El obispón de Pasig (Filipinas) Mylo Hubert Vergara Claudio anunció el inicio de la investigación histórica dentro de la fase diocesana del proceso de “beatificación” de la catequista y “ministra extraordinaria de la Comunión” Laureana “Ka Luring” Franco Ataíde († 2011) el pasado 21 de Agosto, después que el prefecto del Dicasterio para las Causas de los Santos, el cardenal Marcello Semeraro, le diese el 10 de Julio el “Nihil obstat” (No hay obstáculo) para la causa iniciada en Febrero.
La comisión histórica fue conformada por los presbíteros Amado Tumbali Jr. SJ (presidente), Elpidio “El” Geneta Mataya (promotor de justicia), Daniel Estacio (delegado episcopal), Joeffrey Brian Catuiran (notario) y Rodifel De León (notario auxiliar). Ellos presentarán su informe al tribunal, conformado por director de la Oficina para las Postulaciones de Causas de los Santos de la Conferencia de Obispos Católicos de Filipinas y obispón de Laoag Renato Mayugba Pine, al vicario diocesano de Pasig Orlando Cantillon, y al presbítero Mark Emman Sese, rector de la Basílica y Santuario de Santa Ana.
El postulador diocesano es Erickson “Ping” Javier, doctor en ministerio (lo que sea que eso signifique) especializado en Educación Religiosa de la Escuela de Teología Loyola del Ateneo de Manila. En la ceremonia hizo entrega del “supplex libéllus”, conteniendo, entre otras cosas, la biografía de Laureana.
En su homilía dada en la Basílica y Santuario archidiocesano de Santa Ana de Taguig, Vergara evocó su época en la que, como formador del seminario de los Santos Apóstoles (1991-2001), oficiaba en la iglesia de San Miguel Arcángel, donde Laureana acudía y era catequista, y que como obispón de Pasig presidió su funeral.
Añadió que el inicio del proceso de “beatificación” de Laureana coincidía con el aniversario del asesinato de Benigno Simeón “Ninoy” Aquino y Aquino († 1983), uno de los principales opositores al régimen de Ferdinand Marcos († 1989; gobernó entre 1965 y 1986), y dijo que «la Iglesia tiene héroes de la fe, los santos y beatos», y citando la exhortación bergogliana “Gaudéte et Exsultáte”, dijo que la santidad es ser fiel a la propia misión en la vida:
«Por ejemplo: si eres leal a tu esposa y no le has sido infiel, ¡eres santo! Si sirves al gobierno y no eres corrupto, ¡eres santo! Si eres abuelo o abuela y tienes mucha paciencia, ¡eres santo! Si eres trabajador u obrero y no siempre llegas tarde a tu trabajo, ¡eres santo! Si eres estudiante y te tomas en serio terminar tus estudios, ¡eres santo! La santidad es fidelidad. ¡Por eso podemos decir que eres santo y un héroe!».
Católicamente, la santidad implica vivir y morir en gracia de Dios y haber ejercitado las virtudes en grado heroico, la mera fidelidad al estado propio no basta: por ejemplo, de los responsables de los campos de concentración nazis y los gulags soviéticos se decía que eran esposos y padres excelentes (y probablemente lo fueran).
Laureana “Ka Luring” Franco Ataíde nació el 4 de Julio de 1936 en Hagonoy, un barrio de Taguig (una ciudad que forma parte del área metropolitana de Manila) en las Filipinas ocupadas por los Estados Unidos, como la mayor de los ocho hijos de Pedro Franco Cuevas y María Ataíde Aman, una familia pobre. Miembro de la Legión de María, fue catequista voluntaria de la parroquia de Santa Ana desde 1969 (habiendo renunciado al cargo de operadora de central telefónica y empleada de contabilidad de la Fuerza Aérea Filipina en la base aérea de Villamor desde 1963) y, posteriormente, la primera “ministra extraordinaria de la Comunión” de la archidiócesis de Manila (la diócesis de Pasig apenas será creada en 2003). Recibió la medalla vaticana “Pro Ecclésia et Pontífice” el 15 de Diciembre de 1989 (que recibió de su amigo el cardenal Jaime “Jim” Sin y Lachica el 1 de Abril del año siguiente), el premio “Míssio canónica” de la Archidiócesis de Manila el 6 de Octubre de 1999, y los premios “Adelante Taugig” del ayuntamiento de Taguig y “Madre Teresa de Calcuta” de la Fundación AY (fundada por el magnate y filántropo Alfonso Yuchengco Tiaoqui en 1970) y la Cámara Junior Internacional de Manila el 25 de Abril y el 16 de Agosto de 2002 respectivamente (de este último premio –que recibió junto con la religiosa asuncionista Remedios Carmen Locsin Valencia, fallecida en 2023– hubo algún ruido porque incluía además de la placa un cheque de 500.000 pesos filipinos que ella no recibió –el cheque era «para obras de caridad» no especificadas–, pero hubo gente que le pedía ayuda –y hasta quien la puso de fiadora en una tienda de ropa– pensando que ella recibió el dinero). Murió el 17 de Octubre de 2011 de un cáncer de ovario.
Las “beatificaciones” y “canonizaciones” de la Secta deuterovaticana no tienen ninguna validez, porque por un lado los “papas” conciliares no tienen autoridad alguna en la Iglesia como herejes y apóstatas que son, y porque el procedimiento fue cambiado en 1983, facilitando causas “políticamente correctas”. Y en cuanto a Laureana “Ka Luring” Franco Ataíde, ella vivió y murió en la apostasía, y fue instrumental a ella durante toda su vida, como catequista y “ministra extraordinaria de la Comunión”. No imaginamos siquiera a cuántas almas ella engañó en esa secta, como hacían las falsas profetisas de que se habla en Ezequiel 13, 17-23 (versión de Mons. Félix Torres Amat):
«[Dijo el Señor a Ezequiel:] Tú, ¡oh hijo de hombre!, reprende con rostro firme a las hijas de tu pueblo que profetizan por su propio capricho, y vaticina acerca de ellas: “¡Ay de aquellos que ponen almohadillas bajo de todos los codos, y hacen cabezales para poner debajo de las cabezas de los de toda edad, a fin de hacer presa de las almas del pueblo mío, y mientras cazaban las almas de mi pueblo, decían que las vivificaban! Y me deshonraban delante de mi pueblo por un puñado de cebada y por un pedazo de pan, matando las almas que no son muertas, y dando por vivas las que no viven, vendiendo mentiras a mi pueblo, el cual da crédito a ellas. Por tanto, así habla el Señor Dios: ‘Vedme aquí contra vuestras almohadillas o lisonjas, con las cuales cazáis las almas como las aves; y yo las destruiré en vuestras mismas manos, y haré volar libremente las almas que vosotros cazáis. Yo romperé vuestros cabezales, y libraré de vuestro poder a los del pueblo mío, y no dejaré que sean presa de vuestras manos; y sabréis que yo soy el Señor. Porque vosotras con vuestras mentiras habéis entristecido el corazón del justo, al cual no había yo entristecido; y habéis fortalecido los brazos del impío, para que no se convirtiese de su mal proceder, y viviese: Por tanto, no tendréis ya en adelante esas falsas visiones vuestras, ni esparciréis vuestras adivinaciones, y yo libraré de vuestras manos al pueblo mío; y conoceréis que yo soy el Señor’”».
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