miércoles, 25 de agosto de 2021

¿CÓNCLAVE EN EL AIRE?

Traducción del artículo publicado en NOVUS ORDO WATCH.
  
¿Adiós, Bergoglio?
FRANCISCO BERGOGLIO RUMORA RENUNCIAR EN DICIEMBRE, Y REGULAR EL ROL DEL “PAPA EMÉRITO”
  
 
Hoy (23 de Agosto) el periódico italiano Libero tiene un explosivo encabezado en su página principal: «Francisco listo para renunciar “debido a la salud, no por la edad”. Rumores en el Vaticano: “Hay un cónclave en el aire”»
    
Este es el título para un artículo escrito por el vaticanista Antonio Socci. El artículo completo no tiene una traducción profesional al inglés [ACTUALIZACIÓN: ahora hay una disponible aquí]; sin embargo, puede encontrarse en línea en el original italiano en el sitio de Libero como también en la propia página de Socci, que puede traducirse fácilmente usando herramientas como deepl.com.
    
Prima fácie, uno puede despreciar esto fácilmente como otro intento para vender periódicos y ganar clics por medio de un encabezado sensacionalista. Después de todo, no sería la primera vez: en el pasado se ha rumorado muchas veces la renuncia de Jorge Bergoglio, y él mismo ha sido grabado diciendo que un día podría renunciar en vez de servir de por vida.
    
Esta vez, sin embargo, parece haber un poco más que mera especulación.
   
Por algo, Socci es un periodista creíble y autor de  numerosos libros. Aunque los medios mayoritarios han intentado despreciarlo como a un loco, en más de una ocasión Socci ha mostrado ser un investigador astuto, bien informado, serio y capaz. Por ejemplo, su libro de 2007 El cuarto Secreto de Fátima fue tan convincente que forzó al “cardenal” Tarcisio Bertone Borio a ir a la televisión italiana para “probar” que el Vaticano de hecho había publicado el verdadero Tercer Secreto de Fátima en su totalidad, un episodio en el cual Bertone acabó involuntariamente demostrando lo opuesto, vindicando así a Socci (como fue documentado en el libro de 2008 El Secreto todavía oculto por Christopher Ferrara).
    
Similarmente, fue Antonio Socci quien predijo en Libero tan temprano como 2011 que Benedicto XVI (Joseph Ratzinger Tauber) pronto renunciaría a su “pontificado”, algo que parecía absurdo en ese momento y ganó a Socci muchas burlas. Curiosamente, fue el 10 de Febrero de 2012 (un año y un día antes de su anuncio público de renuncia) que el italiano Il Fatto Quotidiano predijo que Benedicto XVI moriría en 12 meses. Obviamente, ninguna publicación resultó completamente cierta, pero sería completamente tonto relegar simplemente todo esto al estátus de coincidencia sensacionalista.
   
La primera plana de Libero el 23 de Agosto de 2021
    
«En el Vaticano hay un rumor cada vez más persistente de un nuevo cónclave», así comienza Socci su artículo del 23 de Agosto en Libero. Alegadamente, Francisco ha hecho conocido su deseo de renunciar en o alrededor de su 85th cumpleaños, lo cual sería el 17 de Diciembre de este año.
    
Es buena idea recordar, como Socci también lo hace, que la creíble bitácora pro-Bergoglio blog Il Sismografo informó el mes pasado que la salud de Francisco Bergoglio era mucho más pobre de lo que la máquina de relaciones públicas del Vaticano dejaba ver: «La enfermedad que ha gilpeado al Papa Francisco [Bergoglio] es severa y degenerativa», escribió el editor Luis Badilla Morales. Algunos han sugerido que en lugar de un mero caso de diverticulitis, el “Papa” padece actualmente cáncer de colon.
    
Socci menciona que el primero en hablar que un cónclave está “en el aire” fue el vaticanista veterano Sandro Magister, en su artículo del 13 de Julio “Cónclave a la vista: todos quieren alejarse de Francisco [Bergoglio]”.
     
Según el tabloide italiano Dagospia (al cual no enlazaremos, porque contiene imágenes lascivas), el sucesor de Francisco Bergoglio será definitivamente italiano, y la apuesta será decidida entre el “Cardenal” Pietro Parolin Miotti, el actual Secretario de Estado, y el “cardenal” Matteo Maria Zuppi Fumagalli, ambos nacidos en 1955 (Parolin nació el 17 de Enero, y Zuppi el 11 de Octubre) y nombrados por Francisco Bergoglio (Parolin como Secretario de Estado, Zuppi como “arzobispo” de Bolonia). Prediciones como estas no valen mucho, por supuesto, pero es interesante que estos dos personajes sean considerados papabili (“Papables”).
    
Ahora puede uno preguntar, por supuesto: ¿Es razonable creer que Bergoglio quiera abandonar su poder? Por más de los 8 años pasados, se ha hecho dolorosamente evidente que el tan humilde “Papa” Francisco que los medios gustan retratar es de hecho el mismo dictador despiadado, narcisista y hambriento de poder que fue cuando era “arzobispo” de Buenos Aires (1998-2013):
Con esto en vista, por tanto, parecería altamente improbable que alguien como Bergoglio siquiera ceda voluntariamente el poder.
    
Con todo, hay al menos un escenario concebible bajo el cual pudiera hacerlo: Si a cambio de abandonar el poder, él consigue (al menos encubiertamente) dirigirá quién será su sucesor, asegurando así más o menos que su agenda seguirá viva. Dependiendo de cuán comprometidos estén al menos alguno de los participantes del cónclave, teniendo a Bergoglio presente en la Ciudad del Vaticano mirando sobre los hombros de los electores, como si estuviera, respirándoles bajo la nuca mientras el cónclave está en sesión, seguramente influenciaría un voto o dos.
   
¿Puede eso estar regulado? Ciertamente no.
    
Lo que hace más interesante este asunto es que adicional a los rumores sobre Francisco Bergoglio renunciando en Diciembre, hay palabra que el mismo “Papa” pronto establecerá normas canónicas para las renuncias papales o regular (o abolir) el oficio putativo de “Papa Emérito”, el cual realmente es una fantasía soñada en la mente de Ratzinger.
    
También hoy (¡curioso intervalo!) apareció un artículo por la vaticanista Maria Antonietta Calabrò en la edición italiana del Huffington Post. Robert Moynihan de Inside the Vatican proporciona una traducción completa al inglés en su Carta e-mail #92.
    
Calabrò escribe:
«El Papa Francisco pronto podría promulgar una nueva ley (en forma de Constitución Apostólica) para regular la renuncia del Papa, y especialmente el estado tras la renuncia de un Pontífice.
     
Esto también para evitar toda una serie de interpretaciones engañosas sobre la existencia de dos papas, sobre su convivencia, sobre la tesis de “un papado ampliado” y sobre otras cuestiones que, aunque no han tocado a la gran mayoría de los fieles, han alimentado los venenos subterráneos de los llamados “Papavacantistas” [=“Resignacionistas”], quienes han llegado a plantear la hipótesis de que el único Papa verdadero es Ratzinger.
    
En definitiva, ni siquiera se excluye, aunque sería sensacional, que para la nueva ley no hubiera ningún Papa emérito» [Maria Antonietta Calabrò, “Francesco potrebbe promulgare una norma sullo status di ‘Papa emerito’” (Francisco podría promulgar una norma sobre el estátus de ‘Papa emerito’). Huffington Post, 23 de Agosto de 2021; traducción de Robert Moynihan].
El informe de Francisco Bergoglio posiblemente publicando normas canónicas para todo su circo de “Papa Emérito” da más peso al rumor que intenta renunciar en Diciembre.
    
Con un Benedicto XVI aún con vida, una renuncia por Francisco podría añadir algo de hilaridad al ya absurdo show de payasos en el Vaticano: Entonces ¡serán dos “Papas eméritos” en el territorio de 0,49 km² (0,19 sq mi), y después del cónclave habrán tres hombres vestidos como Papas! (A menos, claro, que Bergoglio abola todo eso).
    
¿Esto es una farsa inconcebible?
    
    
De hecho, uno puede solo encoger los hombros y hacerse eco de las palabras de la desagradable Hillary Rodham-Clinton: «En este punto, ¿qué diferencia podría hacer?».

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Preferiblemente, los comentarios (y sus respuestas) deben guardar relación al contenido del artículo. De otro modo, su publicación dependerá de la pertinencia del contenido. La blasfemia está estrictamente prohibida. La administración del blog se reserva el derecho de publicación (sin que necesariamente signifique adhesión a su contenido), y renuncia expresa e irrevocablemente a TODA responsabilidad (civil, penal, administrativa, canónica, etc.) por comentarios que no sean de su autoría.