miércoles, 2 de junio de 2021

EL OBISPÓN DE LAS MARIONETAS

Uno de los personajes más polémicos en la historia de la Iglesia deuterovaticana en Canadá es sin duda Remi Joseph De Roo Depape, obispón emérito de Victoria (Columbia Británica).
  
Aunque no lo creáis, ES UN OBISPO
   
Nacido de Raymondus Petrus De Roo De Sutter y de Elodia Josephina Depape Van Lent el 24 de Febrero de 1924, Remi Joseph fue ordenado sacerdote el 8 de Junio de 1950 por el obispo de San Bonifacio en Manitoba Arthur Béliveau y consagrado obispo el 14 de Diciembre de 1962 por Maurice Baudoux (por tanto, es sacerdote y obispo católico válido, al ser ordenado con el Rito Romano Tradicional). Participó en todas las sesiones del Concilio Vaticano II, el cual describe como «un tiempo de euforia, de inmensa esperanza en tiempo de la lucha».
  
Durante su gobierno en la diócesis de Victoria (desde 1962 hasta 1999), De Roo fue conocido por ser un proponente de la “Acción social” de Max Weber y de la “Teología de la Liberación”, y fue crítico del capitalismo, siendo el principal redactor de la Declaración de Winnipeg del 27 de Septiembre de 1968 donde los obispos canadienses se plantaron en oposición a la pseudoencíclica Humánæ Vitæ, y de la declaración “Reflexiones éticas sobre la crisis económica” publicada por la Comisión de Asuntos Sociales de la Conferencia de Obispos Católicos de Canadá el 1 de Enero de 1983, donde dice «El objetivo de servir a las necesidades humanas de todas las personas en nuestra sociedad debe tomar precedencia sobre la maximización de las ganancias y el crecimiento» (declaración la cual fue criticada tanto por el cardenal Gerald Emmett Carter, arzobispo de Toronto, y por el primer ministro Joseph Philippe Pierre Yves Elliott Trudeau –padre del actual primer ministro Justin Pierre James Trudeau Sinclair–, que básicamente dijo que «los obispos no sabían mucho sobre economía, y que mejor no deberían hablar de ello»; pero que fue apoyada por los anglicanos, presbiterianos y unitarios canadienses). Pero también será recordado por defender a capa y espada al obispón de Prince George Hubert Patrick OConnor Walsh OMI (que fue acusado de abusar sexualmente de dos alumnas indígenas cuando fue rector de la Misión San José en Williams Lake en los años 60) un escándalo de malversación que casi deja a su diócesis en la bancarrota: entre 1988 y 1992, invirtió 2 millones de dólares en una granja de caballos árabes y en 1997 suscribió una hipoteca de 12 millones por un terreno de 65 hectáreas en Lacey (Washington), inversiones que acabaron en un litigio judicial e investigación canónica por el cual la diócesis tuvo que vender unas propiedades en Vancouver para pagarle al abogado Joseph Finley.
   
Ahora, lo que nos convoca: en el marco de la Conferencia de la Costa Oeste del movimiento modernista “Call to Action” en el salón A del hotel Hyatt en San José, California el 27 de Abril 2008, De Roo (que además es propagandista del diabólico eneagrama) presidió el servicio novusordiano, donde no faltaron la meditación budista, marionetas con “estolas” (¿quizá “concelebrando”?), danzas, homilía dada por una mujer (Florene Stewart Poyadue) procesión de ofrendas y un chaval haciendo de monaguillo sin usar sotana ni sobrepelliz (o al menos un atuendo formal), se usó una tortilla y una copa de vidrio, y concluyó con la siguiente “bendición” «Que podamos ser bendecidos en el nombre del Creador, del Redentor y el Santificador, con la paz», como la guinda en un pastel tóxico.
   
   
A continuación, el vídeo en cuestión: Advertimos que quienes sean demasiado susceptibles o estén con medicación, se abstengan de verlo.
  
Si no se puede visualizar el vídeo, clic aquí.
   
Conviene dar unas cuantas palabras sobre “Call to Action”. Es una organización nacida en Chicago en 1978 tras la Conferencia ‘Llamado a la Acción’ en Detroit en 1976, que aboga por la reinvención y refundación de la Iglesia con una estructura y doctrina enteramente diferente, defiende la adoración de una feminista y ambientalista “Diosa Tierra”, las sacerdotisas, la aprobación eclesial de la homosexualidad, el aborto y el adulterio, y los eneagramas (introducidos a través de “liturgias” dirigidas por laicos que tienen lugar en casas privadas, muy similares a los “clubes de estudio” marxistas de los años 1950 que se transformaron en el “consejo parroquial”, que tomaron la dirección de la parroquia y eventualmente de la diócesis entera), el matrimonio de los presbíteros y que se elija democráticamente los obispos y los papas. Ellos también se han asociado con causas sociales extremistas y programas políticos liberales.. Por lo menos, en la diócesis de Lincoln, Nebraska, el movimiento ha sido amenazado con la excomunión, y otras diócesis también les han emitido censura, al estar en contraste con la doctrina de los modernistas, como declarara el entonces prefecto de la Congregación para los Obispos el cardenal Giovanni Battista Re en 2006.

Remi Joseph De Roo Depape, ahora a sus 97 años, debería a estas alturas estar pensando en la abultada cuenta que presentará ante Dios el día que muera, y en el Infierno que le espera si no se arrepiente de sus herejías y apostasía. Y ese episodio es una prueba más que el Novus Ordo Missæ no sólo está moribundo, sino que además es producto salido de las peores alucinaciones de un enfermo mental o de un “mal viaje”.

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