domingo, 9 de enero de 2022

CUPICH, ABUCHEADO EN LA MARCHA POR LA VIDA DE CHICAGO


En ocasión de la Marcha por la vida realizada hoy en Chicago (Estados Unidos), el sedicente arzobispo Blaise Joseph Cupich Mayhan dio un discurso que fue interrumpido por los abucheos de la concurrencia (que llevaban pancartas verdes que decían que “Cupich es la cultura de la muerte”, y le pedían a Bergoglio y a Cupich “Detengan la guerra contra nuestra fe intemporal”), tanto que tuvo que abandonar el evento escoltado por elementos de seguridad del mismo.
   
   
Cupich fue alumno del laicizado cardenal Theodore McCarrick, y fue elevado a la birreta cardenalicia por un Francisco Bergoglio que recomendó “no obsesionarse” con los temas de vida y familia, prefiriendo concentrar sus energías en campañas más como la lucha contra el covid (Cupich instó en un comunicado el 7 de Enero a la vacunación de los niños) y los adeptos a la Misa Tradicional, la conversión ecológica y otras causas más play. Además, defendió a capa y espada el “derecho” a que los “políticos de-votos” como Joe Biden y Nancy Pelosi manduquen la galleta y el Kool Aid novusordiano así estén con las manos manchadas con la sangre de los bebés abortados.
   
La causa próxima del abucheo fue que más temprano publicó en su cuenta de Twitter lo siguiente:
«Como cristianos, nuestra misión es construir una cultura dedicada a proteger la santidad de toda vida humana en cada etapa de su desarrollo desde el nacimiento hasta la muerte natural. Continuemos orando por los vulnerables y dando voz a los que no tienen voz».
Trino que después editó remplazando “nacimiento” por “concepción”, pero la captura de pantalla ahí quedó.
  

1 comentario:

  1. Un ejemplo de seguir las indicaciones políticas de la Santa Sede preocupados en la actualidad en los monotemas indicados en la noticia. Esto mismo debería de pasar en otras plazas de Roma.

    ResponderEliminar

Preferiblemente, los comentarios (y sus respuestas) deben guardar relación al contenido del artículo. De otro modo, su publicación dependerá de la pertinencia del contenido. La blasfemia está estrictamente prohibida. La administración del blog se reserva el derecho de publicación (sin que necesariamente signifique adhesión a su contenido), y renuncia expresa e irrevocablemente a TODA responsabilidad (civil, penal, administrativa, canónica, etc.) por comentarios que no sean de su autoría.