El pasado Domingo de Pascua, en el convento Nuestra Señora de los Ángeles, perteneciente a las Clarisas de Adoración Perpetua en Hanceville, Alabama (Estados Unidos), luego de haber padecido durante 15 años las secuelas de un accidente cerebro vascular, la Madre Angélica de la Anunciación (en el siglo Rita Antoinette Rizzo Gianfrancesco), fundadora de la cadena EWTN, afrontó el destino común de los hijos de Adán y Eva: la muerte, compareciendo al tribunal de Dios para su Juicio particular.
Traducción del Comentario de los Padres de TRADITIO, con notas propias.
LA MADRE ANGÉLICA, EL BRAZO DE LA TELEVISIÓN POR CABLE DE LA NUEVA IGLESIA, ESTÁ MUERTA. SU OPERACIÓN EWTN, NUNCA TRADICIONAL, HA ESTADO EN MANOS DE NOTORIOS HEREJES.
EWTN: A Network Gone Wrong (EWTN, Una red que salió mal): El libro de 2006 que expuso la farsa anticatólica en que la cadena de cable EWTN se ha convertido, al estar marchando bajo la autoridad de los obispos modernistas de los Estados Unidos desde 2001, cuando la Madre Angélica fue apartada por un ACV.
Los oficiales laicos heréticos -Ministros protestantes y presbíteros pedófilos- que ella nombró para que dirigieran EWTN no mantuvieron más la fachada conservadora, sino que operan una EWTN del Novus Ordo y abiertamente anticatólica.
Los oficiales laicos heréticos -Ministros protestantes y presbíteros pedófilos- que ella nombró para que dirigieran EWTN no mantuvieron más la fachada conservadora, sino que operan una EWTN del Novus Ordo y abiertamente anticatólica.
El pasado 27 de Marzo de 2016, Domingo de Pascua, la Madre Angélica de la Anunciación OCPA (nacida Rita Antoinette Rizzo Gianfrancesco) murió de causa natural a la edad de 92 años, esencialmente por complicaciones del accidente cerebrovascular que sufriera en 2001. En ese año ella terminó su control activo de la cadena de cable EWTN (Eternal World Television Network -Red de Televisión de la Palabra Eterna), que a partir del 1 de Diciembre de 2015, es operada como un brazo armado de la modernista Conferencia de Obispos Católicos [sic] de Estados Unidos (USCCB) desde 1981 [y en su versión hispano-americana, de ACI Prensa y la iglesia conciliar peruana. N. del T].
Aunque ella pudiera ser descrita como una neoconservadora, la Madre Angélica nunca fue una Católica Tradicional cuando ella dirigió la cadena EWTN, fundada en 1981. En lugar de ello, fungió como un brazo de la furiosamente modernista USCCB y de la anticatólica Iglesia del Novus Ordo. Cuando ella sufrió el ACV en 2001 y fue puesta a un lado, los oficiales laicos heréticos que ella nombró para dirigir EWTN no mantuvieron más la fachada conservadora, sino que devinieron más y más anticatólicos, empleando ministros protestantes como el presbiteriano Scott Hahn, y presbíteros deuterovaticanos pedófilos como John Corapi y Benedict Groeschel, de los cuales se ha expuesto que están asociados con las drogas, la prostitución y la pedofilia. [Eso en EE. UU. En Latinoamérica, está el periodista peruano Alejandro Bermúdez Rosell, perteneciente al polémico Sodalicio de Vida Cristiana, y el presbítero chileno Raúl Hasbún, vinculado a un caso de homicidio, pedofilia y a la cantante italiana Raffaella Carrà. N. del T.]
Finalmente, el ventilador que destapó la farsa anticatólica en que EWTN claramente se ha convertido es el libro de 2006 titulado EWTN: A Network Gone Wrong: How the Eternal Word Television Network Is Contributed to the Spread of the “Silent Apostasy” in the Roman Catholic [sic] Church (EWTN, Una red que salió mal: Cómo la Red de Televisión de la Palabra Eterna contribuyó a difundir la “Apostasía Silenciosa” en la Iglesia Católica Romana [sic]).
Verdaderos Católicos, los operadores post-Angélica son muy engañosos, arrojando sólo los latinismos suficientes en sus servicios televisados para embaucar a los conciliares perplejos para hacerles creer que ETWN es “tradicional”. ¡Nada más lejos de la verdad! Solo escuchad a los presbíteros y seminaristas montinianos cantando y leyendo pasajes de la Escritura en lenguas vernáculas como los protestantes. Ellos suenan como si nunca hubieran oído de la Biblia o cualquiera de los pasajes que leen –y ciertamente no entienden el Catolicismo–.
«No todo aquel que me dice: “¡Oh Señor, Señor!”, entrará por eso en el reino de los cielos; sino el que hace la voluntad de mi Padre celestial, ese es el que entrará en el reino de los cielos. Muchos me dirán en aquel día del juicio: “¡Señor, Señor!, ¿pues no hemos nosotros profetizado en tu nombre, y lanzado en tu nombre los demonios, y hecho milagros en tu nombre?”. Mas entonces Yo les protestaré: “Jamás os he conocido por míos: apartaos de mí, operarios de la maldad”». (San Mateo VII, 21-23, Versión de Torres Amat).
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