martes, 15 de octubre de 2024

MONJA INTENTABA INTRODUCIR CELULAR EN PRISIÓN

Elementos tomados de distintas fuentes.
   

Oficiales penitenciarios de la cárcel de Marassi (Génova, Italia) interceptaron y bloquearon a una religiosa que intentó ingresar un teléfono móvil al establecimiento carcelario, informó el Faro di Roma el 9 de Octubre.

La religiosa Cesarina Lavagna de 88 años, perteneciente a las Hijas de María Virgen Inmaculada (conocidas localmente como “las Hermanas de la noche” por su asistencia a los sin techo) y fundadora de la asociación “Il Miglio Verde” de Savona, que contaba con autorización para visitar a los internos, fue atrapada en flagrancia cuando los guardias encontraron en su bolso un conejo de peluche y un cable USB. Luego de un exhaustivo análisis, encontraron en el interior del peluche un teléfono móvil. Lavagna pretendía visitar a un joven de 23 años que fue detenido por posesión y tráfico de drogas.

«Felicitamos la brillante operación por la profesionalidad de la policía penitenciaria, pero se necesitan intervenciones preventivas para impedir inicialmente la introducción de objetos no autorizados y el tráfico ilícito que en prisión gana tres veces más que en el mundo libre. Ciertamente no esperábamos eso de una monja. Se necesitan refuerzos orgánicos, herramientas y equipos. El modelo de prisión también necesita ser reorganizado», declaró el secretario regional del sindicato policial UILPA, Fabio Pagani.

Lavagna fue acusada del delito de “introducción ilegal de aparatos electrónicos”, recientemente introducido como el artículo 391 ter del Código Penal Italiano, y podría enfrentarse a una pena de uno a cuatro años de prisión. Mientras, la superiora Maria Cristina Lazzoni le prohibió visitar las cárceles de Génova, como tampoco las de Sanremo o Pontedecimo.

El único que ha salido en su defensa ha sido Giovanni Lupino (“instalado” presbítero el 30 de Junio de 1979), antiguo capellán de la cárcel de San Agustín entre 1987 y 1985 y entre 2010 y 2016, cuando fue cerrada. Criticando el silencio guardado por la curia diocesana (encabezada por Calogero “Gero” Marino, obispón de Savona -aunque las religiosas son de derecho pontificio-), dijo al oligárquico La Stampa: «Lo más grave es que no se haya levantado alguno que recordara cuánto bien ha hecho, hace y hará Cesarina. Ni uno: ni el director de la cárcel, ni una cohermana, un representante del clero o de las instituciones. Bueno, entonces lo hago yo: sor Cesarina merece todo el respeto de la tierra y el cielo». Y demandó que la esposa del detenido diga la verdad: que ella introdujo el teléfono en el peluche y la religiosa (que «ha hecho el bien a los savoneses y la ciudad ahora la deja sola») no sabía nada del ardid.

La Cárcel de Génova Marassi es una de las prisiones de la capital ligur. Situada en el distrito de Marassi, la prisión fue construida a finales del siglo XIX y renovada en 1990.

El distrito alberga exclusivamente reclusos varones, aproximadamente 674 reclusos, la mitad de los cuales son extranjeros y el 70% de los cuales son drogadictos. La prisión tiene una capacidad de 535 plazas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Preferiblemente, los comentarios (y sus respuestas) deben guardar relación al contenido del artículo. De otro modo, su publicación dependerá de la pertinencia del contenido. La blasfemia está estrictamente prohibida. La administración del blog se reserva el derecho de publicación (sin que necesariamente signifique adhesión a su contenido), y renuncia expresa e irrevocablemente a TODA responsabilidad (civil, penal, administrativa, canónica, etc.) por comentarios que no sean de su autoría.