DEL “CASO CASANOVA”

No nos gusta de a mucho entrar a opinar “en caliente” sobre los temas de última novedad (la premura cansa, y se requiere calma y método para analizar los detalles y emitir concepto), pero las circunstancias lo exigen en esta ocasión.

Recientemente ha salido la noticia que Fernando Casanova Ramos, un telepredicador exprentecostal que solía salir en el canal EWTN, había decidido defeccionar de la Iglesia Conciliar, y que él mismo lo anunció en un vídeo de más de 27 minutos.

   

El vídeo lo vimos y honestamente, de tanto enredo y confusión que manejaba él en el vídeo nos dejó con una cefalea (literalmente). Con todo, el punto es que Casanova AL PARECER se decantó por el luteranismo confesional, para más señas el Sínodo de Misuri, la denominación conservadora del luteranismo estadounidense (la otra, la Iglesia Evangélica Luterana de Estados Unidos, es casi tan liberal como su contraparte alemana o su hermano yanqui los episcopalianos). ¿Por qué precisamente esa denominación? Además de los argumentos (o mejor decir, ATAQUES) que usó, por la paráfrasis del discurso del monje maldito Martín Lutero durante la Dieta Imperial de Worms el 18 de Abril de 1521, y con la cual Casanova concluye su vídeo:

«Mi conciencia está cautiva por la palabra de Dios. No puedo ni quiero retractarme puesto que no es prudente ni recto obrar contra la conciencia».

   

Ahora, un resumen biográfico: Fernando Casanova Ramos nació en Caguas (Puerto Rico) el 30 de Mayo de 1964. En la década de 1990, se desempeñó como profesor de teología protestante en el Colegio Bíblico Pentecostal de Puerto Rico (1995-97), y en la Escuela Graduada [= de Posgrado] Nacional de Consejería Pastoral (1997, 1999), fue profesor conferencista del Programa de Extensión del Seminario Teológico de la Iglesia de Dios en 1995 y del Programa Graduado del Colegio Pentecostal Mizpa en 1998, además de profesor invitado para el curso de Ecumenismo en la Facultad de Teología (Centro de Estudios de los Dominicos del Caribe, CEDOC) de la Universidad Central de Bayamón (Puerto Rico) en 2000. Se doctoró en Teología de la Graduate Theological Foundation en Indiana (Estados Unidos) e hizo estudios doctorales en Historia por la Universidad de Sevilla (España) en 1999.

Fue ministro y pastor pentecostal hasta el 25 de Enero de 2002. El 17 de Abril de 2003 ingresó junto con su esposa Lissette Nazario González a la Iglesia Conciliar (la cual NO LO ES la Iglesia Católica sino una impostora) En 2004 fue profesor de la Facultad de Teología de la Universidad Pontificia de Santo Tomás de Aquino, en Roma, y en 2005 fue decano de la Facultad de Teología de la Universidad Central de Bayamón, y presidente del Comité Evaluador para la acreditación de la Asociación de Estudios Teológicos en Estados Unidos y Canadá (2004-2005).

Presentó en EWTN los programas de televisión “Estoy en casa”, “Combate espiritual” y “Defiende tu fe”, donde destacó por refutar, Biblia en mano, a los protestantes; y fue invitado a los programas “Nuestra Fe en vivo” del mejicano José “Pepe” Alonso y “Cara a cara” del peruano Alejandro Bermúdez Rosell. También fue productor del programa “Apología” del canal Tele Oro en San Juan (Puerto Rico) y fundó y dirigió el apostolado “La Alianza Formativa” en la archidiócesis ídem.

A partir de 2022, Casanova empezó a sentirse y ser “incómodo en casa”. Resulta que en 2022, la comunidad hispana en Chattanooga (Tenesí) lo invitó a un congreso como panelista junto a Rafael Díaz y Luis Román, pero el entonces obispón de Knoxville Richard Stika le retiró al evento el marbete de “católico” y dijo que la diócesis se desvinculaba del mismo porque ellos criticaban a Bergoglio y lo que él apoya (Casanova en particular empezó en 2021 atacando al amiguito y cofrade de Bergoglio James “Jim” Martin). En resultas de ello, Casanova dijo en Abril de 2022 apartarse de las redes sociales durante un año, a excepción de YouTube.

  

No vamos a hacer leña del árbol caído (como sí han hecho en redes sociales hartos modernistas que en otro tiempo lo encomiaban por su “conversión” y lo tenían como referente, ignorando –voluntariamente o sin quererlo, da igual– que el decreto Unitátis Redintegrátio en su número 3 dice que los protestantes están incorporados a Cristo con el bautismo y tienen medios de salvación en sus sectas protestantes –sobra decir, es una afirmación herética–), pero Casanova Ramos es un recordatorio brutal de lo que dice el Apóstol San Pablo: «Mire, pues, no caiga el que piensa estar firme en la fe» (1.ª Corintios X, 12/Versión de Mons. Félix Torres Amat), y lo que decía el cardenal Newmann sobre los conversos, a saber, que ellos vienen a aprender de la Fe y no a pesar y medir todo lo que encuentran allá donde llegan. Y si tenía dudas sobre cuestiones de fe y costumbres católicas, podía haber consultado con algún sacerdote u obispo católico válido tradicional (de los que pudo haber oído durante sus correrías en Estados Unidos o en Méjico), quien le habría sabido responder y recibir.

   

Mas vale acotar que la culpa de que Casanova cambiase de secta protestante (porque la Iglesia Conciliar está hecha casi a imagen y semejanza de los protestantes, por la influencia que ellos ejercieron durante y después del Vaticano II) es de la misma Iglesia Vaticana que él dejó, esa secta malgobernada por ese mismo Francisco Bergoglio que cada día sale con una herejía, irreverencia o capricho diferente y al que defienden a brazo partido (¿será que así defienden a Jesucristo, o defendían con semejante coraje a Ratzinger en su momento? Como dijo el de la película, «No lo sé, tú dime…»), ahondando más y más en la desorientación diabólica de estos últimos tiempos en los que estamos, por lo que bien se le puede decir lo que está escrito: «morirá en su pecado; pero yo te pediré a ti cuenta de su sangre o perdición» (Ezequiel III, 18/Versión de Mons. Félix Torres Amat).

   

JORGE RONDÓN SANTOS

24 de Agosto de 2024 (Año Santo del Sagrado Corazón de Jesús).

Fiesta de San Bartolomé, Apóstol y Mártir.