El 24 de Agosto de 2021, el Comité de Salud Pública de la Cámara de Reprsentantes del estado de Ohio, Estados Unidos, realizó una audiencia pública con relación al proyecto de ley estatal HB 248 (“Vaccine Choice and Anti-Discrimination Act”, “Ley de elección de vacunas y contra la discriminación”), que prohibiría a los empleadores, hospitales, y otros requerir o preguntar por el estado de vacunación de los empleados y otras personas, y prohibiría a los negocios establecer requisitos diferenciados de distanciamiento social para personas vacunadas y no vacunadas.
Entre los ciudadanos intervinientes estuvo el padre Gabriel Lavery CMRI, quien declaró a favor del proyecto de ley. Dijo no estaba testificando para decir que «las vacunas te hacen magnético, o una interfaz 5G, eso también me vuelve loco». Al rechazar esas ideas, el sacerdote dijo que cree que la ciencia no se basa en las vacunas y que es inmoral «usurpar los derechos del individuo por el bien de la sociedad».
Cuestionado porque sus declaraciones eran opuestas a las de Francisco Bergoglio (que ha alentado a que los conciliares reciban la coronavacuna), Lavery respondió que la pregunta planteaba «cuestiones religiosas más profundas, ya que hay muchos clérigos y obispos de todo el mundo que simplemente han visto lo obvio: que Francisco en muchas ocasiones ha contradicho las enseñanzas católicas. Ciertamente no lo reconozco como Papa, y es un simple principio básico de la teología católica, no puedes ser la cabeza de la Iglesia si no profesas la fe católica. Tienes que ser católico para ser Papa». Y agregó que la percepción de Bergoglio de que las vacunas son una obligación moral entra en conflicto con el razonamiento moral del Papa Pío XII.
Lavery (que en anteriores ocasiones testificó ante la Asamblea General de Ohio sobre temas relacionados con el coronavirus wuhanense), explicó ante el comité que él es sedevacantista, aunque les recordó que el tema de la audiencia era el proyecto de ley sobre la no obligatoriedad de las vacunas y no sobre posiciones teológicas.
A la pregunta de si el beneficio de las vacunas supera el riesgo, Lavery dijo que «hay mucho espacio para la discusión allí, pero en cambio ha habido demasiada opinión unilateral de que recibir la vacuna es la única forma de proteger a mi prójimo, y si la vacuna es tan eficaz como afirman, entonces creo que es una exageración».
Al preguntarle si Francisco Bergoglio enseñaba ex cáthedra sobre las vacunas, Lavery contestó «por supuesto, no consideraría nada de Francisco ex cáthedra si no lo considero Papa... para mí no es un problema. Sería tanta autoridad como si el presidente Biden me lo dijera».
Luego se le preguntó acerca de una Medalla Milagrosa que llevaba.
Gabriel Lavery fue ordenado sacerdote sedevacantista en 2003 por Mons. Mark Anthony Pivarunas, superior de la Congregación María Reina Inmaculada (CMRI), una congregación fundada en 1967 por el controvertido obispo Francis Conrad Schuckardt (+2006), pero que después expulsó a su fundador (que fue ordenado y consagrado en 1971 por el obispo veterocatólico Daniel Quitel Brown) en 1984 por sectarismo y mala conducta. Pivarunas fue ordenado sacerdote por Mons. George Musey el 27 de Junio de 1985, y consagrado obispo por Mons. Moisés Carmona el 24 de Septiembre de 1991 (ambos del linaje del arzobispo Pierre Martin Ngô Đình Thục). Actualmente tienen presencia en 32 estados de la Unión Americana, y presencia en Alemania, Francia, Rusia, Canadá, México, Nueva Zelanda, Argentina, Brasil y Filipinas, y misiones en Inglaterra, Escocia, Chequia, Suiza, Guatemala, Honduras, Perú, Australia y Malasia.
[Dijo Jesús]: «Y por mi causa seréis conducidos ante los gobernadores y los reyes para dar testimonio de mí a ellos y a las naciones. Si bien cuando os hicieren comparecer, no os dé cuidado el cómo o lo que habéis de hablar, porque os será dado en aquella misma hora lo que hayáis de decir; puesto que no sois vosotros quien habla entonces, sino el Espíritu de vuestro Padre, el cual habla por vosotros» (San Mateo X, 18-20 / Versión de Mons. Félix Torres Amat).
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