FALLECIÓ MONS. DANIEL L. DOLAN

  
En la tarde del 26 de Abril de 2022, fiesta de Nuestra Señora del Buen Consejo, falleció Mons. Daniel Lytle Dolan, a la edad de 70 años.

   

Mons. Daniel Lytle Dolan nació el 28 de mayo de 1951 en Detroit, Míchigan, hijo de David Dolan y Rosemary Lytle (ya difuntos), de ascendencia irlandesa [Dolan es una variante del apellido irlandés O’Dubhslain, que significa “Negro desafío”]. Inició sus estudios teológicos en el seminario menor archidiocesano de Detroit, estudios que continuó en la orden cisterciense y en el Seminario Internacional San Pío X de Écône (Suiza). Ordenado sacerdote el 29 de Junio de 1976 por el arzobispo Marcel Lefebvre en Écône, fue enviado de vuelta a los Estados Unidos al año siguiente para fundar misiones y centros de misa. Fue expulsado junto a los padres Clarence Kelly (entonces Superior del Distrito de los Estados Unidos), Anthony Cekada y Eugene Berry el 27 de Abril de 1983 por rechazar el uso del Misal Roncalliano en la Fraternidad Sacerdotal San Pío X, así como las sentencias de nulidad matrimonial de los tribunales conciliares y que se recibieran sin reordenación a los presbíteros instalados con el rito montiniano (Lefebvre había introducido estas políticas en pro de una posible reconciliación con la Roma Modernista a la que después llamó Anticristo, pero a diferencia de Europa, encontró rechazo entre los sacerdotes estadounidenses). A estos cuatro sacerdotes se unieron los padres Donald Joseph Sanborn, Joseph Collins, Martin Skierka William W. Jenkins y Thomas P. Zapp, quienes se hicieron conocidos como “Los Nueve”, fundando la Fraternidad Sacerdotal San Pío V.

   

Años después, en 1989, junto a los padres Donald Sanborn, Anthony Cekada, Eugene Berry y Thomas Zapp (que se agruparon como “Restauración Católica”), Dolan abandonó la FSSPV porque su Superior general, el padre Clarence Kelly, rechazaba como inválido el linaje del arzobispo Pierre Martin Ngô Đình Thục (Kelly se hizo consagrar obispo –no sin controversia– el 19 de Octubre de 1993 por Alfredo Cecilio Méndez González CSC, obispo emérito de Arecibo, Puerto Rico, en la capilla del hogar de ancianos de Carlsbad, California donde él residía) y mantenía el sedevacantismo como una cuestión opinable, tal como hacen los de Écône.

   

Dolan fundó el Seminario Santa Gertrudis la Magna cerca a West Chester (Ohio), y después de llegar a un acuerdo sobre cuestiones teológicas con la Congregación María Reina Inmaculada, y para asistir a los sedevacantistas mexicanos (hacía dos años de la muerte de Mons. Moisés Carmona y Rivera en un extraño accidente de tránsito) y de Europa, fue consagrado obispo el 30 de Noviembre de 1993 por Mons. Mark Anthony Pivarunas CMRI. Fue co-consagrante junto a Mons. Mark Pivarunas de Mons. Martín Dávila Gándara de la Sociedad Sacerdotal Trento el 11 de Mayo de 1999 en la iglesia de la Divina Providencia en Acapulco (Guerrero, México), y junto a Mons. Donald Sanborn de Mons. Joseph Selway para el Instituto Católico Romano el 22 de Febrero de 2018 en el Seminario de la Santísima Trinidad en Brooksville (Florida); y consagró obispo a Mons. Rodrigo da Silva el 29 de Septiembre de 2021 en el Seminario Santa Gertrudis la Magna en West Chester (Ohio).

  

Desde su época de seminarista, Mons. Dolan adhirió al sedevacantismo como la única conclusión teológica posible y racional frente a la apostasía del Vaticano II, sus falsos papas (a los cuales nunca mencionó en el Canon de la Misa) y su liturgia protestantizada y pagana. Fue un infatigable defensor de la Fe, pronto a defenderla en sus sermones y artículos (de ahí que lo llamaran “el león de Santa Gertrudis”) y realizó apostolado llevando el sedevacantismo a muchas regiones de Estados Unidos y países como México, Brasil, Francia, Bélgica, Polonia e Italia, y apoyando sacerdotes como Bede Nkamuke en Nigeria y Valérii Kudriátsev en Ucrania. Al momento de su muerte, estaba en un retiro espiritual previo a la ordenación sacerdotal de Thomas Ojeka, Thomas Simpson, Anthony Brueggemann y John Okerulu el 4 de Mayo, por quienes había pedido ofrecer una novena a Nuestra Señora del Buen Consejo.

   

Pedimos a vuestra caridad ofrecer oraciones por su alma, para que Dios nuestro Señor le conceda el perdón de sus culpas y descansar en paz como recompensa a su apostolado, que llevó a cabo enfrentando muchas dificultades y luchas.

Deus, qui inter apostólicos Sacerdótes fámulo tuo Daniéle pontificáli fecísti dignitáte vigére: præsta, quǽsumus; ut eórum quoque perpétuo aggregéntur consórtio. Per Christum Dóminum nostrum (Oh Dios, quisiste elevar a tu siervo Daniel a la dignidad Episcopal, escogiéndolo y poniéndolo en el número de los Sacerdotes Apostólicos, te suplicamos el que hagas goce también de su compañía en tu gloria. Por Jesucristo nuestro Señor). Amen. [Misal Romano tradicional, Oración por un obispo difunto].