DE LA CONDENA AL SILENCIO SOBRE LAS HEREJÍAS DE SOR FAUSTINA KOWALSKA

Traducción del artículo publicado por Wiktor Maksymilian. Tomado de APOSTOLADO CABALLERO DE LA INMACULADA.

   

DE LA CONDENACIÓN AL SILENCIO SOBRE LAS HEREJÍAS DE SOR FAUSTINA, Y LA OPOSICIÓN ENTRE LA DEFERENTE CURIA EN POLONIA.

  

1906 - CONDENACIÓN de Feliksa Franciszka Kozłowska Olszewska y sus enseñanzas concurrentes con las de Sor Faustina.
El 5 de Diciembre de 1906, Feliksa Franciszka Kozłowska Olszewska fue excomulgada nominativamente por el Papa San Pío X. La fundadora de la Congregación de Sacerdotes Mariavitas y mística en la opinión de los mariavitas (secta de la “Iglesia Veterocatólica Polaca”) transmitió una revelación contenida en la Obra de la Gran Misericordia (en polaco Dzieło Wielkiego Miłosierdzia), no reconocida por la Iglesia Católica.
  
Sin embargo, las mismas presuntas “revelaciones” muestran una significativa semejanza a las “revelaciones” de Sor Faustina Helena Kowalska Babel. La misión de Feliksa Kozłowska es conocida como la “Obra de la Gran Misericordia”. Faustina, por otra parte, se llamó a sí misma la “Secretaria de la Divina Misericordia”.
   
Fragmento de una conversación con Konrad Rudnicki, “sacerdote” de la congregación (secta) mariavita:

Konrad - La similitud de las dos apariciones es una muy interesante coincidencia. He hablado sobre esto más extensamente en el artículo en la colección “Teología de la Divina Misericordia”. El tema de la identidad de las apariciones de Santa María Francisca y Santa María Faustina requiere una mayor explicación. En resumen, y así, por necesidad, simplificando los detalles, en mi opinión  -y no solamente la mía- estamos bregando con una repetición de la misma revelación -con la diferencia que la revelación dada a nuestra Fundadora parece más básica, porque contiene los principios generales de implementar la Obra de Misericordia. (...)
Entrevistador - ¿Entonces Sor Faustina recibió una revelación dada anteriormente a la Madre Kozłowska, pero en una versión más personal?
Konrad - No sé si el Señor sabe que no es solo ella. Después de ellas, algunas otras personas percibieron el conocimiento extra-sensorial de la Obra de la Misericordia. Todas esas revelaciones están en la misma línea de las revelaciones, que comenzaron en 1893. Estas son -salvo las revelaciones de Faustina- muy pequeños fragmentos de esta Obra de Dios, aspectos muy personales e individuales de la Obra. Esto es mencionado en mi artículo mencionado en la obra “Teología de la Divina Misericordia”.

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1931 - Comienzo de las apariciones a Sor Faustina sobre el “Culto a la Divina Misericordia”.
Se considera el 22 de Febrero de 1931 como el comienzo del culto de la “Divina Misericordia” en la forma revelada a Sor Faustina Kowalska, cuando ella, que estaba en el monasterio de Płock, tuvo una revelación de una figura similar a Jesús, que instruyó a la monja pintar una imagen de la “Divina Misericordia” con el epígrafe “Jesús, yo confío en ti”, y expresó el deseo de establecer la fiesta de la “Divina Misericordia” el domingo de la Octava de Pascua. El Padre Michał Sopoćko, que estaba completamente involucrado en propagar el culto de la “Divina Misericordia” en “nuevas formas”, se hizo su confesor y factor. (Cf. FRANCISZEK MRÓZ. “Origen y funcionamiento de los santuarios de la Divina Misericordia en Polonia”, en “Peregrinus Cracoviensis”, nº 19. Cracovia, Universidad Jallegónica, 2008 págs 47-72).

 

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1934-1935 - Pintura y publicación de la primera imagen de “Jesús Misericordioso” según las apariciones de Sor Faustina.
La pintura fue hecha en 1934 en Vilna por el pintor Eugeniusz Kazimirowski. Gracias al padre Sopoćko, durante la ceremonia de clausura del Año Jubilar de la Redención del Mundo, del 26 al 28 de Abril de 1935, la pintura fue ubicada en la Puerta del Amanecer. En los años venideros, el padre Sopoćko comenzó sus esfuerzos para introducir la Fiesta de la Divina Misericordia y encontró mayores dificultades. (Cf. FRANCISZEK MRÓZ. “Origen y funcionamiento de los santuarios de la Divina Misericordia en Polonia”, en “Peregrinus Cracoviensis”, nº 19. Cracovia, Universidad Jallegónica, 2008 págs 47-72).

 

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1936 - Respuesta NEGATIVA del Arzobispo Romualdo Jałbrzykowski, en la prohibición de promover un culto no aprobado por la Iglesia.
La actitud del Arzobispo Romualdo Jałbrzykowski era consistente con el derecho canónico y un decreto especial de la Congregación del Santo Oficio, publicado el 26 de Mayo de 1936. El decreto prohíbe la propagación de todas las formas de culto que se derivara de revelaciones privadas no aprobadas por la Iglesia. (Cf. Mons. PAWEŁ SOCHA “Desarrollo del culto de la Divina Misericordia en Polonia y el extranjero”, en “Peregrinus Cracoviensis”, nº 11. Cracovia, Universidad Jallegónica 2001, págs. 111-142).

 

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1937 (1934) - Entronización de la pintura de Eugeniusz Kazimirowski en la iglesia de San Miguel de Vilna.
El 3 de Abril de 1937, el padre Sopoćko obtuvo permizo del Arzobispo para poner la imagen en la iglesia de San Miguel, de la que era rector. Con el consentimiento del Arz. Romualdo Jałbrzykowski, el 4 de Abril de 1937, el padre Sopoćko consagró la pintura y la puso junto al altar mayor de la iglesia de San Miguel en Vilna. (Cf. Mons. PAWEŁ SOCHA “Desarrollo del culto de la Divina Misericordia en Polonia y el extranjero”, en “Peregrinus Cracoviensis”, nº 11. Cracovia, Universidad Jallegónica 2001, págs. 111-142)

  
Según otras fuentes, la imagen de Jesús Misericordioso fue colgada por primera vez en el otoño de 1934 en el convento franciscano de Vilna cerca a la iglesia de San Miguel (Fuente: Vilna: Recorrido del cuadro milagroso, en Otwarty Przewodnik Krajoznawczy, 4 de Febrero de 2011).

  

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1937 - RECHAZO del Arzobispo de Vilna a la solicitud de aprobar la “nueva” fiesta de la “Divina Misericordia”.
El padre Sopoćko también encontró dificultades para introducir la Fiesta de la Divina Misericordia, por lo que intentó preparar un estudio científico sobre la materia. Durante el Congreso Mariológico en Vilna, del 1 al 3 de Julio, convenció a los teólogos de la necesidad para un “nuevo” culto a la Divina Misericordia por medio de una “nueva” fiesta, obteniendo la aprobación la resolución para poder enviarla a la Santa Sede. Pero el Arzobispo de Vilna Romualdo Jałbrzykowski rechazó la resolución adoptada por los teólogos (Cf. Mons. PAWEŁ SOCHA “Desarrollo del culto de la Divina Misericordia en Polonia y el extranjero”, en “Peregrinus Cracoviensis”, nº 11. Cracovia, Universidad Jallegónica 2001, págs. 111-142).

  

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1937 - El P. Sopocko “compone” las “Letanías a la Divina Misericordia” según el diario de Sor Faustina.
El padre Sopoćko visitó a Sor Faustina en Julio de 1937. Ella había sido trasladada en 1936, primero a Walendów cerca de Varsovia, y en Mayo de ese año a la casa de la Congregación de la Virgen de la Misericordia en Cracovia (distrito de Łagiewniki). Durante esta visita, la religiosa le entregó a su confesor un Diario, donde encontró una novena y la corona de la Divina Misericordia, y algunas aclamaciones en honor a la Divina Misericordia, de las que el padre Sopoćko compuso una letanía a la Divina Misericordia (Cf. Mons. PAWEŁ SOCHA “Desarrollo del culto de la Divina Misericordia en Polonia y el extranjero”, en “Peregrinus Cracoviensis”, nº 11. Cracovia, Universidad Jallegónica 2001, págs. 111-142).

 

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1937 - El padre Sopoćko hace REPRESENTACIÓN DEL IMPRIMÁTUR a las oraciones por la Curia de Vilna, llevando a negación por la Curia de Cracovia y de Vilna.
El padre Sopoćko, guiado por las palabras del Diario de la figura que se apareció como Jesús, que le “dictó” las oraciones, quiso imprimirlas. La oración estaba en el “Diario” (nros. 474-476) del 13 de Septiembre de 1935. Con todo, la Curia Archidiocesana de Vilna se negó a darle el IMPRIMÁTUR.
  
Buscando apoyo, se volvió a la Curia Archidiocesana en Cracovia, y habiendo obtenido el permiso, publicó las oraciones en 1937. El libro estaba decorado con una imagen de Jesús Misericordioso, copia hecha por la sra. Łucja Bałzukiewiczówna, de la pintura de Kazimierowski. (Cf. Mons. PAWEŁ SOCHA “Desarrollo del culto de la Divina Misericordia en Polonia y el extranjero”, en “Peregrinus Cracoviensis”, nº 11. Cracovia, Universidad Jallegónica 2001, págs. 111-142).

 

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1938 - REPROBACIÓN DEL SÍNODO EN CZĘSTOCHÓWA al padre Sopoćko sobre el incumplimiento del Decreto del Santo Oficio sobre la prohibición de propagar cultos y revelaciones no reconocidas por la Iglesia.
Tras la muerte de Sor Faustina, el padre Sopoćko presentó el 26 de Noviembre de 1938 un voluminoso memorial titulado Miłosierdzie Boże (Divina Misericordia) a los obispos reunidos en la conferencia episcopal en Częstochowa, en el cual proporcionaba la justificación teológica para establecer la “fiesta de la Divina Misericordia”. Como requirió el obispo ordinario, él no hizo mención en su memorial sobre las apariciones de Sor Faustina. Sin embargo, los obispos no tomaron ninguna decisión sobre el particular.
  
Los obispos que recibieron el estudio del padre Sopoćko, acusaron al autor de desobedecer el decreto del Santo Oficio que prohíbe la propagación de cultos y devociones no reconocidas por la Iglesia. (Cf. Mons. PAWEŁ SOCHA “Desarrollo del culto de la Divina Misericordia en Polonia y el extranjero”, en “Peregrinus Cracoviensis”, nº 11. Cracovia, Universidad Jallegónica 2001, págs. 111-142).

 

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1939 - Esfuerzos caóticos del padre Sopoćko por la aprobación de la “nueva” fiesta de la Divina Misericordia “según las apariciones de Sor Faustina”.
Llegado el padre Sopoćko a Roma en Abril de 1939, la Congregación de Ritos no le dio respuesta positiva, porque había ido allá sin el consentimiento de su ordinario, el Arz. Romualdo Jałbrzykowski.

 

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1940 - Permiso para reimprimir “oraciones” a la Divina Misericordia, no aprobada por la Iglesia, por causa de la II Guerra Mundial y el deseo urgente de la gente en pedir la misericordia de Dios.
En vista de las atrocidades de la guerra, se incrementó el deseo de la gente en dirigirse a Dios pidiendo misericordia y perdón. El 7 de Febrero de 1940, el Arzobispo de Vilna permitió la reimpresión de las oraciones no aprobadas eclesiásticamente en Vilna y su distribución entre los fieles. Para ese propósito se usaron folletos con las oraciones de la Divina Misericordia, previamente publicados en Cracovia sin permiso del Santo Oficio.
   
Los sermones de Pasión pronunciados por el padre Sopoćko cada domingo de Cuaresma ayudaron a la propagación de la “nueva” devoción a la Divina Misericordia. Según el Obispo Eduardo Kisiel, testigo presencial de estos sermones, los fieles acudían en grandes números a escuchar, y el predicador hablaba como en un éxtasis místico y con gran potencia. (Cf. Mons. PAWEŁ SOCHA “Desarrollo del culto de la Divina Misericordia en Polonia y el extranjero”, en “Peregrinus Cracoviensis”, nº 11. Cracovia, Universidad Jallegónica 2001, págs. 111-142).

 

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1943-44 - Pintura y publicación de la segunda imagen de “Jesús Misericordioso” según las apariciones de Sor Faustina.
En 1943, el pintor cracoviense Adolf Hyła ofreció a las hermanas la imagen de Jesús Misericordioso con la inscripción “Ufam tobie” (Yo confío en ti), como agradecimiento por haber sido protegida su familia durante la guerra. La pintura fue bendecida el 16 de Abril de 1944 por el padre Józef Andrasz SJ, confesor de Sor Faustina, y con el consentimiento del Arzobispo de Cracovia, el cardenal Adam Stefan Sapieha, gran devoto de la Divina Misericordia, fue colocado en el altar lateral de la capilla. Por iniciativa del padre Andrasz comenzó a celebrarse un servicio en honor a la Divina Misericordia en una “nueva forma” no aprobada por el Santo Oficio (Cf. Antoni Mruk SJ. “El difícil camino del proceso de beatificación de la Sierva de Dios Sor Faustina Kowalska”. En “La misión de Sor Faustina”, Simposio de la Divina Misericordia en Cracovia-Łagiewniki (18-20 de Febrero de 1988). Cracovia, 1991, págs. 9-22).

 

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1947 - Comienzo de los esfuerzos para la beatificación de Sor Faustina/Helena Kowalska.
Para iniciar el proceso de beatificación, la madre Micaela Moraczewska consultó el 9 de Enero de 1947 al cardenal primado Augusto Hlond, que respondió:

«Espérese, aún no es el momento. Recoged los documentos, para que lo tengáis todo listo para cuando llegue el momento oportuno».

Siguiendo las instrucciones del primado, la Superiora General de la Congregación de las Hermanas de Nuestra Señora de la Misericordia ordenó recoger todos los datos relativos sobre Sor Faustina, escribir memorias y recopilar información sobre los favores recibidos por medio de ella. En 1948, Sor Bernarda Wilczek visitó la casa natal de Sor Faustina y a sus empleadores (donde había trabajado antes de entrar a la Congregación) para recoger los recuerdos de la familia y las de todos los que conocieron a Elena Kowalska durante sus años de infancia y de trabajo como servicio doméstico. (Antoni Mruk SJ. “El difícil camino del proceso de beatificación de la Sierva de Dios Sor Faustina Kowalska”. En “La misión de Sor Faustina”, Simposio de la Divina Misericordia en Cracovia-Łagiewniki (18-20 de Febrero de 1988). Cracovia, 1991, págs. 9-22).

 

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1946-1948 - Oposición de los teólogos de Cracovia a la Curia de Vilna y los teólogos de Częstochowa. Envían una solicitud a Roma.
Después de la II Guerra Mundial, en 1946, el Episcopado de Polonia pidió a la Santa Sede aprobar la fiesta de la Divina Misericordia según las apariciones de Sor Faustina. Una resolución similar fue enviada a Roma por los teólogos reunidos en el congreso de la Sociedad Teológica en Cracovia el 8 de Abril de 1948. (Cf. Mons. PAWEŁ SOCHA “Desarrollo del culto de la Divina Misericordia en Polonia y el extranjero”, en “Peregrinus Cracoviensis”, nº 11. Cracovia, Universidad Jallegónica 2001, págs. 111-142).

  

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1948 - LA PRIMERA CONDENA DE LAS ENSEÑANZAS DE SOR FAUSTINA - ELENA KOWALSKA.
El Papa Pío XII ubicó el culto de la “Divina Misericordia”, incluyendo la revelación y los escritos de Sor Faustina, en el Index Librórum Prohibitórum (Índice de los Libros Prohibidos).

  
Cinco años después de la II Guerra Mundial y 11 años después de la muerte de Faustina (1948), la Curia de Białystok publicó una ordenanza a los sacerdotes. Les prohibió distribuir folletos, impresos y todos los tratados sobre la Divina Misericordia, escritos por el confesor de Faustina, en la archidiócesis. La prohibición cobijaba incluso los tratados que tenían el imprimátur de otras diócesis («ellos contienen muchas cosas que suscitan serias reservas»). La prohibición fue expedida a fin de impedir «malinterpretaciones de las verdades de la fe y la práctica de la Iglesia".

 

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1951 - Esfuerzos adicionales para la beatificación de Sor Faustina/Helena Kowalska.
A continuación del nombramiento de Róża Kłobukowska como nueva Superiora general de la Congregación, pididó al Padre General de los Palotinos, Wojciech Turkowski, que nombrara un postulador para la causa de Sor Faustina, y el 22 de Mayo de 1951 fue designado el padre Stanisław Suwała. Inicialmente, el vicepostulador era el padre Jan Maćkowski, pero por su precaria salud no pudo realizar su función, por lo que fue sustituido por el padre Alojzy Żuchowski.
   
Ese mismo año, el Arz. Romualdo Jałbrzykowski emitió una opinión negativa sobre la devoción a la Divina Misericordia, y en los años posteriores se incrementaron las dificultades relacionadas a la devoción a la Divina Misericordia y su iniciadora, Sor Faustina. Según el Santo Oficio, era excesiva e inadecuada la "propaganda" de la devoción a la Divina Misericordia en una nueva forma, y habían malas traducciones hechas al francés y al italiano de una transcripción mecanografiada del Diario. (Antoni Mruk SJ. “El difícil camino del proceso de beatificación de la Sierva de Dios Sor Faustina Kowalska”. En “La misión de Sor Faustina”, Simposio de la Divina Misericordia en Cracovia-Łagiewniki (18-20 de Febrero de 1988). Cracovia, 1991, págs. 9-22).

 

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1951 - OPINIÓN NEGATIVA del Arzobispo Romualdo Jałbrzykowski de Vilna sobre Sor Faustina/Helena Kowalska.
Por causa que la solicitud del Episcopado Polaco no tenía respuesta de la Santa Sede, el Presidente de la Comisión Episcopal se dirigió al Arzobispo Romualdo Jałbrzykowski, ordinario de la Archidiócesis de Vilna residente en Białystok, pidiendo comentario sobre el particular.
  
En su respuesta del 30 de Noviembre de 1951, el Arz. Jałbrzykowski (que antes de la guerra, había confesado en muchas ocasiones a Faustina) informó su opinión sobre las «supuestas apariciones de Sor Faustina, del Convento de Nuestra Señora de la Misericordia, y la devoción a la Divina Misericordia, propagada por el padre [Miguel] Sopocko, el padre [José] Andrasz SJ, los PP. Marianos et al.».
   
En la introducción, dice el autor:

«Creo en la Divina Misericordia y siempre le pido a Dios por ella, pero tengo un enfoque decididamente negativo sobre la devoción a la Divina Misericordia como es propuesta según las revelaciones de Sor Faustina, y esto por varias razones» (Cf. EDWARD KISIEL, Dios – Padre de misericordia, en "Boletín de la Divina Misericordia", nº 14, 1984, pág. 57).

Luego el Arz. Jałbrzykowski enumera las razones:

1. Debido a las regulaciones del Derecho Canónico, principalmente [los cánones] 1259 y 1279, que requieren que el obispo diocesano sea extremadamente cauto sobre la aprobación de oraciones y prácticas piadosas, especialmente imágenes inusuales o "insólitas",
2. Debido al decreto de la Congregación del Santo Oficio del 26 de Mayo de 1937 sobre la prohibición de introducir nuevas formas de culto o piedad;
3. Debido A LA FORMA IMPROPIA DE PROPAGAR LA DEVOCIÓN, QUE ESTÁ EN OPOSICIÓN AL ESPÍRITU DE LA IGLESIA. (Cf. Mons. PAWEŁ SOCHA “Desarrollo del culto de la Divina Misericordia en Polonia y el extranjero”, en “Peregrinus Cracoviensis”, nº 11. Cracovia, Universidad Jallegónica 2001, págs. 111-142)

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1953 - OPINIÓN NEGATIVA del Obispo de Przemyśl Franciszek Bard sobre la imagen de “Jesús de la Misericordia”.

El padre Michał Sopoćko recibió un golpe tras otro. En Septiembre de 1953, el Obispo de Przemyśl Franciszek Barda emitió una opinión negativa sobre la imagen de “Jesús de la Misericordia” en el encuentro del episcopado polaco. Criticó la obra (imagen) de Adolf Hyła en términos artísticos y litúrgicos. Como resultado, el episcopado recomendó remover de las iglesias las imágenes de Jesús de la Misericordia.

(Antoni Mruk SJ. “El difícil camino del proceso de beatificación de la Sierva de Dios Sor Faustina Kowalska”. En “La misión de Sor Faustina”, Simposio de la Divina Misericordia en Cracovia-Łagiewniki (18-20 de Febrero de 1988). Cracovia, 1991, págs. 9-22)

   

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1954 - Mayor difusión del culto a distintas imágenes de “Jesús de la Misericordia” no aprobadas por el Santo Oficio.

Durante este período, el culto de la imagen de Jesús de la Misericordia se hizo un problema serio. El P. Michał Sopocko cuestionó la interpretación que el padre J. Andrasz dio de la imagen en el folleto Miłosierdzie Boże, ufamy Tobie! (¡Divina Misericordia, confiamos en Ti!). Según esta interpretación, el Salvador vestido de blanco cual médico en un hospital recorre la Tierra, sanando a la humanidad enferma. Es por eso que el artista Hyła hizo muchas pinturas con un fondo de mar, montañas, flores, fábricas, etc., lo cual no estaba de acuerdo a la visión de Sor Faustina.

   

La comisión de Arte declaró el 29 de Junio de 1954 sobre las obras de Tadeusz Okoń y Antoni Michalak: «La imagen del señor Okoń recuerda demasiado las pinturas de [Adolf] Hyła, la cual debería abandonarse debido al inaceptable feminismo en las imágenes para el culto, y la falta de armonización con la liturgia de la Octava de Pascua, a la cual debería ajustarse la imagen».

   

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1956-1957 - Después de la muerte del Arzobispo Romualdo Jałbrzykowski de Vilna, esta vez el Cardenal Stefan Wyszyński renovó su intento de cambiar la opinión de la Curia de Vilna.

El Arzobispo Romualdo Jałbrzykowski murió el 19 de Junio de 1955 en Białystok. Tras ser liberado en 1956, el Primado de Polonia Stefan card. Wyszyński (que había estado arrestado entre 1953 y 1956), volvió sobre esta materia. En una carta del 24 de Febrero de 1957, dirigida al entonces Prelado Capitular de la Archidiócesis de Vilna, Canónigo Mons. Adam Sawicki, le solicitó una respuesta en latín a las siguientes preguntas:

1. ¿Cuál es su posición sobre la devoción a la Divina Misericordia?
2. ¿Qué tanto se ha difundido la devoción en la diócesis?
3. ¿Tal devoción fue aprobada por el Obispo?

(Cf. Mons. PAWEŁ SOCHA “Desarrollo del culto de la Divina Misericordia en Polonia y el extranjero”, en “Peregrinus Cracoviensis”, nº 11. Cracovia, Universidad Jallegónica 2001, págs. 111-142)

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1957 - Respuesta NEGATIVA del P. Monseñor Adam Sawicki de la Curia de Vilna a la demanda del Cardenal Wyszyński.

En la carta del 24 de Febrero de 1957 a Mons. Sawicki, el Primado Wyszyński resalta que su petición era en nombre de la Congregación del Santo Oficio. El Canónigo Mons. Sawicki comisionó a Monseñor Antoni Cichoński, censor de libros de la diócesis, investigar sobre el tema. A partir de la opinión dada por este el 2 de Abril, respondió al Primado el 20 de Mayo.

El autor del informe señala que la devoción de la Divina Misericordia en la forma propuesta por Sor Faustina Kowalska requería una declaración autorizada sobre la credibilidad de estas revelaciones privadas, y que durante el mandato del Arzobispo Romualdo Jałbrzykowski y la regencia del Canónigo Adam Sawicki, el culto de la Divina Misericordia en la forma propuesta por Sor Faustina NO SE HABÍA POPULARIZADO en el territorio de la Archidiócesis de Vilna, y que el culto se propagaba espontáneamente sin la participación de la Comisión del Tribunal Eclesiástico.

(cf. P. Socha "Development of the cult of Divine Mercy in Poland and in the world", "Peregrinus Cracoviensis". 2000).

   

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1958 - PROHIBICIÓN oficial del Arzobispo Antoni Baraniak de Poznań al “nuevo” culto de la “Divina Misericordia”.

El 15 de Marzo de 1958, el Arzobispo Antoni Baraniak SDB de Poznań envió una declaración a todos los obispos en Polonia y el extranjero que la devoción de la Divina Misericordia estaba basada en ficción. El mensaje llegó también al Vaticano. El Padre Michał Sopoćko consideró el pronunciamiento del jerarca más como un mal entendido que un acto de mala fe.

(Antoni Mruk SJ. “El difícil camino del proceso de beatificación de la Sierva de Dios Sor Faustina Kowalska”. En “La misión de Sor Faustina”, Simposio de la Divina Misericordia en Cracovia-Łagiewniki (18-20 de Febrero de 1988). Cracovia, 1991, págs. 9-22).

  

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1958 - SEGUNDA CONDENACIÓN de las enseñanzas de Sor Faustina/Helena Kowalska.

El 19 de Noviembre de 1958 –durante el pontificado de Juan XXIII (28 de Octubre de 1958 - 3 de Junio de 1963)–, en la sesión plenaria del Santo Oficio, fue condenado el culto de la Divina Misericordia y las revelaciones presentadas por Sor Faustina, condena que los defensores de las “apariciones” afirman deberse a que «los expertos del Vaticano se apoyaron en copias imprecisas y pobremente traducidas de los manuscritos del Diario».

   

También explican los defensores de las “revelaciones” que «la autora de estas copias de los manuscritos de Sor Faustina, Sor Ksawera Olszamowska, obró de buena fe», mejorando «un poco la obra de Faustina. Ella dejó muchos fragmentos del texto, omitió muchas frases y cambió el significado de cosas “negando la existencia de herejías” en el Diario».

   

En el documento del 19 de Noviembre de 1958, leemos que «No se debe persistir en favor del carácter sobrenatural de las revelaciones de Sor Faustina. Las visiones y revelaciones de Sor Faustina no son de origen sobrenatural», no se debe introducir la fiesta de la Divina Misericordia, está prohibida la propagación de imágenes y escritos que difundan esta devoción según las formas transmitidas por Sor Faustina, y se las debe hacer retirar.

  

Además, el Santo Oficio aconseja a los obispos mantener la prudencia mientras se retiran de las iglesias los cuadros pintados según las visiones de la monja que hubiera en los altares y su eventual sustitución por otros que «de modo correcto representen el concepto de la Misericordia Divina»; y advierte seriamente (gravíssimum mónitum) al padre Michał Sopoćko ordenándole que «abandone la defensa y propagación de estas revelaciones y esa devoción».

  

Durante el pontificado de Juan XXIII (28 de Octubre de 1958 - 3 de Junio de 1963), el Santo Oficio permaneció sin cambios en su forma y composición que tuvo durante el pontificado del Papa Pío XII. Apenas en 1965, durante el pontificado de Pablo VI (21 de Junio de 1963 - 6 de Agosto 1978) el Santo Oficio fue reformado y transformado en la “Congregación para la Doctrina de la Fe”.

   

El Santo Oficio, conocido también como la Suprema y Sagrada Congregación de la Universal y Romana Inquisición, existía desde 1542 con el nombre de Inquisición Papal, y luego como Inquisición Romana. Los tribunales locales de la Inquisición Romana existieron hasta 1860; mientras que la Inquisición Papal fue una institución eclesial fundada en el siglo XIII para combatir las herejías.

  

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1959 - TERCERA CONDENACIÓN de las enseñanzas de Sor Faustina/Helena Kowalska.

Un año después, el 6 de Marzo de 1959, el Santo Oficio publicó nuevamente un decreto prohibiendo la distribución de las imágenes de la Divina Misericordia y los escritos de Sor Faustina promoviendo su culto. Se dejó a decisión de los obispos el método para remover las imágenes que ya se habían diseminado para el culto público.

Fuente: Acta Apostólicæ Sedis LI (1959), p. 271 (Http://www.vatican.va/archive/aas/documents/AAS-51-1959-ocr.pdf)

TRADUCCIÓN

SAGRADA Y SUPREMA CONGREGACIÓN DEL SANTO OFICIO

NOTIFICACIÓN

  

La Sagrada y Suprema Congregación del Santo Oficio se permite informar que habiendo puesto en examen las supuestas visiones y revelaciones de Sor Faustina Kowalska, del Instituto de Nuestra Señora de la Misericordia, fallecida en Cracovia en 1938, ha determinado lo siguiente:

1. Debe prohibirse la difusión de las imágenes y de los escritos que presentan la devoción de la Divina Misericordia EN LA FORMA PROPUESTA POR LA MISMA SOR FAUSTINA.
2. Apelamos a la prudencia de los obispos el deber de remover las precitadas imágenes, en el caso de que éstas se hallen expuestas al culto.

   

Dado en el Palacio del Santo Oficio, a 6 de Marzo de 1959.

   

(Fdo.) HUGH O’FLAHERTY, Notario del Santo Oficio

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1965 - Esfuerzos adicionales del cardenal Karol Wojtyła por la beatificación de Sor Faustina/Helena Kowalska.
A pesar de las numerosas prohibiciones de la autoridad eclesiástica en Polonia, la condena por el Santo Oficio y la entrada de la literatura de Faustina en el Índice de Libros Prohibidos, el cardenal Karol Wojtyła continuó resistiendo e insistiendo en llevarla más allá de la frontera post-soviética.

  
En el Kalendarium życia Karola Wojtyła (Calendario de la vida de Karol Wojtyła), hay una anotación de fecha 22 de Agosto de 1965: "Me están bombardeando con la cuestión de iniciar el proceso, así que todo el asunto lo entrego en las manos del obispo Julian Groblicki», el cual el 21 de Octubre de 1965 presidió una sesión solemne de apertura del proceso informativo sobre la vida y los virtudes de Sor Faustina. Mons. Józef Szczotkowski fue designado presidente del tribunal, los padres Jerzy Mrówczyński CR (resurrectionista) y Walerian Marian Moroz CSMA (Miguelita) como promotores de la fe; Mons. Stanisław Dąbrowski, y los padres Ludwik Piechnik SJ, Anselm Kubit OFM Conv. y Bonawentur Kadeja como jueces; y como notarios los padres Augustyn Dziędziel SDB, Antoni Dabija SJ y Stefan Marszowski.

  
Durante 75 sesiones del Tribunal, se oyeron a 46 testigos, se recopilaron cartas y se llevó a cabo un juicio sobre la falta de culto público.

  
El “juicio” terminó el 20 de Septiembre de 1967, luego de la abolición del Índice de Libros Prohibidos, en una sesión solemne presidida por el Metropolitano de Cracovia, el cardenal Karol Wojtyła, luego de la misa y la firma de las actas del proceso en la capilla arzobispal en Cracovia.

  

Y todo esto estaba basado en información no confirmada por documento alguno:

"El cardenal Karol Wojtyła, estando en la tercera sesión del Concilio Vaticano II, habló con el prefecto de la Conregación del Santo Oficio, el cardenal [Alfredo] Ottaviani, preguntándole si la Notificación de 1959 impedía la posibilidad de un proceso de beatificación. Sobre esta conversación, le dijo a Sor María Beata Piekut [quien sucedió a Sor María Ksawera Olszamowska, encargada de la congregación en la causa de Sor Faustina]: No solo me permitió iniciar el proceso de Sor Faustina, sino que me dijo que lo hiciera con la máxima prontitud, pues había que hacerlo mientras todavía hayan testigos oculares. Recomendó que no se diera acceso a nadie al Diario, ni a los sacerdotes, y que no se citaran en ninguna parte fragmentos de la obra, ni siquiera en oraciones, folletos o estampas. En cambio, dispuso que se compusiera una oración para pedir la beatificación de Sor Faustina, procurando obtener el imprimátur para su debida divugación».

(Antoni Mruk SJ. “El difícil camino del proceso de beatificación de la Sierva de Dios Sor Faustina Kowalska”. En “La misión de Sor Faustina”, Simposio de la Divina Misericordia en Cracovia-Łagiewniki (18-20 de Febrero de 1988). Cracovia, 1991, págs. 9-22).

   

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1966 - Abolición por el Concilio Vaticano II del Índice de Libros Prohibidos, que contenía los libros de las revelaciones de Sor Faustina/Helena Kowalska.
14 de Junio de 1966 - Una notificación de la “Congregación para la Doctrina de la Fe” declaró que el “Índice de Libros Prohibidos” no tiene importancia disciplinaria y penal. Desde ahí, seguir el “Índice” era un asunto de conciencia para cada fiel.

  

El “Índice de Libros Prohibidos” (en latín Index librórum prohibitórum o Index Expurgatórius) continuaba la tradición del siglo IV de decretar prohibiciones a la posesión y lectura de varias obras percibidas como heréticas, fue establecido por bula papal de Pablo IV el 5 de Enero de 1559, so pena de excomunión.

   
El 7 de Diciembre de 1965, como parte de la reforma de la Curia Romana, Pablo VI transformó mediante el Motu Proprio Íntegræ Servándæ el Santo Oficio en la actual “Congregación para la Doctrina de la Fe”. Esta reforma no se limitó solo a un cambio de nombres, sino que también incluyó algunos cambios en la organización (v.g. supresión del cargo de Comisionado General) y funciones (v.g. abolición del Índice de Libros Prohibidos), junto con cambio de personal.

   
El cambio efectuado por la reforma de 1965, el cambio de personal y los años de cambio doctrinal desde el Concilio Vaticano II resultaron en un cambio de actitud de la “Iglesia” frente a la condena emitida por la Iglesia Católica respecto a Sor Faustina.

  
Documentos del Concilio Vaticano II:

1. 4 de Diciembre de 1963 - Constitución sobre la Sagrada Liturgia “Sacrosánctum Concílium”
2. 4 de Diciembre de 1963 - Decreto sobre los medios de comunicación social “Inter Mirífica”
3. 21 de Noviembre de 1964 - Constitución dogmática sobre la Iglesia “Lumen Géntium”
4. 21 de Noviembre de 1964 - Decreto sobre las Iglesias Católicas Orientales “Orientálium Ecclesiárum”
5. 21 de Noviembre de 1964 - Decreto sobre el ecumenismo “Unitátis Redintegrátio”
6. 28 de Octubre de 1965 - Decreto sobre el ministerio pastoral de los obispos “Christus Dóminus”
7. 28 de Octubre de 1965 - Decreto sobre la renovación de la vida religiosa “Perféctæ Caritátis”
8. 28 de Octubre de 1965 - Decreto sobre la formación sacerdotal “Optátam Tótius”
9. 28 de Octubre de 1965 - Declaración sobre la educación cristiana de la juventud “Gravíssimum Educatiónis”
10. 28 de Octubre de 1965 - Declaración sobre la relación de la Iglesia con las religiones no cristianas “Nostra Ætáte”
11. 18 de Noviembre de 1965 - Constitución dogmática sobre la Divina Revelación “Dei Verbum”
12. 18 de Noviembre de 1965 - Decreto sobre el apostolado de los laicos “Apostólicam Actuositátem”
13. 7 de Diciembre de 1965 - Declaración sobre la libertad religiosa “Dignitátis Humánæ”
14. 7 de Diciembre de 1965 - Decreto sobre la actividad misionera de la Iglesia “Ad gentes divínitus”
15. 7 de Diciembre de 1965 - Decreto sobre el ministerio y vida de los presbíteros “Presbyterórum Órdinis”
16. 7 de Diciembre de 1965 - Constitución pastoral sobre la Iglesia en el mundo actual “Gáudium et Spes”

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1968 - Apertura del proceso de beatificación de Sor Faustina/Helena Kowalska.
Aun sin la derogación oficial de la condena de las enseñanzas de Sor Faustina, pero con la remoción del “obstáculo” del Índice de Libros Prohibidos, la iglesia comenzó en una forma extraña el proceso de beatificación al nivel de la “Congregación para la Causa de los Santos”.

   

Las actas del proceso fueron transferidas a la Congregación para la Causa de los Santos, la cual el 31 de Enero de 1968, mediante un decreto oficial abrió el proceso de beatificación de la Sierva de Dios. La función de Postulado fue encargada al Padre Antoni Mruk, SJ, profesor de la Universidad Pontificia Gregoriana de Roma (desde el 18 de Febrero de 1967), y como vicepostulador fue designado el Padre Izydor Borkiewicz OFMConv, quien ya estuvo trabajando en el proceso diocesano, en Polonia durante los años que duró la etapa diocesana. La Congregación para las Causas de los Santos desde el principio del proceso llevó a cabo las tareas del proceso con mucho cuidado y prudencia, consultando en numerosas ocasiones a la Congregación para la Doctrina de la Fe y a la Conferencia Episcopal Polaca. (Cf. ANTONI MRUK SJ. “El difícil camino del proceso de beatificación de la Sierva de Dios Sor Faustina Kowalska”. En “La misión de Sor Faustina”, Simposio de la Divina Misericordia en Cracovia-Łagiewniki (18-20 de Febrero de 1988). Cracovia, 1991, págs. 9-22).

   

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1977 - Petición del cardenal Karol Wojtyła para la revisión de la condena de 1959 a Sor Faustina.
En noviembre de 1977, el cardenal Karol Wojtyła se dirigió a la Congregación para los Asuntos de la Fe, preguntando si sería posible la revisión de la Notificación de 1959. La Congregación accedió a esta petición y después de haber examinado el asunto, y habiendo recibido una carta en la que el Primado de Polonia Stefan Wyszyński solicitaba la postulación, finalmente el día 15 de abril de 1978 revocaba la prohibición de la Notificación, con lo que se permitía la propagación del culto de la Divina Misericordia en las formas previstas por Sor Faustina. (Antoni Mruk SJ. “El difícil camino del proceso de beatificación de la Sierva de Dios Sor Faustina Kowalska”. En “La misión de Sor Faustina”, Simposio de la Divina Misericordia en Cracovia-Łagiewniki (18-20 de Febrero de 1988). Cracovia, 1991, págs. 9-22).

 

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1978 - Revocación de la condena de Sor Faustina/Helena Kowalska.
15 de Abril de 1978 - Durante el pontificado de Pablo VI (21 de Junio de 1963 - 6 de Agosto de 1978), la “Congregación para la Doctrina de la Fe” publicó una Notificación derogando la condena de 1959, declarando que nuevos documentos (alegadamente) desconocidos en 1959 arrojaban nueva luz sobre la declaración sobre las enseñanzas de Sor Faustina.
Fuente: Acta Apostólicæ Sedis LXX (1978), p. 350
(http://www.vatican.va/archive/aas/documents/AAS-70-1978-ocr.pdf)
TRADUCCIÓN

SAGRADA CONGREGACIÓN PARA LA DOCTRINA DE LA FE

NOTIFICACIÓN

   

De diversas partes del mundo, especialmente de Polonia, e incluso de manera autorizada, se ha preguntado a esta Congregación si las prohibiciones contenidas en la Notificación de la Sagrada Congregación del Santo Oficio, publicada en AAS 51 (1959) 271, referentes a la devoción a la Divina Misericordia, en las formas propuestas por sor Faustina Kowalska, se deben considerar todavía en vigor.

   

Esta Congregación, teniendo presentes muchos documentos originales, desconocidos en 1959, y considerando el profundo cambio de las circunstancias, teniendo en cuenta el parecer de muchos Ordinarios polacos, declara que las prohibiciones contenidas en la citada Notificación ya no son vinculantes.

   

En la sede de la Sagrada Congregación, 15 de abril de 1978.

     

(Fdo.) FRANJO Card. ŠEPER

Prefecto

   

(Fdo.) ✠ JÉRÔME HAMER OP, Arzobispo titular de Lorio.

Secretario                                        

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1981 - Decreto de la Congregación para la continuación del proceso de beatificación.
La primera tarea del proceso en Roma consistió en examinar los escritos de la Sierva de Dios, especialmente el “Diario” y su edición crítica.

   

El padre prof. Ignacy Różycki fue quien hizo el análisis teológico de los escritos de Sor Faustina, manteniendo al principio una actitud más bien escéptica en relación con la Sierva de Dios. Sin embargo, el autor, en el informe final, un estudio exhaustivo formado por 500 páginas de folio impreso, defendió la autenticidad de las revelaciones de sor Faustina y su carácter sobrenatural. Este trabajo le valió un reconocimiento especial de la Congregación para la Causa de los Santos, tal y como destacó más tarde el Postulador. El segundo censor también emitió un dictamen positivo acerca del “Diario”.

  
A pesar de la dura labor de los “censores”, aún hoy en el “Diario” y la “oración a la Divina Misericordia” pueden hallarse declaraciones heréticas y cuestionables. ¿Hay una conspiración del silencio o delectación con ideas heréticas?

  
Gracias a las opiniones favorables, la Congregación emitió el 19 de Junio de 1981 un decreto firmado por su prefecto, el cardenal Pietro Palazzini, permitiendo la continuación del proceso de beatificación.

  
En 1981, fue publicada en Roma la segunda edición en polaco (después de la “edición” de 1951) del “Diario” de Sor Faustina, que se hizo la base para la traducción en otros idiomas, incluido el italiano, para propósitos del proceso de beatificación.

  
(Antoni Mruk SJ. “El difícil camino del proceso de beatificación de la Sierva de Dios Sor Faustina Kowalska”. En “La misión de Sor Faustina”, Simposio de la Divina Misericordia en Cracovia-Łagiewniki (18-20 de Febrero de 1988). Cracovia, 1991, págs. 9-22)

   

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1983 - Supresión del oficio de “Promotor de la Fe” (“Abogado del diablo”) de los procesos de beatificación y canonización.

El Promotor de la Fe (en latín Prómotor Fídei), conocido coloquialmente como el Abogado del diablo (en latín Advocátus diáboli) era un funcionario que hacía presencia durante el proceso de beatificación y canonización, el cual

• Tenía el derecho y la obligación de participar en todas las reuniones;
• Tenía el derecho de inspeccionar los archivos del procedimiento;
• Era informado de nuevas cartas que fueran anexadas al expediente;
• Buscando la verdad, «podía plantear cualquier dificultad, tanto en términos fácticos como también de la ley existente y su aplicación para casos específicos»;
• Estaba obligado a presentar por escrito sus dudas y comentarios respecto a las virtudes, martirio o milagros del siervo de Dios;
• Se remarcaba en tal función que «debería de oficio oponerse lo suficiente al proceso de beatificación, pero no tanto que violase la verdad»
• En su presencia y la del prefecto de la Congregación, se abrían los archivos procesales en materia de opinión de santidad o de martirio,
• Podía suspender el caso hasta que se hallara quién y por qué razón está tratando de formar la opinión de [la santidad] del siervo de Dios publicando su biografía o descripción de los milagros realizados por su medio sin la aprobación del ordinario y el consentimiento de la Santa Sede,
• Estaba para proteger y defender la pureza de la Fe,
• En nombre de la Iglesia, se aseguraba que durante el proceso se observara estrictamente el derecho canónico,
• Estaba para presentar una verdad absoluta y objetiva, por encima de simpatías, aversión o prejuicio humano,
• Velaba que no fueran minadas la seriedad de la Iglesia y la dignidad de la Fe.
• Aparecía en una posición opuesta al postulador (conocido como Promotor de la Causa o Abogado de Dios),
• Para una mejor visión del caso, podía acusar de fraude cualquier posible milagro.

(Cf. Dra. LIDIA FIEJDASZ-BUCZEK. "Participación de los abogados en el proceso de canonización: Un estudio histórico y legal", en Anales de Ciencias Jurídicas, tomo XXIII, nº 4. Universidad Católica de Lublín, 2013, pág. 91-118).

    

En su bula Cum secúndum, el Papa Inocencio III (1198-1216) demandó que a fin de canonizar a alguien, tenía que conocerse la verdad objetiva sobre la vida de esa persona. Estas verdades debían detectarse mediante testigos calificados que declarasen sobre la opinión de santidad (P. Dr. MICHAŁ MACHEJEK OCD - Can. Dr. WŁADISŁAW PADACZ. Sprawy beatyfikacyjne na terenie Diecezji /Procesos de beatificación en terreno diocesano, Poznań, Ed. Pallotinum 1957, pág. 13).

  

A su vez, el Papa Honorio III (1216-1227) en la bula Esti elécti dio medidas para descubrir esta verdad, a saber, los testimonios juramentados respecto a las virtudes y milagros deben mostrar claramente que «el siervo de Dios llevó una vida cristiana santa y ejemplar basada en el amor a Dios y confirmada por milagros».

   

El incremento de canonizaciones en el siglo XIII significó que el procedimiento judicial tenía que adaptarse a las nuevas circunstancias y ser suplementado en tal forma que el Papa, cuando decidiera sobre canonizaciones, no tuviera dudas respecto a la conducción detallada e imparcial del proceso. Bajo tal circunstancia, una persona fue introducida al proceso para asegurarse que solo fueran elevadas a los altares las personas que lo merecían. Esta función fue inicialmente desarrollada por el Promotor fiscal (Advocátus fiscális), que después adoptó el nombre de Promotor Fídei.

   

La institución del promotor fiscal fue tomada del proceso inquisitorial introducido a comienzos del siglo XIII por el Papa Inocencio III (1198-1216)

   

Por primera vez encontramos el cargo de Promotor de la Fe hacia 1520 en un breve del Papa León X (1513-1521), y nuevamente en la bula respecto de la canonización de San Lorenzo Justiniano. En este caso, luego de completarse el examen general, el Papa ordenó un examen detallado: escuchar a los testigos y designar un promotor de la Fe.

   

Urbano VIII (1623-1644), teniendo en cuenta el desarrollo del proceso inquisitorial y el incremento de asuntos de canonización más complicados, ordenó al promotor de la fe tomar parte activa en todos casos.

   

Bajo la constitución Cœléstis Hierúsalem cives del 5 de Julio de 1634, 24, el promotor de la Fe:

• Tenía el derecho y la obligación de participar en todas las reuniones;
• Tenía el derecho de inspeccionar los archivos del procedimiento;
• Era informado de nuevas cartas que fueran anexadas al expediente;
• Buscando la verdad, «podía plantear cualquier dificultad, tanto en términos fácticos como también de la ley existente y su aplicación para casos específicos»;
• Estaba obligado a presentar por escrito sus dudas y comentarios respecto a las virtudes, martirio o milagros del siervo de Dios;

Debe señalarse que Urbano VIII en el punto 9.º de su Decreto: Prohibición de presentar casos ficticios del 27 de Enero de 1631 anotó que el cargo de Promotor de la Fe estaba indicado en tal función que «debería de oficio oponerse lo suficiente al proceso de beatificación, pero no tanto que violase la verdad».

   

Los sucesores de Urbano VIII aclararon las tareas del Promotor de la Fe. Inocencio X (1644-1655), mediante decreto del 3 de Diciembre de 1650, ordenó que los expedientes sobre el proceso de opinión de santidad o de martirio se abran en presencia del Promotor de la Fe y el prefecto de la Congregación.

   

Inocencio XI (1676-1689) mediante el decreto Novíssima del 15 de Octubre de 1678 ordenó que el Promotor de la Fe formulara sus observaciones si el postulador, el fiscal o el abogado excedían sus competencias durante el proceso de canonización o si la evidencia era inadecuada.

   

Benedicto XIV (1740-1758) en De Servórum Dei señaló que «el promotor de la fe planteaba todas las dificultades, aun las más pequeñas, al menos en materias de la mayor importancia».

   

El Promotor de la Fe, de acuerdo al decreto general de Pío VII (1800-1823), podía pausar la causa hasta encontrar quién y por qué razones estaba tratando de formar una opinión [de santidad] sobre el siervo de Dios mediante la publicación de sus biografías o descripciones de milagros realizados por su medio sin aprobación del Ordinario y el parte respectivo a la Santa Sede.

   

Luego de consultar con el Promotor de la Fe, se otorgaba el permiso para las Misas y Oficios propios. Según las instrucciones de Pío IX, el Promotor de la Fe examinaba si las postulaciones no fueron preparadas bajo la influencia de opiniones de santidad artificialmente inducidas. Si descburía esto, él podía detener los procedimientos.

   

En el Código de Derecho Canónico de 1917, el promotor de la fe también tenía la tarea de guardar la pureza de la fe y defenderla, asegurar en nombre de la Iglesia que se observara estrictamente las normas del derecho canónico en el curso del proceso, y estaba para brindar una verdad absoluta y objetiva no superada por simpatías humanas o con reluctancias o prejuicios, para asegurar que no fueran minadas la seriedad de la Iglesia y la dignidad de la Fe. Él se presentaba en una posición opuesta al postulador. Para una mejor visión del caso, hacía alegatos contra el carácter de sagrado de las virtudes y milagros, escribiendo las denominadaa animadversiones.

   

Luego de la reforma realizada por Juan Pablo II en 1983, los asuntos relacionados con la canonización fueron excluidos del Código de Derecho Canónico.

   

La legislación específica para el can. 1403 § 1 (Constitución Apostólica Divínus perfectiónis Magíster del 25 de Enero de 1983, las Normæ servándæ publicadas para tal fin el 7 de Febrero de 1983, como también la Instrucción Sanctórum Mater del 17 de Mayo de 2007), como la reforma de 1983, no prevé la participación de un abogado en el proceso de canonización en la fase diocesana. Por otro lado, en la fase romana, la ley permite el nombramiento de un abogado como colaborador externo para el cargo del editor de la posítio, de entre los abogados romanos.

   

En la ley reformada por Juan Pablo II, hay otro concepto de los procesos de canonización. Este no es un proceso contencioso, sino un proceso comparable al contencioso, esto es, conducido de forma similar. No hay partes. En 1983, el rol del promotor de la fe cambió. Ya no es, como en el pasado, el guardián de la ley y censor de importancia de los procesos diocesanos, sino que actúa como teólogo del prelado pro rei veritáte. «Al estudiar los procesos de canonización, él se enfoca en los aspectos teológicos del caso bajo estudio: virtudes heroicas, martirio, milagro o culto inmemorial».

  

(En Dra. LIDIA FIEJDASZ-BUCZEK "Participación de los abogados en el proceso de canonización: Un estudio histórico y legal", en Anales de Ciencias Jurídicas, tomo XXIII, nº 4. Universidad Católica de Lublín, 2013, pág. 91-118).

  

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1993 - Beatificación de Sor Faustina.

El 7 de Marzo de 1992, el Papa Juan Pablo II promulgó el decreto de heroicidad de las virtudes de Sor Faustina, el 21 de Diciembre de 1992 firmó el decreto sobre el milagro a Maureen Digan debido a su intercesión y fijó la fecha de la beatificación para el 18 de Abril de 1993 en Roma.