domingo, 7 de noviembre de 2021

Y TANTO QUE HABLABA ÉL…

Noticia tomada de GLORIA NEWS.
    
 
Cada semana de Octubre, hasta su detención el 30 de Octubre por cargos federales de pornografía infantil, el presbítero James Jackson, de la FSSP, escribió en su boletín parroquial sobre los escándalos de abusos perpetrados por sacerdotes “psicosexualmente disfuncionales”.
    
Él calificó al cardenal laicizado McCarrick como un “asqueroso” que ocultaba una vida privada pecaminosa con buenas obras externas, y que contaba con la ayuda de amigos corruptos en la jerarquía.
    
Jackson explicó el 24 de Octubre que el celibato vivido sin fe (“me refiero a la creencia real en Dios”), sin gracia santificante, sin oración y sin dedicación a la vida interior crea “solteros profesionales” que siguen celebrando Misa y administrando bautismos, pero que se ven sobrepasados por el aislamiento e incluso la depresión y “se vuelven a lo natural en busca de consuelo”.
    
Como ejemplos, enumeró “las diversiones y los placeres vacíos en la bebida, la comida, las vacaciones lujosas en el mejor de los casos, y la pornografía y la búsqueda de relaciones sexuales en el peor”. Su conclusión: “Con ese alejamiento de Dios, hay un infierno que pagar”.
   
El miércoles, Jackson, que es Covid positivo, fue puesto en libertad con vigilancia electrónica y con una fianza no garantizada. Se le permite vivir con un familiar en Kansas, su estado natal. Una condena por este cargo implica una pena mínima de cinco años de prisión.
    
El grupo “Verdad para el padre James Jackson, FSSP” recaudó más de 50.000 dólares en las primeras cinco horas de su lanzamiento. Una recaudación anterior de GoFundMe obtuvo 60.000 dólares antes de que GoFundMe la retirara.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Preferiblemente, los comentarios (y sus respuestas) deben guardar relación al contenido del artículo. De otro modo, su publicación dependerá de la pertinencia del contenido. La blasfemia está estrictamente prohibida. La administración del blog se reserva el derecho de publicación (sin que necesariamente signifique adhesión a su contenido), y renuncia expresa e irrevocablemente a TODA responsabilidad (civil, penal, administrativa, canónica, etc.) por comentarios que no sean de su autoría.