Elementos tomados de GLORIA NEWS y PONT AVUI (España).
El párroco de Santa María de Camprodón (Gerona, España) mosén Jean de Dieu Ndizeye, de 45 años, fue detenido el 20 de Septiembre por conducir bajo los efectos del alcohol y provocar un accidente del que huyó, dejando a dos jóvenes de 22 y 25 años heridos.
Mientras conducía por la autovía C-17 (Barcelona-Ripoll), en el kilómetro 76, donde está el desvío para ir hacia Orís y la Mambla, el coche del presbítero embistió a otro vehículo y lo hizo volcar. Viajaban en él dos jóvenes que lograron salir del coche por sus propios medios, fueron atendidos in situ por el Sistema de Emergencias Médicas y, después, trasladados al hospital de Vic con heridas leves.
Tras conducir nueve kilómetros, aun con una rueda rota, Ndizeye tuvo que detener su coche a causa de las contusiones provocadas por la colisión.
Un agente de la Guardia Urbana de Barcelona fuera de servicio le dio el alto cuando mostró signos de embriaguez. Entonces fue detenido por los Mozos de Escuadra, la policía autonómica de Cataluña, y llevado a la comisaría de Vic.
La prueba de alcoholemia mostró que tenía un nivel de alcohol en sangre de 0,94ml/l, casi cuatro veces el límite legal de 0,25ml/l. Este nivel de alcohol provoca alteraciones notables como euforia, reducción de la coordinación, alteración del juicio, embotamiento de los sentidos, dificultades para hablar, problemas de equilibrio, náuseas y cambios emocionales.
Tras pasar la noche en la comisaría, el presbítero fue puesto en libertad bajo fianza al día siguiente por el Juzgado de Instrucción N.º 2 de Vic con retirada del permiso de conducir, prohibición de conducción de cualquier vehículo y causa abierta por conducción bajo los efectos del alcohol, conducción temeraria y abandono del lugar del accidente.
El Obispado de Vic, al que pertenece el detenido, ha declinado hacer declaraciones inmediatas sobre el incidente, aunque fuentes cercanas aseguran que el presbítero será apartado temporalmente de sus funciones hasta que se aclare su situación judicial ante el Juzgado de Manresa.
Ndizeye, natural de Ruankuba, un pueblo en la Provincia Occidental cerca de Kigali, la capital de Ruanda, fue “instalado” presbítero el 4 de Octubre de 2015 por el obispón Román Casanova y Casanova al servicio de la diócesis de Vic, como parte del acuerdo entre esa diócesis y la suya de origen (Kigali) para el envío de seminaristas vista la poca cantidad de vocaciones locales (problema que, aunque común en muchas diócesis, en las catalanas es endémico).
Tras trabajar en Igualada, San Pedro de Oro y San Vicente de Castillete, fue nombrado párroco de Camprodón hace tres años.
Según Germinans Germinavit, era «una persona querida y apreciada» allá donde iba y se adaptaba con facilidad a la realidad cotidiana de España.
Sin embargo, probablemente no era la primera vez que Ndizeye se emborrachaba.
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