domingo, 26 de enero de 2020

EL PRIMER “DOMINGO DE LA PALABRA DE DIOS”

   
Hoy 26 de Enero de 2020, fue el primer “Domingo de la Palabra de Dios”, instituido el 30 de Septiembre de 2019 por Francisco Bergoglio mediante la Carta Apostólica “Apéruit illis”, con el fin de que «la comunidad cristiana se centr[e] en el gran valor que la Palabra de Dios ocupa en su existencia cotidiana». Y el pasado viernes 17 de Enero, en la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Salvatore “Rino” Fisichella, presidente del Consejo Pontificio para la Promoción de la Nueva Evangelización, hizo su presentación.
  
Fisichella en su rueda de prensa, recordó que, al concluir el Jubileo de la Misericordia, en la Carta Apostólica Misericordia et misera, Bergoglio hizo alusión a la fiesta en comento, y que el “Domingo de la Palabra de Dios” era una respuesta para unificar las distintas iniciativas pastorales nacidas en distintos lugares a la luz de la Dei Verbum y la Exhortación Apostólica Post-sinodal Verbum Dómini (2008) con el fin de poner en el centro el conocimiento, la difusión, la reflexión y el estudio de la Sagrada Escritura. Ítem, señaló que «tampoco puede pasar desapercibido el gran valor ecuménico que posee este Domingo», como quiera que este año el III Domingo del Tiempo Ordinario cayó cerca del Día del Diálogo Interreligioso entre judíos y católicos (17 de Enero, donde el presbítero y profesor de la Gregoriana Luca Mazzinghi SX dijo que el antisemitismo [sic] excluye de la fe cristiana porque «si uno es cristiano, entonces se debe sentir cercano al judaísmo porque eso está en nuestras raíces») y de la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos (18 - 25 de Enero).
  
Por su parte, el secretario del consejo de marras, el colombiano José Octavio Ruiz-Arenas Barragán, dijo que su señor Francisco Bergoglio estableció la fiesta ese día en primer lugar, «en la liturgia el III Domingo del Tiempo Ordinario todos los evangelios: Mateo, Lucas y Marcos nos hablan de la predicación del Señor, el comienzo del anuncio mismo por parte de Cristo de lo que era su mensaje» y en segundo, para que los fieles le dén «la centralidad de la Palabra de Dios y se interesen en alimentarse de ella como lo hacen con la Eucaristía» (aunque en el Novus Ordo no existe la Presencia Real porque la Transubstanciación no ocurre allí).
   
El logo para este año (no sabemos si será permanente), el Consejo Pontificio para la Promoción de la Nueva Evangelización fue tomado del camino de los discípulos a la aldea de Emaús (cf. Lc. 24,13-35), cuando en un momento dado del trayecto se acerca Jesús resucitado. El logo diseñado por Giordano Redaelli –y usado en la portada de varias ediciones bíblicas de la Sociedad San Pablo– a partir del icono pintado en 1991 por la monja egipcia sor Marie-Paul –en el siglo Marie-Therésè– Farran OSB (10 Nov. 1930 – 8 May. 2019) a pedido de Thomas Michael Rosica CSB, donde se observa junto al Cristo que tiene en sus manos el “pergamino del Libro”, es decir, la Sagrada Escritura que se cumple en su persona, y los dos discípulos: Cleofas/Alfeo (hermano de San José) y, según algunos exegetas [entre ellos James Montgomery Boice (calvinista presbiteriano, 7 Jul. 1938 – 15 Jun. de 2000), James Antony Mark “Jim” Cole-Rous (pentecostal, 10 Jul. 1936), Wayne A. Grudem (bautista, 11 Feb. 1948), Nicholas Thomas Wright (anglicano, 1 de Dic. 1948) y el mismo Thomas Michael Rosica (modernista, 3 Mar. 1959)], su esposa María, madre de los santos Santiago el Menor, José Barsabás “El Justo”, Simeón Jerosolimitano y Judas Tadeo. Esta identificación modernista riñe con la doctrina y al arte sacro tradicional, que le atribuye la identidad del otro discípulo al mismo San Lucas, porque lo narra con detalles tales que permiten inferir razonablemente que tuvo parte en el acontecimiento narrado.
  
  
El servicio de celebración presidido por Bergoglio a las 10:00h en la Basílica de San Pedro contó además con la presencia de las reliquias de San Timoteo Obispo y Mártir, traídas desde la ciudad de Termoli (hoy es su fiesta para los modernistas, mientras que para los Católicos lo fue el 24 de Enero), y la imagen peregrina de Nuestra Señora de Knock, Patrona mariana de Irlanda (aparición que tuvo lugar la noche del 21 de Agosto de 1879; aprobada en 1880 por Mons. John MacHale, Arzobispo de Tuam). La imagen, esculpida en el estudio de Ferdinand Stuflesser en Ortisei (Italia), traída directamente de su santuario, encabeza una peregrinación hiberna dirigida por el Arzobispo de Tuam, Michael Neary y el Rector del santuario, el Rev. Richard Gibbons. Finalizado el servicio, Bergoglio entregó 40 ejemplares de la Biblia a otras tantas personas en distintas condiciones y estados de vida.
  
  
A efectos de realizar la preparación de la celebración, el CPPNE dispuso un subsidio pastoral en italiano, francés, español, portugués, y polaco y en inglés, con las siguientes particularidades dentro del servicio:
  • Durante la procesión de entrada, el Evangeliario es ostentado a cierta altura por parte del diácono o de un presbítero co-concelebrante (a la larga, laicos, porque no hay sacerdocio en la secta conciliar). Llegado al presbiterio, pondrá el Evangeliario en el centro del altar (el mismo lugar donde ponen el “Santísimo Sacramento”), o en un lugar destacado y preparado previamente, donde puede permanecer durante todo el año.
  • Durante el canto del Aleluya y el verso, el turiferario se dirige a la sede para la infusión del incienso, y acompañado de los ciriales y el diácono o el presidente (según el caso), se dirigirá al ambón para la incensación y proclamación (cabe señalar que aquél deberá cantar el «Dóminus vobíscum», «Léctio sancti Evangélii secúndum N.» y el «Verbum Dómini» (desde luego, todo en el idioma local). Si quien preside es el obispo, el libro debe ser llevado a él para que lo bese).
  • Antes de retornar el Evangeliario al ambón, el libro es expuesto abierto a la veneración de los fieles, bien con un beso, una venia o simplemente poniendo la mano sobre él.
  • Se puede hacer entrega de la Biblia o partes de ella (Nuevo Testamento, o los Evangelios) a los fieles.
  • Se sugiere (al menos por la Conferencia Episcopal de Colombia), el uso del Prefacio Dominical Ordinario I: Misterio Pascual y pueblo de Dios (PRÆFÁTIO I DE DOMÍNICIS “Per Annum”: De mystério pascháli et de pópulo Dei):
    «Vere dignum et justum est, ǽquum et salutáre, nos tibi semper et ubíque grátias ágere: Dómine sancte, Pater omnípotens, ætérne Deus: per Christum, Dóminum nostrum. Cujus hoc miríficum fuit opus per paschále mystérium, ut de peccáto et mortis jugo ad hanc glóriam vocarémur, qua nunc genus eléctum, regále sacerdótium, gens sancta et acquisitiónis pópulus dicerémur, et tuas annuntiarémus ubíque virtútes, qui nos de ténebris ad tuum admirábile lumen vocásti. Et ídeo cum Ángelis et Archángelis, cum Thronis et Dominatiónibus, cumque omni milítia cœléstis exércitus, hymnum glóriæ tuæ cánimus, sine fine dicéntes: Sanctus… [En verdad es justo y necesario, es nuestro deber y salvación darte gracias siempre y en todo lugar, Señor, Padre santo, Dios todopoderoso y eterno, por Cristo, Señor nuestro. Quien, por su Misterio pascual, realizó la obra maravillosa de llamarnos de la esclavitud del pecado y de la muerte, al honor de ser estirpe elegida, sacerdocio real, nación consagrada, pueblo de su propiedad, para que, trasladados de las tinieblas a tu luz admirable, proclamemos ante el mundo tus maravillas. Por eso, con los Ángeles y Arcángeles, Tronos y Dominaciones, y con todos los coros celestiales, cantamos sin cesar el himno de tu gloria: Santo…]».
    Aunque Bergoglio usó en su celebración el Prefacio II: El Misterio de la Salvación (De Mystério Salútis), que dice así:
    «Vere dignum et justum est, ǽquum et salutáre, nos tibi semper et ubíque grátias ágere: Dómine sancte, Pater omnípotens, ætérne Deus: per Christum, Dóminum nostrum. Qui, humánis miserátus erróribus, de Vírgine nasci dignátus est. Qui, crucem passus, a perpétua morte nos liberávit et, a mórtuis resúrgens, vitam nobis donávit ætérnam. Et ídeo cum Ángelis et Archángelis, cum Thronis et Dominatiónibus, cumque omni milítia cœléstis exércitus, hymnum glóriæ tuæ cánimus, sine fine dicéntes: Sanctus… [En verdad es justo y necesario, es nuestro deber y salvación darte gracias siempre y en todo lugar, Señor, Padre santo, Dios todopoderoso y eterno, por Cristo, Señor nuestro. El cual, compadecido del extravío de los hombres, quiso nacer de la Virgen; sufriendo la cruz, nos libró de eterna muerte, y, resucitando de entre los muertos, nos dio vida eterna. Por eso, con los Ángeles y Arcángeles, Tronos y Dominaciones, y con todos los coros celestiales, cantamos sin cesar el himno de tu gloria: Santo…]».
Como es natural entre los novusordianos, se deja en libertad a los presbíteros para organizar la celebración como a bien lo tengan. Eso significa que caben allí elementos de inculturación, marionetas, danzas o LO QUE SEA. Prueba inequívoca de que no hay nada sagrado en ellos.
  
En conclusión, los conciliares siguen su camino a la “idolatría del libro” tan característica de los ambientes judeo-protestante-kikiles, aun cuando Cristo mismo, el Verbo de Dios y Centro de toda Escritura, condena su rechazo de ellos a la Iglesia Una, Santa, Católica y Apostólica que Él fundó.
  
JORGE RONDÓN SANTOS
26 de Enero de 2020 (Año Santo Josefino).
Domínica III después de Epifanía. Fiesta de San Policarpo, Obispo de Esmirna y Mártir; y de Santa Paula Romana, Viuda y copatrona de la Orden de San Jerónimo.

1 comentario:

  1. Curiosamente encuentro una extrana coincidencia entre lo que ocurre en estos momentos con el mentado coronavirus (que según, dizque empezó el brote en China) con el manotazo que dio Bergoglio a la feligresa china.

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