El “arzobispo” de Los Ángeles, CA, presidente de la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos y miembro del Opus Dei José Horacio Gómez Velasco (69), dijo vía Zoom a los abogados católicos reunidos en el Capitolio del Estado de Minesota el 15 de Abril:
«Actualmente, como sabemos, nuestra política y cultura es agresivamente secular. Es triste, pero algunos de nuestros líderes parecen querer cerrar nuestra sociedad a las ideas y valores cristianos. Me preocupa la creciente censura de los puntos de vista cristianos en Internet y en las redes sociales y la marginación de los creyentes en otros ámbitos de nuestro discurso público».
Censura y marginación que se manifiestan en ser etiquetados como “supremacistas blancos”, “nacionalistas cristianos”, “teócratas” y “extremistas religiosos” sólo por abrazar la visión bíblica del mundo, agregó.
Dejando de lado que el discurso “La diferencia católica en justicia social” se funda en la pseudoencíclica bergogliana “Fratelli tutti”, la observación del ordinario angelino era correcta. Mas sin embargo, «el que por su gusto es triste, que pase sus penas alegre»: la Iglesia conciliar se comporta como un apéndice del mundo al cual se entregó desde el Vaticano II y cambió su púlpito por Facebook, Twitter y Youtube, cuya censura les dice lo que pueden decir y lo que no. Y el mismo José Horacio Gómez Velasco es prueba de ello, al felicitar el 7 de Noviembre de 2020 a Joseph Robinette “Joe” II Biden Finnegan diciendo
«reconocemos que él se une al fallecido John F. Kennedy como el segundo presidente de los Estados Unidos en profesar la fe católica»
a pesar que Biden apoya el aborto, la eutanasia, la homosexualidad y el globalismo.
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