Traducción del Comentario de los Padres de TRADITIO.
Porque el clero conciliar fue demasiado vil para denunciar al infame cardenal McCarrick por sus abominables crímenes contra los menores, ahora ha salido impune porque el tribunal afirmó que ya no estaba en plenitud de facultades mentales.
Los antipapas Juan Pablo II Wojtyła, Benedicto XVI Ratzinger y Francisco Bergoglio fueron también cómplices en estos crímenes perversos porque McCarrick permanecía disponible para hacer colectas de dinero para ellos.
El 30 de Agosto de 2023, el muy notorio cardenal conciliar pedófilo Theodore Edgard McCarrick McLaughlin, arzobispón que fue de Washington DC, ha salido impune. Este hombre violó y sodomizó a niños y jóvenes seminaristas de un lado al otro de la Costa Este de los Estados Unidos durante muchos años. El juez federal del distrito de Dedham (Massachusetts) Paul J. McCallum desestimó los cargos, afirmando que McCarrick está ahora non compos mentis (no está en plenitud de sus facultades mentales). La víctima, identificada como James Grein, de 64 años, tenía 14 en el momento de los hechos. McCarrick lo agredió sexualmente durante una recepción de matrimonio en el Colegio Wellesley en la ciudad homónima [Parte de la información para este Comentario proviene de Catholic News Agency].
Defensores de las víctimas de abuso sexual clerical condenaron la decisión de McCallum como parte de la «cínica estrategia de encubrimiento de la jerarquía» conciliar, declarando además que:
«La depredación de McCarrick era un secreto a voces. Muchos de sus colegas cardenales y obispos [sic] lo sabían, y no hicieron nada. Ellos no lo reportaron a las fuerzas del orden, no salieron al frente a dar la información, y no se acercaron a aquellos que fueron agredidos por él. McCarrick pudo haber sido procesado hace muchos años si siquiera uno de sus hermanos obispos [sic] hubiesen llamado a la policía. En cambio, una vez más, un predador evadió la responsabilidad de sus actos. Si bien la institución se ahorró la vergüenza de [ver] un ex-cardenal en juicio, permanece la deshonra de su complicidad con McCarrick».
Católicos tradicionales, Theodore McCarrick fue una figura poderosa en los círculos eclesiásticos, diplomáticos y políticos en los Estados Unidos y alrededor del mundo. Los graves crímenes de McCarrick fueron encubiertos por el primer antipapa pedófilo, Juan Pablo II Wojtyła; el segundo antipapa pedófilo, Benedicto XVI Ratzinger; y el tercer antipapa pedófilo, Francisco Bergoglio, porque McCarrick recolectaba fondos para ellos. Y, con la Iglesia Conciliar hundiéndose en la bancarrota, los antipapas necesitan cada céntimo que puedan conseguir, así sea hundiéndose en la malversación y dependiendo de clérigos conciliares pedófilos para mantener con vida su corrupta Pseudoiglesia y su régimen antipapal. Los antipapas han incurrido en pena de muerte y condenación eterna por encubrir estos crímenes, como declaró San Pablo en su Epístola a los Romanos (I, 32). ¡Cuán vil es la Iglesia Novusordita! Ningún verdadero católico puede tener algo que ver con ella.
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