Traducción de la noticia publicada en GLORIA NEWS, ampliada en algunos lugares.
La policía italiana arrestó al presbítero Vincenzo Esposito, de 63 años (nacido el 17 de Febrero de 1958, e “instalado” presbítero el 19 de Mayo de 1984), párroco desde 2013 de San Feliciano en Magione, provincia de Perusa, por inducción a la prostitución de cuatro adolescentes.
Según los informes de los medios, él pagaba 20, 30 ó 60 euros, dinero que a veces provenía de la charola de colectas dominicales. Un seguimiento telefónico policial desde 2020 generó evidencia que “casi diariamente” él hacía vídeollamadas por WhatsApp o Messenger a los adolescentes de Termini Imerese (provincia de Palermo) y sus alrededores pidiéndoles que se masturbaran. La policía también encontró transacciones de dinero a tarjetas PostePay.
En un caso, un joven le dijo que necesitaba el dinero para comprar medicamentos porque estaba enfermo. En otro caso, los contactos fueron facilitados por la madre (de 51 años) de un joven de 17, que también es acusada de organizar la prostitución de otro joven. Ella está ahora bajo arresto domiciliario.
El arzobispo de Esposito, el cardenal de Perusa Gualtiero Bassetti, presidente de los obispos italianos, dijo que si las acusaciones son ciertas, “esta historia mostraría una muy chocante degeneración humana, moral y religiosa”. Con todo, Bassetti es un seguidor de la “nueva” teología moral homosexual de Francisco Bergoglio.
Ambos, Esposito y la mujer se negaron a declarar en una audiencia virtual ante el magistrado examinador (juez de instrucción) Fabio Pilato de Palermo. Renato Vazzana, abogado defensor de Esposito, habló sobre un chantaje por los chicos que le pedían a Esposito que les diera dinero o de lo contrario lo reportarían a la policía.
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