción del Comentario de los Padres de TRADITIO.

  

El Tribunal de Apelaciones de los Estados Unidos para el Circuito del Distrito de Columbia ordena que continúe la demanda colectiva de “millones” de feligreses neoiglesianos contra los obispones neoiglesianos por fraude y malversación.

Un feligrés ha presentado una demanda colectiva contra los obispones neoiglesianos por mentir sobre el destino del dinero recaudado en la colecta del Óbolo de San Pedro: no se destinaba a los pobres y necesitados, como afirmaban, sino a las arcas de los corruptos pseudopapas para apuntalar su organización vaticana en bancarrota.

  

Los obispones neoiglesianos de Estados Unidos sufrieron una importante derrota. David O’Connell, feligrés de la parroquia del Sagrado Corazón en East Providence (Rhode Island), demandó a la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos por “fraude, enriquecimiento injusto e incumplimiento del deber fiduciario”. O’Connell acusó a los obispones, en su conjunto, de haber mentido a sus congregaciones al solicitar donaciones para la colecta del “Óbolo de San Pedro”, supuestamente destinadas a los pobres y necesitados. El dinero fue desviado de las parroquias locales al Vaticano, donde en realidad se utilizó no para los pobres y necesitados, sino para apuntalar la corrupta administración neoiglesiana, que se encontraba al borde de la bancarrota. La demanda se presentó en nombre de todos los feligreses neoiglesianos, millones de ellos, que donaron dinero a la colecta del Óbolo de San Pedro.

La Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos (USCCB) apeló ante un panel de tres jueces del Tribunal de Apelaciones de los Estados Unidos para el Circuito del Distrito de Columbia para que desestimara la demanda, alegando que el tribunal carecía de jurisdicción. El tribunal no estuvo de acuerdo, y ordenó que el caso O’Connell vs. Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos prosiguiera sin obstáculos. La petición de la USCCB para que el tribunal en pleno viera el caso fue denegada. El caso contra la USCCB continuará [Parte de la información para este Comentario proviene de National Review].

Católicos tradicionales, la Pseudoiglesia ha sido sorprendida frecuentemente malversando donaciones, mintiendo sobre el propósito de los fondos y desviándolos para hundir a la corrupta administración neoiglesiana, cuya sede se encuentra en el Vaticano, con los pseudopapas apóstatas. Gracias a Dios por la valentía del Sr. O’Connell, quien no se limitó a quejarse, sino que inició una demanda colectiva contra los obispones conciliares por su complicidad en la malversación de fondos de sus propios feligreses. ¿Qué pasaría si el señor O’Connell gana, y la Iglesia Sinodal y sus pseudopapas son obligados a devolver cientos de millones de dólares mal habidos? Podría ser, de una vez por todas, el fin de la apóstata Iglesia sinodal de la Nueva Era. Los verdaderos católicos solo pueden tener esperanza.