El presbítero Ivanildo de Assis Mendes Tavares C.S.Sp. (foto) fue apartado de sus funciones por la Archidiócesis de San Pablo el 8 de Diciembre. La suspensión fue firmada por el cardenal Odilio Pedro Scherer, arzobispo de San Pablo.
Con este acto, el presbítero tiene prohibido celebrar los sacramentos públicamente y ejercer cualquier función presbiteral en la Archidiócesis de San Pablo.
Nacido en Cabo Verde el 23 de Septiembre de 1983, el presbítero (“instalado” el 16 de Diciembre de 2012) actuaba como vicario en la parroquia de San José Obrero en las favelas de Vila Prudente, Jacaraípe/Morro do Peu, Ilha das Cobras, Haití y Favela da Sabesp, y en prisiones. También es miembro y defensor de los movimientos negros en el este de San Pablo, y conocido por su simpatía al movimiento LGBT.
La medida cautelar fue tomada en el marco de una investigación canónica que surge por la participación del presbítero en un matrimonio colectivo sin autorización eclesiástica. El hecho se dio el 22 de Octubre, en el municipio de Franco da Rocha, en el área metropolitana de San Pablo. La falta es tipificada por el derecho canónico como “simulación de sacramento”.
El matrimonio colectivo fue un evento de la Prefectura (Ayuntamiento) de Franco da Rocha y tuvo lugar en el Gimnasio deportivo “Carlos Vicente Ferreira”. La ceremonia formalizó veinte uniones civiles y, después de la oficialización, las parejas recibieron una “bendición interreligiosa”.
En el evento estaban también la iyálorisá (sacerdotisa de candomblé) Tania ti Oyá, el pastor de las Asambleas de Dios Sérgio de Oliveira Cunha, y el espiritista kardecista José Lúcio Arantes. Assis Tavares (como es conocido entre sus fieles), revestido con alba y estola, “bendijo” también por lo menos tres parejas homosexuales en la ceremonia, lo que causó conmoción entre los fieles y la cúpula archidiocesana, toda vez que le daba apariencia “sacramental” a esas uniones, lo que habría conducido a engaño sobre su actitud. El presbítero se justificó diciendo: «Solamente hice una bendición. Como vendigo cachorros, bendigo gatos, o bendigo carros. Entonces bendije personas».
Al saberse la noticia, líderes de las favelas donde Assis Tavares (que actualmente está en Lisboa visitando a sus parientes y en Enero de 2023 partirá a su natal Cabo Verde, regresando a Brasil en Marzo) prestaba servicio escribieron a la Curia archidiocesana una carta pidiéndole el levantamiento de la suspensión. A esto, la Curia respondió reiterando que la medida era cautelar, mientras se investigaba la comisión de la falta; y recordó que el presbítero no «bendijo personas individuales» sino que «bendijo las uniones civiles realizadas en el lugar».
Por otra parte, menciona la Archidiócesis que Assis Tavares era plenamente consciente que no podía celebrar fuera de la jurisdicción de su parroquia (y menos participar en servicios interreligiosos) sin la debida dispensa, postura que fue sostenida por la Congregación del Espíritu Santo (Padres Espiritanos), a que pertenece el presbítero.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Preferiblemente, los comentarios (y sus respuestas) deben guardar relación al contenido del artículo. De otro modo, su publicación dependerá de la pertinencia del contenido. La blasfemia está estrictamente prohibida. La administración del blog se reserva el derecho de publicación (sin que necesariamente signifique adhesión a su contenido), y renuncia expresa e irrevocablemente a TODA responsabilidad (civil, penal, administrativa, canónica, etc.) por comentarios que no sean de su autoría.