ZANCHETTA PIDE PRISIÓN DOMICILIARIA

El ex-obispón de Nueva Orán (Argentina) Gustavo Óscar Zanchetta, condenado a cuatro años y medio de prisión por abusos sexuales contra dos ex-seminaristas, pidió que se le otorgue el beneficio de prisión domiciliaria por presentar problemas de salud que lo hicieron internar en el hospital San Vicente de Paúl pasado viernes 3 de Junio, informó Ciudad Online.

   

Apenas en Abril de este año, Zanchetta fue trasladado de la dependencia policial del barrio Taranto a la Unidad Carcelaria N.º 3 (ambas en la ciudad de Salta), para purgar su condena. Pero según el abogado Darío Francisco Daniel Palmier, nuevo apoderado del convicto obispón, hace más de un mes pidieron que se le conceda prisión domiciliaria, aduciendo que «la cruda realidad de estar en una cárcel tiene atormentado y muy mal a Zanchetta: los gritos, la peleas, la reacción de los funcionarios de prisiones ante las revueltas, los gritos y amenazas algunas de ellas hechas hacia su persona, generan el mayor de los tormentos, a pesar de estar en un pabellón más tranquilo y acorde a su realidad».

   

Palmier declaró a la sección Salta12 del diario Página|12 que «(Zanchetta) está internado, estamos tratándolo. Hace poco tuvo que hacer una consulta personal por un cuadro de hipertensión, tiene una enfermedad muy delicada de los riñones. Es una enfermedad relacionada con el sistema venoso de él, le fue diagnosticada en Roma. Lo cierto es que puede tener un colapso en cualquier momento. Lo está analizando el servicio médico de Tribunales. Hay una junta médica integrada por cardiólogos, y especialistas en riñón».

   

La defensa de Zanchetta (conformada por Palmier y Juan José Valdez Aguilar) ofreció a la Sala II del Tribunal de Juicio de Orán (conformada por los jueces María Laura Toledo Zamora y por los jueces Raúl Fernando López y Héctor Fabián Fayos) el oranés monasterio de Nuestra Señora del Vallede las monjas franciscanas de la Orden de la Inmaculada Concepción como el lugar donde Zanchetta cumplirá su condena. La Sala II del Tribunal de Juicio de Orán, que lo condenó por el delito de abuso sexual simple continuado agravado por ser cometido por un ministro de culto religioso reconocido, evaluará la cuestión teniendo en cuenta el dictamen de la junta médica.

   

El artículo 10 del Código Penal de la Nación Argentina (Ley 11.179 de 1921, modificado por el artículo 4.º de la Ley 26.472 de 2009) establece que, a criterio del juez competente, podrán cumplir pena de prisión domiciliaria:

a) El interno enfermo cuando la privación de la libertad en el establecimiento carcelario le impide recuperarse o tratar adecuadamente su dolencia y no correspondiere su alojamiento en un establecimiento hospitalario;

b) El interno que padezca una enfermedad incurable en período terminal;

c) El interno díscapacitado cuando la privación de la libertad en el establecimiento carcelario es inadecuada por su condición implicándole un trato indigno, inhumano o cruel;

d) El interno mayor de setenta (70) años [en este supuesto, el juez debe analizar cada caso en particular];

e) La mujer embarazada;

f) La madre de un niño menor de cinco (5) años o de una persona con discapacidad a su cargo.

Para los tres primeros supuestos, debe contarse con informes médicos y psicológicos que acrediten la condición. Agrégase a esto que, en los condenados por delitos de abusos (como Zanchetta), debe haber un informe especial por especialistas psicólogos. Pero en peritazgos realizados dentro del proceso, se determinó que Zanchetta es una persona posesiva y autoritaria, que tiene la capacidad de hacer ver a otros su realidad y creer en ella. Así, pues, sería implausible jurídicamente que se le otorgue el beneficio, pero en el (poco probable) caso que se conceda, se estaría frente a otro caso como el de Theodore McCarrick o Francisco José Cox Huneeus, que fueron adosados a casas religiosas aun después de su reducción al estado laical, y obligando a las monjas a ser sus sirvientas (que es lo que tanto denunciara en su momento Francisco Bergoglio).

   

Ahora bien, según dijo un ex-seminarista a Salta/12 y recoge Página|12, la autorización para preparar una casa casa construida por el sacerdote presbítero Pedro Diego Calvisi († 2018; junto a Andrés Buttu, fue uno de los cinco sacerdotes que denunciaron ante el nuncio los abusos sexuales y mala administración de Zanchetta) para alojar a curas jubilados en el monasterio vino del actual obispón de Orán Luis Antonio Scozzina OFM, por órdenes de Bergoglio. Para el ex-seminarista, «el permiso del Papa para permitirle vivir ahí, es lo que da indicios de que no va a pasar nada con el juicio eclesiástico. La pena máxima sería destituirlo, de esa manera no podría ser alojado por la iglesia, pero sigue siendo obispo», agregando que hay también una cuestión administrativa, toda vez que el arzobispón de Corrientes, Andrés Stanovnik OFM Cap., estaría visitando la diócesis de Orán para un retiro de religiosos (que después se supo sería del 11 al 15 de Julio próximo venidero), que haría el papeleo para que Zanchetta sea trasladado al monasterio.