El arzobispo de Colombo (Sri Lanka) Albert Malcolm card. Ranjith Patabendige Don, afirmó que el coronavirus SARS-CoV-2, lejos de ser un virus presente en la naturaleza y transmitido por vía animal, fue el resultado de unos “experimentos de una nación rica y poderosa” para contagiar al mundo.
En una misa televisada el 15 de Marzo (cuando la Iglesia de Sri Lanka decidió suspender los servicios religiosos hasta fin del mes, en vista de 28 casos confirmados –en su mayoría turistas italianos–), Ranjith declaró que, en su parecer, el virus fue creado. «Sabemos que en distintas áreas del mundo, invesrigadores de todo tipo están comprometidos, por varias razones, en investigar para destruir la vida humana y la naturaleza. Algunos virus de los que hablamos en estos días son producto de experimentos sin escrúpulos por parte de una nación rica y poderosa. Debemos prohibir este tipo de experimentos que llevan como resultado pérdida de vidas y causan dolor y sufrimiento a toda la humanidad», dijo.
«Estos tipos de investigaciones no se realizan por personas en los países pobres, sino en laboratorios de países ricos. Producir estas cosas es un crimen muy serio contra la humanidad. Pido al Señor que venga a revelar quiénes han sembrado este veneno. Pienso que las Naciones Unidas u organizaciones internacionales deben averiguar cómo nació incidente y castigar a los reponsables por genocidio. Estas investigaciones deberían estar prohibidas», concluyó el purpurado.
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