El cardenal curial ghanés Peter Kodwo Appiah Turkson fue el enviado de Francisco Bergoglio para el autodenominado Foro Económico Mundial en Davos (Suiza).
Davos es una ciudad protestante desde 1526, y en el empadronamiento hecho en el 2017, el 36,2% de los 12.721 residentes de Davos pertenece a la Iglesia Reformada Suiza. Turkson presidió el servicio novusordita el 18 de Enero ante las bancas vacías de la iglesia de la Inmaculada Concepción en esa ciudad. Como es el caso en las vecinas Alemania y Austria, la Iglesia en Suiza es mantenida con el soporte vital del impuesto eclesiástico.
La eucaristía Novus Ordo fue transmitida en vivo por el canal K-TV (cuyo cuartel general se encuentra en Alemania), que se autodescribe como un canal que «se caracteriza por la lealtad a la Iglesia Católica Romana y se ve a sí mismo al servicio de la promoción de la fe [sic] y la nueva evangelización».
El cardenal saludó en alemán a la magra congregación con un freudiano lapsus línguæ (ver minuto 45:10: «Die Gnade unseres Herrn Jesus Christus, die Liebe Gottes des Vaters und die Gemeinschaft des Heiligen Vaters sei immer mit euch» [La gracia de nuestro Señor Jesucristo, el amor de Dios Padre, y la comunión del Santo Padre, esté siempre con vosotros].
Después del Evangelio (que fue Marcos III, 7-12, siendo Jueves de la 2.ª semana del “Tiempo Ordinario” –el Novus Ordo no celebra este día la Cátedra de San Pedro–), el presbítero concelebrante Kurt Benedikt Susak, párroco de Davos, leyó el mensaje de Francisco Bergoglio a Klaus Martin Schwab, presidente del FEM. Una aburrida, secularista, incompetente y pacata monserga.
Al finalizar, Susak informó que el cardenal muniqués Reinhard Marx estaba presente en Davos. Reinhard Marx es un importante activista antieclesial en Alemania, y fue uno de los nueve consejeros cardenalicios de Bergoglio.
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