martes, 3 de septiembre de 2019

TRADUCCIONES BÍBLICAS ESPAÑOLAS RECOMENDADAS

  • Petisco - Torres Amat (José Miguel Petisco S.J. y el Obispo Félix Torres Amat), Se reconoce a José Petisco S.J. (Helenista español) como la fuente primaria de la traducción y las nuevas ediciones han colocado su nombre en la portada. Es una Biblia católica, hecha por Félix Torres Amat, directamente de la Vulgata, revisada con sus respectivas ediciones en griego y hebreo. Fue la primera Biblia Católica traducida al español en tener una gran difusión.
  • Bover - Cantera (José María Bover, S.J. y Francisco Cantera Burgos, destacado humanista, hebraísta e historiador. Fue revisada por el P. Félix Puzo S.J., eminente bíblista y colaborador del P. Bóver). Se considera la primera edición crítica católica en castellano de las Sagradas Escrituras en base a los textos hebreo, griego y Latín y aún sigue siendo apreciada por muchos debido a su excelente calidad de traducción.
  • Scío de San Miguel (Felipe Scío de San Miguel, Sch. P. - La Orden de los Clérigos Regulares pobres de la Madre de Dios de las Escuelas Pías, más conocidos como escolapios, llamados también piaristas en países germanoeslavos y anglosajones y calasancios en algunos iberoamericanos). Biblia que era Bilingüe Latín-Español, el Padre Scío poseía conocimientos no sólo del griego y del latín, sino del hebreo y siriaco y dominaba la Patrística, la Hermenéutica y la Filología. Fue el suyo un trabajo ingente que le llevó gran parte de su vida.
  • Nacar - Colunga (Alberto Colunga Cueto O.P. - Orden Predicadores o dominicos), Eloino Fuster (canónigo), traducción crítica, literal y directa del hebreo, arameo y griego al castellano de la Biblia, versión conocida como Nácar-Colunga,que se publicó en 1944).
  • Colunga - Turrado (Alberto Colunga Cueto O.P. y Lorenzo Turrado, Doctor en Filosofía y Teología por la Universidad Gregoriana de Roma y licenciado en Sagradas Escrituras por el Pontificio Instituto Bíblico, nueva edición de la Vulgata Hispánica), Biblia Sacra iuxta Vulgatam Clementinam de 1946 junto a Alberto Colunga, más conocida como la Colunga-Turrado y la Biblia Comentada VI. Hechos de los Apóstoles y Epístolas Paulinas (1965).
  • Y una de las más recomendadas es la del Monseñor Doctor Juan Straubinger Baumann (La Biblia Platense, también conocida como Biblia Comentada, es una traducción católica de la Biblia al español. Es llamada Platense por haberse hecho en la ciudad de La Plata, Argentina. Es una traducción del Antiguo Testamento en el texto hebreo (texto masorético), exceptuando los escritos deuterocanónicos en los que empleó la Vulgata. Además consultó las Biblias de Nácar-Colunga y Bóver - Cantera para la traducción de muchos pasajes, así como otras versiones bíblicas en lenguas modernas.​ En cuanto al Nuevo Testamento, Monseñor Straubinger se apoyó en el texto griego (Textus Receptus) y en la edición crítica de Merk. La versión de Straubinger es considerada la primera Biblia católica completa en español (basada en los textos hebreos y griegos) hecha en Latinoamérica.

Estas son algunas traducciones más conocidas, muy buenas, para leer, estudiar y aprender de la gran información al pie de página, por lo que resulta muy enriquecedor el estudio de la Biblia, a la par de todo lo que nos ofrece la Sagrada Tradición y el Depósito de la Fe del Magisterio Infalible de la Iglesia, infalible porque procede del Verdadero Dios y Verdadero Hombre, Nuestro Señor Jesucristo, Dios y Hombre Verdadero.

Sagrado Corazón de Jesús. En Vos confío. Dulce Corazón de María. Sed nuestra salvación.

4 comentarios:

  1. La Biblia de Straubinger se sigue editando en Argentina, pero en mi Méjico es imposible encontrarla, sólo pude encontrar su traducción del Salterio con comentarios excelentes. No me sorprendería enterarme que hay una conspiración para que la Biblia de Straubinger no se conozca en Méjico.
    La Biblia del Padre Scío si se distribuye en Méjico, pero viene sin comentarios, como si fuera biblia protestante.
    En cuánto a la Nácar-Colunga, la BAC está a nada de sacar una nueva revisión -¿o será desfiguración?- de su biblia emblemática. De esta revisión, que seguramente fué hecha siguiendo los criterios modernistas que puso de moda la Biblia de Jerusalén -de la que nunca tendré un ejemplar- no espero nada bueno.

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  2. El Padre Juan Leal, insigne escriturista, saludaba en 1951 la Biblia de Juan Straubinger como el primer Comentario completo a la Sagrada Escritura en español. Los italianos tenían desde 1911ss. al padre Marco Sales y los franceses al sulpiciano Luis Claudio Fillion desde finales del siglo XIX.
    La Biblia Comentada de Straubinger es insuperable. Una pena que en España no se haya editado (el Comentario ).
    En cuanto a la Biblia Nácar-Colunga las mejores ediciones son la cuarta de 1951 y la quinta, sexta y séptima, ésta de 1957. Téngase en cuenta que en la primera edición de 1944 se deslizaron errores (no sustanciales, es decir que no afectan a su contenido ortodoxo) sino más bien de traducción, que fué hecha con demasiada rápidez. Ello fué subsanado en las ediciones que he citado hasta llegar a ser una Biblia magnífica. A la muerte del Padre Alberto Colunga a principios de los sesenta del siglo pasado ésta Biblia fué ampliamente corregida en el texto y las notas de forma que su valor como Biblia católica ha bajado muchísimo.

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  3. Saludos Javier muy buen comentario por favor de las cuatro ediciones de la Biblia Nacar Colunga que mencionastes ¿cuarta edición 1951, Quinta edición, seXta y septima edición 1957 cual de estas cuatro ¿es la Mejor edición de la Nacar Colunga? y ¡me podrias decir porque son las mejores ediciones de la Nacar Colunga?

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  4. Los mismos autores se encargan de aclararlo en el Prólogo de la edición de 1951. La quinta, sexta y séptima, ésta de 1957, son reimpresiones de la de 1951. Por tanto todas son excelentes. Yo tengo la séptima de 1957. Las posteriores ya varían, pues el Padre Maximiliano García Cordero, conocido progresista, aunque bastante moderado para lo que hoy existe, se encarga de las notas. Las ediciones de 1951 a 1957 son las mejores porque traducen el hebreo y griego de forma más fiel gramaticalmente. No que la edición de 1944 no fuera ortodoxa y buena, sino que tenía muchos defectos de traducción. Un ejemplo al azar. El "valde bona" después que Dios creó al hombre, que se traduce por muy bueno o muy bien y que hace resaltar no sólo la bondad sino la excelencia de la Creación, se reduce a un simple "vió Dios que era bueno. Aún así han quedado inexactidudes. Valga como ejemplo el episodio de los discípulos de Emaús: el "quoniam advesperascit et inclinata est iam dies" se traduce por "pues el día ya declina" quitando fuerza a la redundancia griega "Atardece y el día ya declina". En general se opta por la brevedad en las expresiones. Podría citar más ejemplos, pero bastan éstos. Por ello la versión de Juan Straubinger que tuvo a la vista el texto de Nácar Colunga lo corrige con acierto y es una versión modélica, sin desmerecer la de Eloíno Nácar y Alberto Colunga que sigue siendo excelente. Pero ya digo las mejores versiones, por las razones antedichas son las de 1951 a 1957.

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