En Agosto de 1890, el Cardenal Agostino Bausa OP, arzobispo de Florencia, envió al Papa León XIII una carta solicitándole elevar el culto a la Sagrada Familia, atendiendo a la devoción que este Misterio tenía entre los fieles de su arzobispado. El Papa Pecci le responde que sigan los estatutos que aprobara Pío IX para la Asociación Piadosa de la Sagrada Familia en 1870, al tiempo que le presenta una fórmula de consagración de los hogares a la Sagrada Familia, y una oración cotidiana en su honor, otorgándoles Indulgencias.
Por primera vez, traemos esta Carta Apostólica en su original latín y una traducción al castellano, a partir del francés publicado en Lettres Apostoliques de S.S. Léon XIII: Encycliques, Brefs, etc., tomo III. París, Casa de la Buena Prensa, 1893, págs. 2-7.
LATÍN
LITTERÆ SANCTISSIMUS DOMINUS NOSTER LEONIS PAPÆ XIII AD CARDINALEM BAUSA, ARCHIEPISCOPUM FLORENTINUM, ADJICITUR FORMULA CONSECRATIONIS FAMILIARUM ET ORATIO QUOTIDIE RECITANDA
Dilécte Fili nostri, Salútem et Apostólicam Benedictiónem.
Novum arguméntum perspécti tui erga hanc Apostólicam Sedem stúdii et obséquii prodidérunt lítteræ Augústo mense exeúnte ad Nos datæ, quíbus vota Nobis significásti plúrium fidélium, ut venerátio quæ Christo Dómino ac Matri Vírgini et Sancte Josépho domésticæ Ejus societátis consórtibus, sub Sacræ Famíliæ título exhibétur, ad ampliórem in Ecclésia cultus dignitátem provehátur, átque de hac re, uti fíeri debet in cáusis grávibus fidem ac disciplínam spectántibus, senténtiam et judícium hujus Apostólicæ Sedis postulásti. Tuæ observántiæ et prudéntiæ offícium Nos plúrimi æstimántes, conféstim postulatiónis tuæ ratiónem habéndam censúimus, ac rem propósitam Consílio Nostro sacris rítibus præpósito cognoscéndam mandávimus, ut deínde ad Nos consúlta et exquísita reférret.
Re ítaque diligénter expénsa, Tibi nunc significámus, ob peculiáres jústasque cáusas Nos decrévisse, ut pietátis cultus erga Sacram Famíliam, nullis áliis indúctis ejus exercéndi novis formis, in eo statu servétur, in quo Auctoritáte hujus Apostólicæ Sedis probátus fuit, átque ut potíssimum christiánæ domus Sacram Famíliam ad veneratiónem et exémplum propósitam hábeant, juxta institúta piæ illíus Consociatiónis, quam Decéssor Noster felícis recordatiónis Pius IX suis lítteris die V Januárii Anno MDCCCLXX datis, probávit et commendávit, atque in spem certam maximórum frúctuum látius in dies propagári exoptávit.
Quam spem salutárium bonórum et Nos ultro in ejúsdem Societátis spíritu pónimus: confídimus enim Fidéles omnes probe intelligéntes, in cultu quem Sacræ Famíliæ exhíbent, sese mystérium vitæ abscónditæ venerári, quam Christus cum Vírgine Matre et Sancte Josépho egit, inde magnos stímulos habitúros ad fídei fervórem augéndum et virtútes imitándas, quæ in divíno Magístro, ac Deípara, Ejúsque Sponso Sanctíssimo fulsérunt.
Hæ áutem virtútes, ut non semel monúimus, dum ætérnæ vitæ mercédem páriunt, ad prosperitátem étiam domésticæ et civílis societátis tam mísere hoc témpore laborántis spectant; cum ex famíliis sancte constitútis, civitátis étiam commúne bonum, cujus família fundaméntum est, necessário consequátur. Majus vero fidúcia Nostra increméntum capit dum cogitámus, Sacræ Famíliæ cultóres ex institúto Societátis quam dixímus, a Christo Dómino grátiam per mérita Matris Vírginis et Sancte Joséphi sedúlo efflagitántes, propítiam índubie opem expertúros, ut vitam sancte compónant, átque uti in dómibus suis concórdiam, caritátem, in advérsis tolerántiam, morúmque honestátem læténtur efflorescére.
Vota ígitur ad Deum effúndimus, ut germánus memorátæ Societátis spíritus in dies látius inter Fidéles emánet ac vígeat, átque in hanc rem óperam suam collatúros tum sacrórum Antístites, tum onmes Ecclésiæ adminístros non dubitámus. In mandátis áutem dédimus Consílio Nostro sacris rítibus præpósito, ut orándi fórmulam ad te mittat, quam confíci et edi curávimus in usum fidélium, ad domos suas Sacræ Famíliæ consecrándas, tum étiam quotidiánæ precatiónis exémplar a fidélibus in Sacræ Famíliæ veneratióne persolvéndæ.
Tuo demum in Nos obséquio, Dilécte Fili Noster, parem dilectiónis afféctum libénter profitémur, et in auspícium cæléstium múnerum, Apostólicam Benedictiónem Tibi, et Clero ac fidélibus, quíbus præsídes, peramánter in Dómino impértimus.
Datum Romæ apud Sancte Petrum, die XX Novémbris Anno MDCCCXC, Pontificátus Nostri Decimotértio. LEO PAPA XIII
TRADUCCIÓN
CARTA APOSTÓLICA DE NUESTRO SANTÍSIMO SEÑOR LEÓN PAPA XIII AL CARDENAL BAUSA, ARZOBISPO DE FLORENCIA, AGREGANDO UNA FÓRMULA DE CONSAGRACIÓN DE LAS FAMILIAS Y UNA ORACIÓN COTIDIANA
Querido Hijo, Salud y Bendición Apostólica.
Nos hemos encontrado una nueva prueba de tu devoción y de tu respeto por esta Sede Apostólica en la carta que Nos has dirigido el pasado mes de Agosto, para significarnos los votos de muchos fieles que siguiendo la devoción practicada, bajo el título de la Sagrada Familia, hacia Nuestro Señor Jesucristo y la Virgen Madre y San José, que formaron su familia, sea elevada a un grado de culto más alto, y para consultar sobre este asunto, como es debido en las causas graves que interesan a la fe y la disciplina, la sentencia y el juicio de la Sede Apostólica. Apreciando altamente tu acto de deferencia y de prudencia, Nos hemos querido dar cuenta también de tu demanda, y hemos sometido el asunto al examen de Nuestra Sagrada Congregación de Ritos para tener su consulta y sus proposiciones.
Después de diligente examen, Nos te informamos hoy que, por causas especiales y justas, Nos hemos decretado que el culto de piedad rendido a la Sagrada Familia sea conservado, sin introducir novedad alguna en el modo de practicarlas, en las condiciones que fue aprobada por la autoridad de esta Sede Apostólica, y que los hogares cristianos honren y tomen como modelo lo más posible a la Sagrada Familia, según los estatutos de la Asociación Piadosa que Nuestro Predecesor Pío IX, de feliz recordación, aprobó y recomendó por su carta del 5 de Enero de 1870, expresando, en la esperanza segura de los mejores frutos, el anhelo que ella se desarrolle cada día más.
Nos queremos fundar la misma esperanza de frutos salvíficos en el espíritu de esta Sociedad; porque Nos tenemos la confianza que todos los fieles comprendan que, en el culto rendido a la Sagrada Familia, ellos veneran el misterio de la vida oculta que Jesucristo llevó en compañía de la Virgen su Madre y de San José, y encontrarán poderosos estímulos para el aumento del fervor de su fe y parala imitación de las virtudes que han resplandecido en el divino Maestro y en la Madre de Dios y en su santísimo esposo.
Estas virtudes, como Nos las hemos enseñado más de una vez, al mismo tiempo que procuran las recompensas de la vida eterna, interesan también la prosperidad de la sociedad doméstica y de la sociedad civil, que en nuestra época sufren tantos males, puesto que el bien general del Estado, del cual la familia es el fundamento, deriva necesariamente de la existencia de familias santamente constituidas. Nuestra confianza acrecienta aún más por el pensamiento que los miembros de la Sociedad que Nos mencionamos, establecida por el culto de la Sagrada Familia, implorando asiduamente la gracia de Nuestro Señor Jesucristo, por los méritos de la Virgen Madre y de San José, no pueden dejar de obtener una asistencia propicia para ordenar santamente su vida y para ver felizmente florecer en sus casas la concordia, el afecto, la paciencia en la adversidad y la honestidad de las costumbres.
Dirigimos pues Nuestros Votos al Señor para que el espíritu propio de la Sociedad se difunda más y más entre los fieles, y no dudamos que los Obispos y todos los ministros de la Iglesia harán todos los esfuerzos a este fin. Nos hemos dado orden a Nuestra Sagrada Congregación de Ritos enviar una fórmula de oraciones que hemos hecho componer y publicar, para uso de los fieles, para la consagración de sus hogares a la Sagrada Familia, y también un modelo de oración cotidiana para rezar en honor a la Sagrada Familia.
Finalmente, Nos te atestiguamos, carísimo Hijo Nuestro, un sentimiento de afecto igual a tu respeto hacia Nos, y como prenda de los dones celestiales, te concedemos muy afectuosamente en el Señor, a ti y a los fieles que presides como jefe, la Bendición Apostólica
Dado en Roma, junto a San Pedro, a 20 de Noviembre del año 1890, decimotercio de Nuestro Pontificado. LEÓN XIII, PAPA
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Preferiblemente, los comentarios (y sus respuestas) deben guardar relación al contenido del artículo. De otro modo, su publicación dependerá de la pertinencia del contenido. La blasfemia está estrictamente prohibida. La administración del blog se reserva el derecho de publicación (sin que necesariamente signifique adhesión a su contenido), y renuncia expresa e irrevocablemente a TODA responsabilidad (civil, penal, administrativa, canónica, etc.) por comentarios que no sean de su autoría.