RECHAZAN PROYECTO CONSTITUCIONAL EN EL CANTÓN DE VALÉS

Noticia tomada de ACTUALITÉS FSSPX.

   

Este domingo 3 de Marzo de 2024 fue día de votación en Suiza. De hecho, hay cuatro fechas por año –una por trimestre– reservadas a las votaciones “populares”, que por tanto se distinguen de las elecciones, que se refieren a objetivos presentados ya sea por el gobierno o por una iniciativa popular. Además de determinadas votaciones que afectan a todo el país, el mismo día se pueden asociar otras que afectan a un solo cantón.

   

Así, se propusieron dos iniciativas populares a los ciudadanos suizos: una modificación de la renta AVS (Aseguramiento de vejez y sobrevivientes) es decir, de las prestaciones de jubilación, añadiendo un “decimotercer mes”, lo que significa un aumento de aproximadamente el 8%. A pesar del estímulo del Consejo Federal y del Parlamento para votar “no”, la iniciativa recibió más del 58% de “sí” y una mayoría de cantones a favor.

    

Por otra parte, muchos rechazaron la iniciativa que pedía aumentar la edad de jubilación de hombres y mujeres a 66 años, y que después la edad de jubilación debería seguir aumentando en función de la esperanza de vida, no pasó el umbral en ningún cantón.

    

UN PROYECTO PARA UNA NUEVA CONSTITUCIÓN EN EL VALÉS

En el cantón de Valés, se propuso a los votantes otro objetivo: una nueva constitución que sustituya a la de 1907, la primera hasta la fecha. El proyecto fue lanzado en Agosto de 2015 por un comité “no partidista” y pasó por una iniciativa popular: el 4 de Marzo de 2018, el proyecto recibió un 72,8 % de “sí” y un 61,5 % fue confiado a una Asamblea Constituyente.

    

Los miembros de la Asamblea Constituyente fueron elegidos por el pueblo el 25 de Noviembre de 2018. Después de cinco años de elaboración, el proyecto de nueva Constitución del cantón de Valés estaba listo. Contenía una variante relativa a los derechos políticos a nivel municipal de las personas de nacionalidad extranjera.

     

La nueva Constitución fue presentada a votación este domingo 3 de Marzo. Después de la aprobación de Marzo de 2018, parecía que la votación era sólo una formalidad. Pero la negativa fue definitiva. El proyecto que incluía el derecho al voto y la elegibilidad de los extranjeros con permiso C (permiso de trabajo) fue rechazado por el 68,13% de los votantes. El que no tenía esta opción fue aprobado con el 57,04% de los votos para una participación del 61,49%.

     

Además, ninguna región ha aceptado el proyecto ni su variante. En Alto Valés, donde la derecha germanófona, mayoritaria en la región, había pedido el rechazo del texto, la proporción de votos por el “no” alcanzó casi el 85% contra el proyecto y el 74,8% contra su variante. Del lado francófono, el Valés central rechazó el proyecto con un 62,9% y un 51,2% para la variante, y el Bajo Valés con un 60,9% y un 49,9%.

    

Los católicos se sintieron aliviados por esta negativa. De hecho, varios puntos podrían parecer preocupantes en el proyecto. Particularmente en lo que respecta a las escuelas (art. 137). O incluso el art. 13 §1, cuya vaga redacción («El Estado y los municipios adoptarán medidas para apoyar la paternidad») podría haber abierto el camino a la adopción de parejas del mismo sexo.

    

La negativa estuvo motivada principalmente por razones políticas y por la redacción del proyecto de Constitución, acusado de ser un “cajón de sastre” que excede las proporciones de una constitución. La posibilidad de votar y la elegibilidad de los extranjeros con un permiso C (permiso de trabajo) fueron sin duda desfavorables para el proyecto, aunque una variante descartaba esta posibilidad.

    

Por último, sigue siendo sorprendente que una Constitución renovada, cuya idea fue aceptada por más del 70% durante una votación en 2018, sea rechazada severamente por casi el 70% seis años después.