El sitio web brasileño Fuxico Gospel, dedicado al género musical en cuestión, reveló que los cantantes Heric Tolentino (28) y Beresix (Genilson Costa, 36), pertenecientes al grupo Kemuel, asistieron a una fiesta de Halloween el 31 de Octubre pasado.
Las fotos del convite fueron publicadas por una amiga de los cantantes, y muestran que al parecer es una fiesta de temática gay (por los disfraces de algunos de los concurrentes), y había consumo de alcohol.
Aunque Heric Tolentino dijo en su cuenta de Instagram
«Era un cumpleaños que la cumplimentada escogió fuera de disfraces. Fui de Itachi porque amo Naruto, jajaja. No conocía la mayor parte de los que estaban allá. Independiente de creencias, religión o cualesquiera sean nuestras diferencias, trato a todos con amor y respeto. ❤ Fin»
la fiesta era de Halloween, como dijo posteriormente la mujer que subió las fotos. Las reacciones al hecho no se hicieron esperar: casi todas de desaprobación, y varias iglesias protestantes cancelaron eventos que tenían al grupo en su planilla.
Nacido en 2007, Kemuel (que significa Congregación de Dios) es un grupo interdenominacional, que tiene varios cantantes de varias iglesias protestantes. Ya contaba con 80 cantantes, 30, 15 y hoy tiene 5, siempre liderada por David Marx. En el grupo están Priscilla Padilha de Oliveira, Elaine Marx (esposa de David).
No es la primera polémica que enfrenta el grupo Kemuel: David Marx en Enero de 2020 hizo dividir al sector protestante por publicar una foto mostrando tatuajes en sus brazos (él usa tatuajes, piercings y se decoloró el cabello); y al año siguiente, Ludi Moreira denunció ser víctima de abusos sicológicos y amenazas para impedirle abandonar el grupo e iniciar carrera como solista.
COMENTARIO:
El pastor Anderson Silva, que había sido cuestionado en Instagram por el hecho, dijo:
El pastor Anderson Silva, que había sido cuestionado en Instagram por el hecho, dijo:
«He ahí el motivo por el cual desistí de esa infancia gospel, ¿entiendes? Vives un patrón de pecado, pero haces parte del sistema que produce dinero, para vivir una vida deshonrando a la iglesia y a Dios».
En todo caso, el hecho es que la música religiosa contemporánea (tanto protestante como conciliar), como negocio, ha hecho que sus interpretes se vuelvan a comportamientos (dentro y fuera de los escenarios) contrarios a lo que dicen representar. De razón que San Pablo dice sobre estos últimos tiempos:
«Se levantarán hombres amadores o pagados de sí mismos, codiciosos, altaneros, soberbios, blasfemos, desobedientes a sus padres, ingratos, facinerosos, desnaturalizados, implacables, calumniadores, disolutos, fieros, inhumanos, traidores, temerarios, hinchados, y más amadores de deleites que de Dios, mostrando, sí, apariencia de piedad, o religión, pero renunciando a su espíritu». (II Epístola a Timoteo III, 1-4, versión de Mons. Félix Torres Amat).
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